Nunca falta un escándalo, una transformación radical, un divorcio con consecuencias millonarias: en la llamada Meca del Cine, la cultura pop contemporánea siempre se cuece al calor de incendios mediáticos
Ciudad de México, 1 de enero (SinEmbargo).- Cuando en la primera semana de enero se estrene el nuevo filme de Quentin Tarantino, The Hateful Eight –con un protagónico que ha vuelto a poner en el candelero al veterano Kurt Russell y cuyo reparto incluye a nuestro Demián Bichir-, los cuerpos de policía de Nueva York y Los Ángeles estarán muy nerviosos.
Con verdadero espíritu de cuerpo y mucha ira, los agentes prometieron boicotear la película en represalia a la protesta callejera en la que participó el cineasta para mostrar su desacuerdo por los abusos, con un cartel que llevaba la leyenda “Hay que parar el terror policial”.
Su forma de alertar sobre el gatillo fácil de la seguridad institucionalizada tuvo las consecuencias mencionadas, un hecho que no preocupa a Tarantino, dispuesto a pagar el costo por una acción política necesaria en “un ser humano con conciencia” que “tratas de parar eso, cuando ves que están matando a la gente”, según explicó.
Ese fue uno de los escándalos del año para Hollywood, el territorio donde nunca falta una tragedia o un episodio sórdido que da cuenta del lado oscuro siempre latente allí, donde todo brilla.
Si en 2013, el mundo del espectáculo lamentó la muerte por sobredosis del protagonista de la serie Glee, Cory Monteith, esta vez es su compañero Mark Salling el que ha puesto el programa de nuevo en boca de todos al ser detenido por poseer en su computadora más de 100 imágenes con pornografía infantil.
Salling, quien interpretó al personaje de Noah Puckerman en Glee, fue arrestado en su casa de Sunland, California, y llevado a una cárcel de Los Ángeles, donde pagó una fianza de 20 mil dólares para quedar en libertad, no obstante lo cual deberá comparecer ante la justicia el próximo 20 de enero.
LAS KARDASHIAN, SIEMPRE LAS KARDASHIAN
Fue el año donde la familia Kardashian no cedió su protagonismo mediático, entre otras cosas porque el jefe de familia, el ex atleta Bruce Jenner, pasó a ser Caitlyn, luego de someterse a una transformación de género con la que el ex campeón olímpico de decatlón, actor y celebridad televisiva, cumplió a los 65 años un sueño que albergaba desde hace mucho tiempo atrás.
En una entrevista concedida a la cadena ABC, el padrastro de Kim Kardashian habló de una existencia solapada en la que siempre sintió la necesidad de cambiar de género, hasta que un proceso que costó 4 millones de dólares e incluyó operaciones estéticas y tratamientos con hormonas le permitió mostrarse tal cuál es.
Su sinceridad y valentía no hicieron más que despertar simpatía en la mayor parte de la sociedad estadounidense, en su propia familia –que lo apoyó en todo momento- y en la comunidad LGTB que vio con buenos ojos que alguien tan famoso usara su celebridad para poner a la luz pública el drama de las personas transgénero. Jenner, además, tuvo su propia serie televisiva.
Otro personaje de la familia Kardashian, el siempre explosivo y provocador Kanye West, no despertó tantas simpatías cuando dijo que quería ser Presidente de los Estados Unidos, pero nada menos podía esperarse del esposo de Kim, quien está a la espera del segundo hijo de la pareja, en un embarazo de riesgo y en medio de presuntas infidelidades por parte del músico.
Aunque nadie niega sus grandes cualidades para la música, el ego de Kanye Omari West, nacido en Atlanta el 8 de junio de 1977 -aunque creció en Chicago- es un escándalo en sí mismo y para colmo de males el mismísimo Paul McCartney ha llegado a compararlo con John Lennon.
Él no se queda corto, ha dicho ser como Pablo Picasso, como Andy Warhol, incluso el nuevo William Shakespeare. Chapó.
