Buenos Aires, 7 Jul (Notimex).- Una multitud protestó hoy en el Palacio de Tribunales en Argentina para exigir que el gobierno de la presidenta Cristina Fernández respete la independencia de poderes y deje de influir en el trabajo de la justicia.
La manifestación fue convocada por jueces, fiscales y trabajadores del sector judicial opositores a la presidenta, para quien pidieron incluso juicio político, aunque sólo faltan cinco meses para que culmine su mandato.
El motivo de la protesta fue la destitución del juez Luis María Cabral, quien formaba parte del tribunal que determinará la constitucionalidad del acuerdo que el gobierno firmó con Irán para investigar el atentado de 1994 contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA).
“Justicia independiente”, rezaban varios globos gigantes que fueron lanzados durante el acto en el Palacio de Tribunales ubicado en el centro de la ciudad, mientras un grupo de manifestantes enarbolaba una bandera kilométrica.
La agrupación Abogados de Pie tuvo una destacada presencia con mantas y carteles de repudio al gobierno, en tanto que otras personas portaban carteles en los que denunciaban supuestos intentos de “golpe de Estado al Poder Judicial”.
“Basta Cristina de destruir a la justicia para no ir presa”, se leía en otros mensajes repartidos entre la gente, que en particular exigía la restitución de Cabral.
Otros convocaron a “defender en la calle a los jueces probos de la corrupción oficialista”, al estimar que “sin justicia no hay República”, y advirtieron que los “ataques” a los jueces le valdrán al gobierno una derrota en las presidenciales de octubre próximo.
Funcionarios del gabinete criticaron el acto al considerar que estaba convocado por meros intereses políticos, no porque exista una verdadera intervención del gobierno en interferir ante la justicia.
“Es una reunión en las escalinatas del Palacio de Justicia, una reunión con un sentido político opositor”, afirmó el secretario de Justicia, Julián Álvarez.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, advirtió que “otra vez volvemos a las marchas políticas por parte de miembros del Poder Judicial que se arrogan un derecho que no tienen”.
En los últimos años se han recrudecido los enfrentamientos entre los poderes, ya que cuando hay un fallo en su contra, el gobierno denuncia operaciones políticas e intereses espurios por parte de jueces o fiscales.
La oposición mediática y partidaria, por su parte, asume la misma actitud parcial, ya que critica a la justicia cuando beneficia al gobierno, pero la aplaude y santifica si emite un dictamen que afecte a Fernández.
