“Estamos acostumbrados a pensar exclusivamente en el presente o en el corto plazo. (…) Cada uno de los gobiernos que asumen preparan un presupuesto para cinco años, (…) que en materia de evolución es un plazo muy corto que nos sustrae del pensamiento a mediano y largo plazo del país”, aseveró Sendic.

La ponencia del vicepresidente sobre el “Uruguay del Futuro” en la Universidad Católica de Uruguay puso especial énfasis en la diversificación de la matriz productiva que el país suramericano debe afrontar en el contexto actual de baja de la demanda de alimentos y de caída de precios de las materias primas.

“Es cada vez más importante que hagamos una apuesta fuerte a una matriz productiva cada día más compleja, con mayor valor agregado, que requiera tecnología, que requiera a su vez gente más capacitada, que se incorpora mejor en las cadenas productivas y cadenas de valor”, señaló el vicepresidente.

En ese sentido, destacó los esfuerzos del Estado por reducir la dependencia de los precios de los productos agrícolas y por encauzar las inversiones a través de mejoras constantes en la legislación uruguaya, para impulsar sectores y zonas del país que favorezcan el valor agregado de las exportaciones y el desarrollo.

Por su parte, el jerarca también señaló como una prioridad para el futuro del país suramericano el fortalecimiento y la creación de infraestructura, para generar una “base material para hacer más compleja la canasta de producción” de Uruguay con la mejora del sistema de cargas y transporte.

El Gobierno uruguayo anunció a finales de julio que en el presente período (2015-2020) invertirá alrededor de 12.000 millones de dólares en obras de infraestructura, que serán financiados con fondos públicos y con participación público-privada, una de las principales metas de la administración del presidente Tabaré Vázquez.

Para el vicepresidente, la “generación de capacidades” a través de la educación es “esencial en el país”, por lo que juzga necesaria una reforma educativa que debe comenzar en las “cabezas” de los uruguayos para “convertir en valor” los recursos de la nación, en una “batalla” que tienen que dar desde sus casas.

Asimismo, la autoridad resaltó los esfuerzos que el país debe hacer en materia de inclusión social en un país con un nivel de pobreza del 11 %, cuya mayoría son niños, a pesar de los avances que se han hecho en términos de equidad.

En ese sentido, alertó sobre la “situación dramática” demográfica del país, que tiene “una baja tasa de crecimiento de su población y en los sectores medios y de mayores ingresos de la sociedad” y con tasas altas de reproducción “en el sector más pobre” de la sociedad, cuya primera infancia debe ser protegida para su cabal desarrollo.

“Es necesario abordar políticas que permitan estimular la natalidad en determinados sectores (de ingresos medios) y proteger a la infancia en los sectores en los que la natalidad son altos. Cuesta mucho decirlo, pero hay que hacerlo porque es un problema de la sociedad a largo plazo”, sentenció Sendic.