Rabat, 2 ago (EFE).- Las autoridades marroquíes han prohibido por tercera vez la representación callejera de la obra de teatro B’hal b’hal (Todos iguales), que trata de los problemas de integración de los inmigrantes subsaharianos en Marruecos.
La prohibición, según informaron hoy fuentes de la asociación organizadora “Yudur” (Raíces), tuvo lugar ayer en una plaza de Fez, y se añade a la que ya se registró previamente en las ciudades de Rabat y de Tánger para la misma obra.
Como en las otras ocasiones, no se ofreció a los organizadores ninguna razón para la prohibición de esta pieza, que se comunicó de manera verbal y cuando el escenario ya se encontraba montado en la plaza de Bab al Yulud de Fez.
El tema de la inmigración, y particularmente la subsahariana, es paradójico: por un lado, el estado marroquí emprendió en 2014 una operación de regularización inédita en África que permitió sacar a la luz a cerca de 30 mil personas; por otro, las denuncias de racismo y discriminación, cometidas por la policía o los vecinos, son recurrentes. EFE
