México, 1 Jul (Notimex).- Senadores de la República debatieron con expertos e integrantes de los sectores involucrados en el conflicto entre taxistas y empresas como Uber y Cabify, sobre el tema de regulación del transporte público.
El Senador Mario Delgado Carrillo, presidente de la Comisión del Distrito Federal, dijo que el servicio de taxis tradicionales responde a una regulación vigente y es injusto decir que este transporte no se renuevan o no usa tecnologías para modernizarse.
Para generar competencia, consideró, es fundamental que la reglamentación no tenga un enfoque contributivo, señaló al participar en el Diálogo “Nuevas tecnologías y movilidad: aplicación y regulación en ciudades y zonas metropolitanas”.
El legislador del PRD también se pronunció por una regulación más transparente “que se termine con el tráfico de concesiones de las placas como botín de pago de favores políticos”, o que no se vea al servicio de taxis como fuente de recaudación desde el gobierno, sino como una oportunidad para incentivar el desarrollo.
Delgado Carrillo comentó que junto con la Senadora Mariana Gómez del Campo, del PAN, presentaron una iniciativa para elevar a rango constitucional el derecho a la movilidad, la cual se encuentra en análisis por parte de la Cámara de Diputados.
En su oportunidad, Rufino León Tovar, secretario de Movilidad del Distrito Federal, destacó que el gobierno responderá a los intereses de la gente, cuidando los de otros actores de la ciudad y de los taxistas y, de ser necesario, se buscará una regulación con piso parejo.
El funcionario del gobierno capitalino señaló que se busca contar con un sistema integrado de transporte, una cultura de la movilidad con menos vehículos, la distribución eficiente de mercancías.
A su vez, Roberto Remes Tello de Meneses, director de Ciudad Humana, consideró que el uso de las nuevas tecnologías de la información es de suma utilidad tanto en la movilidad individual como en el transporte público.
El director para Latinoamérica del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP), Bernardo Baranda, puntualizó que las tecnologías se deben utilizar a favor de la movilidad individual, pero con una visión de ciudad y de los beneficios que puedan generar.
Enfatizó que estas herramientas llegaron para cambiar la forma de desplazarse, y se pronunció a favor de una política pública equilibrada y equitativa que beneficie a la ciudadanía en general.
En tanto, Gerardo Cleto López Becerra, presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope) del Distrito Federal, dijo que es indispensable que los sectores afectados y gobierno trabajen de manera conjunta, a fin de crear políticas y marcos legales ágiles y actuales que impulsen la modernización de las pequeñas empresas.
En ese sentido planteó que la política pública debe aplicarse a los sectores de la economía popular, disminuyendo los costos de operación.
Jaime Aparicio, director de Easy Taxi señaló que las políticas en materia de movilidad deben tener en consideración las nuevas tecnologías, ya que a través de su aprovechamiento se podría fomentar una regulación que detone la competitividad, modernización, inclusión y formalización de este sector.
Es necesario desarrollar un ordenamiento que optimice y agilice una red de transporte público formal, eficiente y que aproveche la presencia de las tecnologías para el desarrollo continuo de una política pública más inteligente, enfatizó.
A nombre de la Coalición Nacional Bicentenario, su presidente, Ismael Prado García, acusó que “se ha tratado de ‘satanizar’ al taxista tradicional”; sin embargo, aseguró que los más de 140 mil choferes que existen en este gremio son personas responsables.
Hizo notar que se encuentran en proceso de regularización, por lo que no les preocupa la competencia, “nos hemos puesto las pilas gracias a las empresas que aparecieron y que les agradecemos nos hayan activado”, subrayó.
Opinó que es tarea del Gobierno del Distrito Federal poner orden en taxis tradicionales para combatir la delincuencia e inseguridad que se da en algunos de ellos, y denunció que existen más de 45 mil taxistas piratas.
Finalmente Armando Reyes Carrillo, director de políticas públicas de Uber, comentó que los servicios de esta empresa están dirigidos a segmentos de la población que no necesariamente son los mismos que usan taxis tradicionales.
