La Primera Guerra Mundial fue el primer gran conflicto armado ocurrido en el siglo XX, y dio inicio el 28 de julio de 1914. Sin embargo, el primer ataque ocurriría precisamente un día como hoy, cuando Alemania decidió atacar a Rusia, iniciando así las hostilidades que tendrían lugar en Europa durante tres años.
Durante la llamada Gran Guerra se registraron cerca de 10 millones de decesos y casi ocho millones de desaparecidos, además de una re organización geopolítica en el viejo continente en donde nacieron nuevas naciones e imperios se perdieron.
Está guerra, además, se caracterizó por los combates en tierra, desarrollados principalmente en trincheras diseñadas para resguardar a los soldados. No obstante, lo cruento de la lucha armada radicó en la incursión de tanques y aviones, además de las primeras armas químicas, por lo que las bajas humanas fueron tantas en un periodo demasiado corto.
A pesar de lo cruento del conflicto había lugar para la esperanza, como lo muestran una serie de postales francesas de la época, en donde se alienta a los soldados en el frente de batalla a volver a salvo a casa. La vida desde las trincheras, sin duda, es uno de los episodios más trágicos en la historia de la humanidad, pero las tarjetas mostradas son un claro ejemplo de que a mitad de una guerra el optimismo es una herramienta esencial para la supervivencia.
