Aunque una comparación entre estos dos personajes es complicada porque ni viven en la misma época ni en el mismo país, hay varios puntos en los que sí se puede hacer la idea de su poder e influencia, según recoge Business Insider.
Ciudad de México, 2 de noviembre (SinEmbargo/EconomíaHoy).– En América Latina, dos hombres de diferentes épocas se convirtieron en los más poderosos y peligrosos señores de la droga del mundo. Pablo Emilio Escobar Gaviria y Joaquín Archivaldo Guzmán Loera. Ambos movieron la droga a su antojo, amasaron montañas de dinero y se convirtieron en un dolor de muelas para las autoridades.
Aunque una comparación entre estos dos personajes es complicada porque ni viven en la misma época ni en el mismo país, hay varios puntos en los que sí nos podemos fijar para hacernos a la idea de su poder e influencia, según recoge Business Insider:
Pablo Escobar, también conocido como “El Patrón” o “El Rey de la Cocaína”, era colombiano y el jefe del cártel de Medellín. Su “reinado”, en el que la principal droga que traficaba era la cocaína, fue desde comienzos de los años 80 hasta 1993.
Joaquín “El Chapo” Guzmán, también conocido como “El Rápido”, es de nacionalidad mexicana y el capo del cártel de Sinaloa, desde 1989 hasta el presente. En cuanto al tráfico de drogas, se movió en distintos mercados, como el de la marihuana, la cocaína, el éxtasis, la heroína y la metanfetamina.
Al colombiano se le persiguió por tráfico de drogas, secuestro, asesinatos, bombardeos, sobornos, chantaje y blanqueo de dinero. A ‘El Chapo’ se le persigue por tráfico de drogas, secuestro, asesinato y blanqueo de capitales.
Los rivales de Pablo Escobar fueron el cártel de Cali, Los Pepes y los gobiernos de EU y de Colombia. Los de “El Chapo” son Los Zetas, el cártel del Golfo, el cártel de Juárez, el cártel de Tijuana, el cártel de los Beltrán-Leyva y los gobiernos de México y EU.
El colombiano, cuya ‘sede’ se situaba en Medellín, operaba en el Caribe, en México, en EU y en algunos países de Europa, como Inglaterra, Francia, Alemania, Italia o España. “El Chapo” y los suyos llevaban la droga a los mismos sitios que Escobar, pero amplió su mercado a algunos puntos de África: Malí, Senegal, Sierra Leona, Ghana, Nigeria, Angola y Sudáfrica.
LAS VIDAS DE LOS CAPOS
Pablo Escobar nació en el seno de una familia de granjeros humildes, cerca de Medellín. Comenzó su carrera cometiendo crímenes menores pero pronto metió su cabeza en el mundo del narcotráfico y comenzó a vender marihuana. Cerca de 1980, el cártel de Medellín ya movía cientos de millonesde dólares gracias a la cocaína que consumía el mercado estadounidense.
Según datos aproximados, se cree que el narco colombiano se llenaba sus bolsillos con 420 millones de dólares cada semana, unos 22 mil millones de dólares al año. El 80 por ciento de la cocaína que se consumía a finales de los 80 en todo el mundo tenía el sello del cártel de Medellín.
El “ruido” que generaba Escobar y los suyos pronto llamó la atención de las autoridades colombianas. Se produjeron multitud de choques entre ambos bandos, lo que dejó lugar a muchos años de violencia en Colombia.
Finalmente, el capo acabó en una cárcel… diseñada por él mismo. A pesar de estar preso, el narco seguía con sus operaciones, por lo que el Gobierno decidió volver a por él. Finalmente murió abatido a tiros por la policía (aunque nunca se ha sabido quién fue el autor del disparo).
Por su parte, Joaquín “El Chapo” Guzmán no fue el primer señor de la droga que salió de Sinaloa, pero sí quizá el más poderoso. Como jefe de esta organización criminal, Guzmán supervisaba el cultivo y la producción de campos de marihuana y de amapolas (de las que se extrae la cocaína) de una extensión tan grande como toda Costa Rica.
Su red está operativa en 17 de los 32 estados de México. Su droga se ha movido por más de 50 ciudades, muchas en EU.
El cártel de Sinaloa a tiene una presencia internacional terrible. Su actividad se ha registrado en Australia, Hong Kong y Filipinas. Según la Agencia de la ONU contra las drogas y el crimen, algunas organizaciones latinoamericanas como el cártel de Sinaloa trabajan para expandir sus operaciones a nuevos mercados a través de nuevas rutas de África y Asia [ver imagen inferior].
“El Chapo” es un viejo conocido de las autoridades mexicanas. En 1993, poco después de haberse hecho con los mandos de la organización, fue arrestado en Guatemala. Permaneció en prisión hasta 2001, cuando se fugó escondido en un carrito de la lavandería. 13 años después volvió a ser encarcelado, pero una vez más volvió a escaparse. Parece que las autoridades mexicanas lo tienen muy cerca, pero sigue resistiéndose.
