Ciudad de México, 5 de marzo (SinEmbargo).– El Alcalde de Chalchicomula de Sesma, Juan Navarro, confirmó el hallazgo de un segundo cuerpo congelado en la cima del Citlatépec.
Un grupo de alpinistas subieron a rescatar los restos momificados y se registró el hallazgo del segundo. El Edil explicó que entre ambos había una distancia aproximada de metro y medio.
Fue después de las 4 la tarde de este jueves que los restos de ambas personas fueron hallados a 5 mil 200 metros sobre el nivel del mar, en la zona conocida como “El Chichimeco”, aunque su rescate se daría hasta mañana debido a la necesidad de equipo especializado.
Según información de e-Consulta se sabe que una familia de Puebla afirma que los restos podrían ser de uno de sus integrantes extraviado en el volcán hace más de 50 años.
Además, el director de Protección Civil municipal de Chalchicomula de Sesma, Esteban Rosete, aseguró que las embajadas de Estados Unidos y Alemania están a la espera de información ante la posibilidad de que se trate de uno de sus connacionales.
Alpinistas de España y Francia han solicitado a través de sus embajadas la incorporación en el equipo de rescate del cuerpo, ya que en los registros que poseen hay escaladores de esos países perdidos en los últimos 50 años.
Según Hilario Aguilar, miembro de la Asociación Mexicana de Alpinistas, el hombre pudo haber quedado sepultado hace medio siglo. El hallazgo fue dado a conocer este miércoles por las autoridades del municipio de Chalchicomula de Sesma (estado de Puebla), cercano al volcán, aunque los alpinistas querían mantenerlo bajo reserva.
Además de Rangel, el grupo estaba integrado por Carlos Pinto, Israel Ángel Mijangos, Miguel Peña Godoy, Rubén Wong, Ricardo Ramírez, quienes iniciaron el viernes pasado el ascenso al volcán y la mañana del día siguiente hallaron el cuerpo momificado.
Mijangos se lesionó la rodilla y ya no pudo continuar el recorrido cercano al cráter del volcán. Cuando emprendieron el descenso, vieron “a lo lejos un coco”, relató Rangel.
“Lo primero que nos preguntamos fue: ¿quién come un coco en la montaña?. Nos acercamos más y vimos que se trataba de un cráneo y después descubrimos la mano”, añadió.
Fue Mijangos el que tomó la fotografía que ha dado la vuelta al mundo antes de que la lengua de hielo donde él se sostenía para estar cerca del cuerpo congelado se rompiera y provocara su deslizamiento en la nieve.
El accidente de Mijangos, quien rodó unos 100 metros, y otra lesión que sufría Pinto les obligaron a descender del volcán el mismo sábado por la tarde.
Rangel contó que el grupo decidió mantener en reserva el hallazgo por respeto al cuerpo, a su familia y a una probable investigación por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH).
“Queríamos proteger la imagen del hermano de montaña y guardarle respeto. También buscamos evitar que otros grupos de montañistas escalaran el volcán para encontrar el cuerpo y tratarlo de una manera no profesional e inadecuada”, añadió.
A pesar del acuerdo entre los seis montañistas, la foto de Mijangos fue tomada sin autorización de un grupo privado en Facebook con otros escaladores con quienes interactuaban para cruzar información.
“Sucedió lo que queríamos evitar: que un grupo de escaladores sin la formación adecuada para el rescate del cuerpo ascendieran y, por adjudicarse un hallazgo que no hicieron, convirtieran el suceso en un mercado”, lamentó Rangel.
Aunque han recibido presiones y amenazas de parte de las autoridades de Chalchicomula de Sesma, dijo que no se suspenderá la expedición del próximo domingo dirigida por el socorrista de la Cruz Roja mexicana, Héctor Guillermo Sero Mili.
El volcán Pico de Orizaba, también conocido como Citlaltépetl, es la montaña más alta de México (5.630 metros) y la tercera de Norteamérica.
Con información de EFE