LOS AMORES Y DESAMORES DE HOLLYWOOD
Un divorcio a tiempo es como se sabe siempre una oportunidad mediática, aun cuando no siempre sea el deseo de la pareja en cuestión sacar sus trapos sucios al sol de los periódicos y las redes sociales.
Tal el caso de Matt Damon y su esposa durante una década, la argentina Luciana Barroso, quienes estarían divorciándose, porque el actor habría aumentado sus salidas nocturnas junto al conocido Ben Affleck -recientemente separado de su esposa- la actriz Jennifer Garner.
Por ahora se trata de rumores que produjeron un escándalo mediático en noviembre, pero del que no ha vuelto a saberse nada en el último mes del año, aunque nada tan escandaloso como el presunto divorcio entre Angelina Jolie y Brad Pitt, quienes habrían empezado un juicio para poner fin a un matrimonio que cuenta con una fortuna de 480 millones de dólares.
Son especulaciones que se repiten sin cesar en los medios internacionales, pero que no han sido confirmadas por fuentes fiables y mucho menos por la glamorosa pareja, considerada la más estable del ya por sí voluble universo de Hollywood.
Los que sí se han separado han sido la cantante y compositora Gwen Stefani y el vocalista y guitarrista Gavin Rossdale, después de convivir 20 años, tiempo en el que tuvieron tres hijos: Kingston, Zuma y Apollo.
Halle Berry y Oliver Martinez se dijeron adiós después de dos años de matrimonio. La actriz de The Bing Bang Theory, Kaley Cuoco, duró apenas 21 meses de casada con el tenista Ryan Sweeting y el protagonista de Mad Men, Jon Hamm, ha vuelto a estar soltero luego de separarse de la actriz y guionista Jennifer Westfeldt.
Adiós a la pareja formada por el cineasta Tim Burton y la actriz Helena Bonham-Carter. Adiós a Dina Eastwood, dijo el viejo Clint y, lo peor de lo peor, adiós se han dicho la Rana René y Miss Pig, luego de 40 años de unión sentimental.
COSBY, ¿UN DEPREDADOR SEXUAL?
El amor va y viene, como sabemos, pero nunca se regresa de la condena social cuando eres visto como un verdadero depredador sexual y tus presuntas víctimas se disponen a llevarte a la justicia, como le ha pasado al comediante Bill Cosby en el año que acaba de terminar.
Más de 50 mujeres han acusado al actor de abuso sexual y una sola ha logrado llevarlo a tribunales por un caso acontecido en 2004 y del que Cosby se ha visto librado por ahora merced a pagar una fianza de 1 millón de dólares.
El cantante canadiense Justin Bieber se las ha arreglado para ocupar los titulares al menos una vez por mes en el 2015, desde su presunta participación en orgías sexuales, los rumores de sobredosis, un arresto por llevar marihuana en su carro.
Por otra parte, las festicholas de Charlie Sheen han dejado de ser graciosas luego de que el propio actor difundiera la noticia de que es portar del virus del SIDA y mucho se ha lamentado la temprana muerte de Bobby Kristina Brown, hija de la fallecida cantante Whitney Houston (1963-2012). La adolescente apareció inconsciente en la bañadera y se mantuvo en coma durante seis meses, hasta su muerte el pasado 26 de julio.
Unas mascotas que ingresó a Australia sin permisos oficiales le podrían costar a Amber Heard, la nueva esposa de Johnny Depp, una multa millonaria y si no fuera porque sus declaraciones racistas trascienden la esfera del entretenimiento, el comediante del año podría ser Donald Trump, el precandidato republicano a la Presidencia de los Estados Unidos.
Al final del año, tras 25 años, Macaulay Culkin regresó a su papel de Kevin McAllister, de Mi pobre angelito.
El actor de 35 años aparece en una grabación manejando un taxi, y comienza a relatar al pasajero la historia cuando su familia lo olvidó por erro en su casa de Chicago en la década de los 90.
La grabación es un promocional de la serie DRYVRS, protagonizada por Culkin, quien lo intenta luego de una larga adicción a las drogas que lo ha mantenido lejos de la pantalla.
