Ankara, 1 Oct (Notimex).- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, condicionó hoy el uso de sus bases militares para la lucha contra el yihadista Estado Islámico (EI) en Siria si el objetivo incluye el derrocamiento del régimen de Bashar al-Assad.
En su discurso de apertura en la sesión del Parlamento, Erdogan aseguró que Turquía luchará contra el EI y otros grupos terroristas en la región, aunque su principal objetivo seguirá siendo apartar del poder al presidente al-Assad, según el diario turco Hürriyet.
“Continuaremos priorizando nuestro objetivo para acabar con el régimen de Siria, para ayudar a proteger la integridad territorial de Siria y fomentar un sistema de gobierno constitucional y parlamentario que abrace a todos los ciudadanos”, dijo.
Erdogan condicionó la participación plena de su país en la coalición internacional, lidera por Estados Unidos, para realizar ataques contra el EI, a fijar como propósito de esa misión el derrocamiento de al-Assad.
El mandatario turco exhortó a los países occidentales encontrar una solución a largo plazo para las crisis en Siria e Irak, ya que lanzar “toneladas de bombas” contra los yihadistas del EI no es más que una solución temporal.
“Lanzar toneladas de bombas desde el aire es únicamente una solución temporal y sólo posterga las amenazas y el peligro”, consideró.
Desde que comenzó el conflicto en Siria, en marzo de 2011, Erdogan se pronunciado por derrocar al presidente al-Assad.
Estados Unidos, Francia y Reino Unido han pedido a Turquía el acceso a bases militares y espacio aéreo turcos para las acciones de la aviación y el ofrecimiento de preparación y logística para las fuerzas que enfrentan a los yihadistas.
Poco antes, Turquía, que en principio se mostraba reticente a participar en una intervención militar contra los yihadistas, solicitó al Parlamento autorización para poder enviar tropas a Irak y Siria, así como para permitir el uso de sus bases militares a otros países.
Estados Unidos y sus aliados árabes comenzaron el pasado 23 de septiembre una campaña aérea contra los yihadistas en el norte y este de Siria, con el objetivo de golpear y erradicar al grupo extremista, que controla territorio en ambos lados de la frontera entre Siria e Irak.
