ENTREVISTA | “Un beso en tu futuro”, inspirado en la historia de Ana Frank: Raquel Castro

07/10/2017 - 12:04 am

Cuando su madre le hizo leer Tom Sawyer, ella comenzó a leerlo un poco enojada, a las pocas páginas estaba totalmente adentro de la aventura de Mark Twain. No sabe si sus libros se convertirán en clásicos, pero mientras tanto trata de hacer el mejor libro cada vez. Es autora de lo menos normal, porque así también lee: sin barreras ni géneros.

Ciudad de México, 7 de octubre (Sin Embargo).- Raquel Castro ha elegido lo más duro y al mismo tiempo lo más divertido de la literatura: lo raro. Así, ha antologado un libro de cuentos zombis y ha escrito una novela larga para adolescente titulada Dark Doll.

Con la novela Ojos llenos de sombra ganó el Premio Gran Angular de literatura juvenil de ese año y ahora lo intenta de nuevo con Un beso para tu futuro.

Nancy ha recibido un augurio: hay un beso en su futuro, y está inquieta porque Jonathan, su mejor amigo desde niños, ha dejado de ser el chico raro y un poco tonto de la infancia. Tiene que aceptar que se ha convertido en un galán muy simpático y… sí, se ha enamorado de él. Ahora tiene delante un futuro en el que no sabe si creer y un secreto en su presente que no se atreve a revelar a nadie.

Contra el bullying y a favor de los jóvenes, la escritora se abre paso en su manera de ver el mundo y su actividad. Dice hacer lo que más le gusta: andar por lo raro de la literatura y desde ahí enseñarnos su pensamiento.

–Eres una autora bastante particular. Haces libros para adolescentes, participas en el Festival de Novela Negra…

­–Me defino como inquieta, curiosa, no me gusta estar en una sola etiqueta o en un solo género. Creo que soy lectora antes que escritora y no toleraría leer un solo tipo de libros. Supongo que eso se traduce en lo que hago y todo se vuelve caótico.

–Últimamente has estado cerca –literariamente hablando- de Alberto Chimal…

­–Alberto y yo llevamos 13 años casados y yo lo conocí primero como autor y luego como persona. Siempre ha habido una afinidad estética, aún antes de conocernos en lo que hacemos. Creo que es bastante natural que se fuera dando este acercamiento, sin embargo me queda clarísimo que Alberto tiene un estilo muy definido, muy particular, muy de él y que yo probablemente vaya a experimentar por otro lado.

–Están los dos lados bien definidos

–Sí, él tiene muy claro sus caminos de experimentación, es bien inquieto. Ahora estamos en un punto de encuentro en ese sentido y a lo mejor dentro de poco no. Coincidió que sale su libro para niños al mismo tiempo que el mío para adolescentes menores, porque es para niños a partir desde los 11 años. También coincidió que las portadas de ambos son amarillas y eso llamó muchísimo la atención. Mucha gente asume que si los dos son amarillos, los dos deben parecerse mucho. La verdad es que yo veo muy “chimalesco” el trabajo en Cartas para lluvia y que no nos parecemos tanto.

La escritora con su reciente novela. Foto: SinEmbargo

Un beso en tu futuro es el tuyo, ¿en qué se diferencia?

­–La historia de Alberto es de una niña cuya familia está fragmentada, el papá nunca ha vivido con ella y ella recibe cartas de su padre mientras enfrenta el bullying. Un beso en tu futuro en cambio es la historia de una preadolescente que empieza a interesarse en el sexo, en los cambios que vive su cuerpo, su mente y cómo la amistad se puede convertir en otra cosa, qué tanto vale la enamorarse de tu mejor amigo. Son historias que no tienen nada que ver entre sí.

–Ha andado muy bien tu libro, en parte porque hay pocas historias infantiles para las mujeres, ¿lo ves así?

­–Sí a mí me preguntan mucho por qué elijo hacer personajes femeninos y la primera respuesta es que tenemos una cantidad muy saludable de protagonistas masculinos en la historias, así que no creo que le haga daño a la literatura tener modelos femeninos a seguir. Yo de niña leía Tom Sawyer y me identificaba con Tom, no con Betty, así que no le veo nada de malo que un niño lea una novela mía y se identifique con la protagonista. O que diga: – Mira, qué padre esta chava…eso es a lo que aspiro.

–Hablaste de Tom Sawyer, ¿qué dirías de esas historias clásicas para adolescentes?

–Cuando mi madre me dio a leer Tom Sawyer lo empecé muy enojada, muy molesta, me estaba dando una cosa vieja para leer. A las pocas páginas se me había olvidado eso. Creo que por algo se vuelven clásicos. Hay que retomarlos, hay releerlos, al final descubrimos que lo realmente importante no ha cambiado tanto. Cambia la cubierta, a lo mejor Tom no mandaba un whatsupp, pero si te metes un poco más en sus inquietudes, por ejemplo, cuando se va a la isla porque siente que la tía no lo quiere, son los mismos sentimientos que tiene una adolescente ahora. No está pasada ni obsoleta.

–¿Piensas en alguna historia clásica cuando escribes para adolescentes?

–No realmente, aunque esto me influye mucho. Por ejemplo, Un beso en tu futuro, creo que una de sus mayores influencias es El diario de Ana Frank. No por la parte de toda la vivencia histórica o política, a mí cuando lo leí me impresionó mucho que ella estaba enamorada de Peter. Ella pensaba que él se iba a enamorar de su hermana Margot, porque es más inteligente, y ese sentimiento los tenemos todos cuando somos adolescentes. Todos son mejores que yo, eso se me quedó dando vuelta desde que tenía yo once años. Las lecturas que he leído me han ido marcando y me acompañan siempre.

–Bueno, uno piensa eso ahora, ojalá se pasara cuando es adolescente

–Claro (risas) Me gusta decirle a los chicos, cuando vienen a decirme que no saben cómo enfrentar la vida, que no se preocupen, que yo tengo 41 y estoy exactamente igual.

–¿Piensas que tu libro puede llegar a ser un clásico?

­–Prefiero no pensar en esas cosas. Por lo menos para mí se vuelven intimidantes. Lo que pienso es hacer cada libro lo mejor que pueda, con las herramientas que tenga en ese momento, esperando que el siguiente sea mejor. Tratar de mirar para adelante. Si alguna vez algunos de mis libros es retomado, releído, fantástico. Pero de otro modo uno se deprime, porque los libros no están más de dos semanas en la mesa de novedades.

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
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