La niña que perdió parte de su pierna derecha tras ser baleada por parte de policías federales, en Sinaloa durante un reten, salió acompañada de sus padres.
Por Claudia Beltrán
Ciudad de México, 4 de abril (SinEmbargo/Noroeste).- Valentina, la niña que perdió parte de su pierna derecha a causa de una bala que recibió por parte de policías federales que participaban en un retén, en Culiacán, Sinaloa, dejó el hospital donde se recuperaba de la lesión.
La menor, a quién se le entregó una silla de ruedas, salió acompañada de su padre Emilio y madre Natlleli. Los tres fueron trasladados por una camioneta del DIF.
Alberto Páez, Director médico del Hospital Pediátrico de Sinaloa (HPS) explicó que el tiempo que la pequeña permaneció internada, dependió de la evolución médica, la cual fue satisfactoria, “Entonces ya no había necesidad de que estuviera más tiempo hospitalizada”, señalo.
Ya en Mazatlán, agregó, Valentina recibirá apoyo psicológico, para lo cual habrá una coordinación entre DIF estatal y el municipal. Además en el hospital continuará con atención médica para que la herida de su pierna sane por completo.
Páez comentó que Valentina regresará al hospital como cualquier otro paciente, con la finalidad de continuar con la supervisión, situación que deberá darse en una semana.
Señaló que, desde el punto de vista médico, Valentina puede regresar a la escuela. Sin embargo, desde el ámbito psicológico, dependerá de ella regresar a la primaria en donde los alumnos y maestros la esperan.
Para hablar de una prótesis deberá cicatrizar por completo la herida, que puede tomar de uno a dos meses, después deberá evaluarse cuál es la prótesis ideal para ella, indicó.
El lunes 20 de marzo, la conductora del automóvil en que viajaba la pequeña no hizo alto que le indicaron durante un retén de la Policía Federal, por lo que atropelló a uno de estos elementos, quienes enseguida abrieron fuego contra la unidad donde iban cuatro mujeres a bordo, entre ellas, dos niñas, Valentina, de seis años y Emili, su hermana, de ocho años.
Valentina recibió un disparo en la pierna, mientras que Jéssica, su tía de 26 años, resultó con varios en distintas partes del cuerpo. Los hechos se suscitaron cuando transitaban por la carretera Culiacán-Mazatlán, a la altura del kilómetro 122.
En el ISSSTE de Culiacán se determinó amputarle la pierna a la niña, pero su familia decidió llevarla al HPS en busca de una segunda opinión. Sin embargo, ahí tampoco pudieron hacer nada para salvarle la pierna.
Páez, director Médico de esta institución añadió que la decisión de amputarle parte de la pierna a la niña fue para salvarle la vida, “Estaba corriendo peligro la vida”, manifestó.
