El movimiento en las perspectivas, indicó Fitch, refleja un menor riesgo de que el país tenga menores perspectivas de crecimiento, así como la expectativa de que se estabilice la deuda pública. “Fitch opina que se está reduciendo el riesgo de un escenario perjudicial que podría debilitar la competitividad de las exportaciones de México y afectar la posibilidad de crecimiento o poner en peligro los flujos de remesas del exterior”, indicó la calificadora en un comunicado.
Ciudad de México, 4 de agosto (EconomíaHoy).- En seguimiento a la mejora que la calificadora Fitch Ratings hizo de la perspectiva crediticia de México, la firma también revisó a ‘estable’ desde ‘negativa’ la perspectiva de sus dos empresas productivas: Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Ayer la Secretaría de Hacienda, y Crédito Público, informó que la empresa calificadora incrementó la perspectiva de las calificaciones de largo plazo de México al pasarlas de “negativa” a “estable”.
El movimiento en las perspectivas, indicó Fitch, refleja un menor riesgo de que el país tenga menores perspectivas de crecimiento, así como la expectativa de que se estabilice la deuda pública. “Fitch opina que se está reduciendo el riesgo de un escenario perjudicial que podría debilitar la competitividad de las exportaciones de México y afectar la posibilidad de crecimiento o poner en peligro los flujos de remesas del exterior”, indicó la calificadora en un comunicado.
“Estados Unidos parece empezar a tomar una postura moderada con respecto a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)”, dijo Fitch. Además, la firma considera que la economía ha demostrado resistencia ante los precios más bajos del petróleo y los riesgos derivados de las políticas proteccionistas estadounidenses, y reconoce que el país ha avanzado con la consolidación fiscal. Esto, junto con la apreciación reciente del peso, “generará una tendencia renovada a la baja en la carga de deuda pública en 2017 y en adelante.
Para que Fitch modificara a la baja la perspectiva de Pemex o bien su calificación, habría de hacer lo propio con la calificación soberana de México y debería existir la percepción de un deterioro en el vínculo entre Pemex y el Gobierno Federal o un deterioro substancial en los indicadores crediticios de la compañía.
“Fitch no prevé un alza en las calificaciones de Pemex en el corto plazo, pero una acción de calificación positiva podría resultar de un incremento en la calificación soberana de México junto con desempeño operativo y financiero sólido o una reducción importante en la carga impositiva de la empresa”, dijo la calificadora.
En el caso de CFE, la firma dijo que en ausencia de un perfil operativo y financiero mejor, las calificaciones de CFE podrían beneficiarse del alza en la calificación del riesgo soberano de México o un incremento en el apoyo financiero por parte del gobierno mexicano.
Entre los factores que son considerados como negativos para el perfil crediticio de la compañía están “una disminución en la calificación del riesgo soberano de México, la percepción de un vínculo menor entre CFE y el gobierno federal como resultado de la Reforma Energética en conjunto con un perfil operativo y financiero débil.
