“Nos demoramos mucho en tomar una decisión y el país está pidiendo a gritos que las aduanas se modernicen no solamente en la parte legislativa, sino también en la parte informática”, dijo a Efe el presidente ejecutivo de Fitac, Miguel Ángel Espinosa, en el marco del XVII Congreso Internacional de esta organización.

Según el directivo, “hay un rezago normativo importante en el país”, pues el sistema aduanero vigente se implementó hace dos décadas y no se ha actualizado, lo que ha generado “vulnerabilidad de los sistemas informáticos”.

Esta deficiencia no permite “atacar las fuentes de contrabando técnico que están ingresando por el país”, agregó.

El contrabando técnico consiste en el ingreso o salida de mercancías al territorio nacional con una declaración en la que ha sido manipulada la información sobre los productos que se quieren comercializar.

La Fitac espera un nuevo Código de Aduanas, comúnmente llamado Estatuto Aduanero y cuya última versión data de 1999, para “antes de finalizar este año”, anotó Espinosa.

El presidente del organismo destacó que otro de los grandes desafíos en materia logística son los problemas de movilidad en el interior del país debido a la inseguridad que hay al transportar la carga en horas de la noche.

“Hay unos temas de inseguridad para la carga impresionantes que han hecho que toda la carga del país se movilice por horarios diurnos generando unas deficiencias en competitividad importantes”, señaló.

En este sentido, el director general de la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CEIM), Miguel Martínez, expuso la experiencia logística de su país, donde el 86 por ciento del movimiento de productos se produce por carretera.

En opinión de Martínez, este dato produjo que las autoridades españolas centrasen sus esfuerzos en “el desarrollo de corredores logísticos” en distintas regiones del país.

En España, por una cuestión de logística urbana, se ha optado en algunos casos por mover la carga en unidades de transporte más pequeñas que cubren distancias no tan amplias, con el fin de no demorar demasiado la entrega, agregó el dirigente.

Martínez indicó que un sistema logístico robusto “tiene impactos económicos inmediatos”, con una mayor atracción de la inversión, y sociales, al generar “un empleo de calidad”.

Por otro lado, Espinosa apuntó que la modernización legislativa e informática de las aduanas colombianas despejará también las dudas existentes entre los comerciantes internacionales, quienes “no conocen con claridad el sistema”.

“La inversión extranjera está expectante por la nueva regulación aduanera, porque no tienen claras las reglas del juego y eso ha frenando” a grandes inversores interesados en venir al país, detalló Espinosa.