Las remesas crecieron 4.75 por ciento en 2015 y superaron por primera vez en los registros históricos a los ingresos por exportaciones petroleras del país.

Ciudad de México, 3 de febrero (SinEmbargo).– Las remesas fueron durante 2015 la principal fuente de divisas en México, superando los ingresos por exportaciones petroleras y las cifras de Inversión Extranjera Directa (IED).

Datos del Banco de México, difundidos este martes, revelaron que los envíos de los mexicanos en el extranjero a sus familiares crecieron 4.75 por ciento durante 2015. En total ingresaron 24 mil 771 millones de dólares entre enero y diciembre del año pasado, mientras que los provenientes del crudo y sus derivados llegaron a 23 mil 432 millones de dólares.

Hasta hace algunos años, las exportaciones petroleras eran la principal fuente de ingresos desde el extranjero; sin embargo, las remesas y los ingresos por IED están superándolos.

De acuerdo con especialistas, este es un comportamiento nunca visto desde que el banco central comenzó a registrar los envíos de los migrantes en 1995.

Pamela Díaz, analista económico del Banco B×+, dijo que el impacto que tienen las remesas sobre el Producto es Interno Bruto (PIB) es mínimo porque no en todos los lugares se produce dicho efecto, sin embargo “aunque haya mexicanos que han dejado de pertenecer a la Población Económicamente Activa (PEA) de aquí, siguen contribuyendo de alguna manera a la economía interna”.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó la semana pasada que la caída anual de 45 por ciento de las exportaciones petroleras tuvo repercusiones en la balanza comercial del país que terminó el año con un déficit de 14 mil 460 millones de dólares.

Expertos explicaron que una de las principales causas fue el desplome de los precios del petróleo, que ocasionó que México obtuviera menores recursos en 2015, aunque también contribuyó el mejor comportamiento de la economía de Estados Unidos, donde radica la mayoría de los mexicanos en el exterior.

Asimismo, la inversión extranjera en México está siendo una de las principales fuentes externas de ingresos. Cifras de la Secretaría de Economía (SE) muestran que en el tercer trimestre del año pasado, la IED se ubicó en 21 mil millones de dólares, pero estimaciones de la American Chamber of Commerce del país señalan que oscilará entre los 25 y 35 mil millones de dólares para 2016.

Otra de las fuentes de ingresos del extranjero son los acumulados por turismo. Tan sólo en noviembre del año pasado, los ingresos registrados por Banxico  por el arribo de viajeros internacionales al país ascendieron a mil 385 millones 973 mil dólares, cuando los envíos de petróleo alcanzaron mil 259 millones de dólares.

REMESAS INCENTIVAN EL CONSUMO

Las remesas son una importante fuente de divisas para el país y contribuyen al consumo interno al llegar a millones de familias.

Pamela Díaz comentó que el incremento de remesas “son noticias favorables, pero no en todos lados, ya que ciertos estados de la República Mexicana son los que concentran el mayor impacto de dichos ingresos”.

De acuerdo con un análisis hecho por la entidad financiera, Michoacán concentra el mayor porcentaje del total de las remesas nacionales con 8.27 por ciento, seguido de Guerrero con el 7.80, luego Zacatecas con 5.79, Guanajuato con el 4.52 y Durango con 4.23 por ciento.

Explicó que el impacto que tienen las remesas no necesariamente se mide por la cantidad de ingresos que éstas  generan, sino por la sensibilidad del consumo interno.

“Cuando se incrementa el envío de remesas en estos estados, las familias de estas entidades consumen más, porque podría haber estados donde hay mayor porcentaje de remesas pero no se ven el consumo, lo ahorran”, detalló.

En 2015 la remesa promedio fue de 292 dólares, ligeramente inferior a los 294 dólares del año previo, precisó el Banco de México.

Con el alza del dólar de los últimos meses, los receptores de remesas pudieron enriquecerse de una manera más elevada. Las familias que recibieron ingresos por remesas del exterior elevaron sus ingresos el año pasado, ya que pudieron cambiar cada billete verde en 15.83 pesos en promedio en 2015, un 19.6 por ciento más de los 13.24 obtenidos en 2014, de acuerdo con cifras reportadas por el Banco de México.

Las remesas subieron, en términos de dólares, 4.8 por ciento; sin embargo con  el alza de la divisa norteamericana frente al peso, el incremento se disparó casi un 25 por ciento anual.

Respecto a las previsiones respecto al tipo de cambio,  la analista dijo que el pronóstico puntal del Banco está en revisión, pero adelantó que “va a seguir manteniendo una tendencia a la baja que particularmente se verá afectado por Estados Unidos porque el dólar va a continuar apreciándose; hay muchos factores externos a México que seguirán afectando, en especial la desaceleración económica de China y  su consecuente caída en el costo del petróleo”.