“La Constitución protege tanto la independencia de la justicia como la libertad de opinión y prensa”, subrayó hoy en una declaración ante los medios el fiscal federal, Harald Range, tras las dudas mostradas por el Ejecutivo después de que abriera una investigación al blog “Netzpolitik.org” por un presunto delito de alta traición.

El blog había revelado extractos de documentos confidenciales de la Oficina Federal de Protección de la Constitución (BfV), los servicios secretos de Interior, sobre la creación de una unidad para la vigilancia de Internet y para la detección y análisis de perfiles de radicales y extremistas en las redes sociales.

La polémica comenzó nada más conocerse la apertura de la investigación, aumentó con las críticas del Ministerio de Justicia y de la Cancillería a la actuación de la Fiscalía y continuó hoy con la dura respuesta de Range, que decidió defenderse en persona con un comunicado ante los medios.

“Influir en una investigación, porque los posibles resultados de la misma no parezcan oportunos, es una intromisión intolerable en la independencia del poder judicial”, manifestó.

Según explicó, con el fin de garantizar la objetividad de su investigación pidió un informe externo independiente para aclarar si la difusión de los documentos por parte de Netzpolitik.org suponía un caso de revelación de secretos de Estado.

El perito le comunicó ayer que, según una primera valoración, sí lo era -lo que, a su juicio, avala la apertura de su investigación- y él informó de inmediato al Ministerio de Justicia.

“Se me ordenó parar de inmediato el informe del perito y cancelar el encargo de ese informe. He obedecido la orden”, subrayó el fiscal antes de pasar a defender su actuación.

Tras reconocer que la libertad de opinión y de prensa es un bien valioso, recordó que hay límites, también en internet, y que los periodistas deben cumplir la ley que el poder judicial está obligado a hacer respetar.

“Esta tarea sólo puede cumplirse si se está libre de influencia política”, recalcó Range.