El reconocimiento de este organismo del gobierno estadounidense se suma al otorgado por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) al estado de Sonora como libre de Garrapata Boophilus, desde su publicación en el Diario Oficial el 27 de noviembre de 1972.

En un comunicado, la Sagarpa expuso que en 2014, el APHIS propuso la modificación del reglamento que estipula los requisitos de importación de bovinos de México hacia Estados Unidos.

Lo anterior, mediante el reconocimiento del estado de Sonora como una región del país que está libre de garrapata Boophilus spp, cuya aceptación se publicó en el Federal Register (el equivalente al DOF, en EU) el pasado 26 de febrero y entró en vigor el 30 de marzo de 2015.

La modificación incluye exentar del tratamiento de inmersión acaricida, y los requisitos de documentación asociados con esta acción al ganado y a otros rumiantes procedentes de Sonora.

Eso, como condición de elegibilidad para el ingreso a Estados Unidos, siempre y cuando se cumpla con ciertos estándares zoosanitarios.

Refiere que tal modificación de la reglamentación, los exportadores de ganado de Sonora tendrán que presentar una solicitud, ya sea para su inspección o inmersión, pero no ambos, como se requería anteriormente.

Asegura que con el reconocimiento se eliminan también las restricciones a la exportación de bovinos y otros rumiantes de Sonora y reduce los costos asociados con el baño de inmersión contra la garrapata Boophilus spp.

Tal operación mejora la actividad del comercio internacional, así como las remesas derivadas de la exportación de rumiantes hacia Estados Unidos, explica la Sagarpa.

“Es por ello que este logro fortalece el estatus zoosanitario de Sonora a nivel internacional e impacta positivamente en la producción ganadera de la entidad, valuada en más de tres mil 400 millones de pesos”.

Adicionalmente, continúa, da certidumbre a los ganaderos, garantiza el libre tránsito de los bovinos y mejora las condiciones de acceso a los mercados nacional y global tanto del ganado como de sus productos, lo que hace a la actividad más competitiva y rentable.

Para alcanzar este objetivo, se coordinaron las acciones de la Sagarpa, a través de los técnicos del Senasica, con el gobierno de Sonora y los ganaderos locales, quienes desarrollaron y ejecutaron acciones sanitarias para el diagnóstico, control, erradicación y vigilancia epidemiológica, tanto activa como pasiva de la garrapata.

Lo anterior, mediante el control de la movilización y la inspección del ganado bovino en el estado.

El daño de la piel que causa el piquete y los abscesos que se desarrollan por las garrapatas Booophilus spp producen pérdidas importantes en el valor de la ganadería bovina, pues transmiten toxinas al animal.

En el caso de las vacas lecheras, estos abscesos en su mayoría están involucrados en el daño y la pérdida de uno o más cuartos de la glándula mamaria, con la consecuente disminución de la producción láctea.

Además, las garrapatas tienen un efecto nocivo directo sobre la ganancia de peso de los animales; en el ganado de engorda, cada garrapata adulta repleta de sangre demostró reducir la ganancia de peso diaria en 0.6 gramos.