Ciudad de México, 8 de julio (SinEmbargo).- “Siempre somos puntuales / No le tenemos miedo a nadie / Algunos de nuestros platillos más famosos son / estómago de cerdo relleno / salchicha de sangre / y salchicha asada a la parrilla”, explica mirando a la cámara el joven presentador de televisión Jan Böhmermann, en una parodia que ha recorrido el mundo y sido vista hasta ahora por dos millones y medio de personas en YouTube.
“Somos conocidos en todo el mundo por nuestra lengua melodiosa y tan fácil de aprender / y por nuestro sentido del humor de fama mundial / Cuando hablamos inglés, todos sonamos como Werner Herzog / ¡Somos alemanes! / Somos una muchedumbre de hijos de puta sin miedo / Sí, tenemos sexo con nuestros parientes más cercanos”, cuenta Böhmermann, nacido en 1981 en Bremen.
“¡Somos alemanes! Nuestro PBI alcanza los 3.7 trillones de dólares / y así somos la cuarta economía del mundo / Y la primera de Europa con gran ventaja / Nuestras reservas de oro son la segunda más grande del mundo / (Por favor, no pregunten de dónde provienen – canta el coro-) / ¡Somos alemanes! Arrancamos dos guerras mundiales y casi ganamos las dos / No tenemos miedo a la muerte, pero…”, prosigue el autorretrato nacional hecho por el programa de sátira televisiva Neo Magazin Royale mit Jan Böhmermann, en la cadena alemana ZDFneo.
CON V VAROUFAKIS
Pero no contaban con su astucia y hete aquí que desde “un lugar muy lejano”, llegó Yanis Varoufakis para hacer temblar de miedo ¡a los mismísimos alemanes!
¿Cómo lo ha hecho el recientemente renunciado ex Ministro de Economía de Grecia? La parodia de Jan Böhmermann enumera una lista infalible:
–¡Es maníaco! Busca venganza frente a nuestro país pacífico
–Cuello cerrado, motocicleta negra
–Con la inscripción “infierno” en heleno
–Hijo perdido de Zeus
–El corazón hecho de piedra
–Una mirada que quema como el fuego
–Una chamarra de piel, hecha con piel de cachorros de pastor alemán
–Devora bebés
–No negocia, da patadas en el culo
–Cada vez que se ríe, muere un ángel
–Sus axilas huelen a almizcle
–Una fisonomía a prueba de balas
La canción fue grabada y dada a conocer en febrero de 2015, a pocos días de aquel 27 de enero de este año, tan cercano, cuando el mundo comenzó a familiarizarse con la atractiva figura y la explosiva personalidad de este hombre todavía joven que el domingo apareció en la televisión pública de Grecia, vestido con una camiseta verde ajustada al cuerpo, para valorar el triunfo del “No” en el reciente plebiscito.
Yanis Varoufakis, 54 años, una camiseta verde: otra vez trending topic y van…
Bastaron seis meses en el poder, al lado del Premier Alexis Tsipras, el que el domingo arrasó con más de un 60 por ciento en las urnas –mucho más que el pálido 35 por ciento que lo llevó al Gobierno- de personas que apoyan la firmeza griega frente a la troika europea en la renegociación de la deuda, para que el mundo se dividiera en dos: los que aman a Yanis Varoufakis. Los que odian a Yanis Varaoufakis.
La parodia inteligente del presentador de la televisión alemana Jan Böhmermann, pintándolo como un superhéroe y un villano a la vez, muestra no sólo lo que ha significado su irrupción en la política mundial, sino también lo frágil que es desde el punto de vista de pensamiento simbólico y empatía popular ese otrora implacable frente europeo, liderado por una impertérrita e inconmovible Angela Merkel.
UN PABLO IGLESIAS AL CUADRADO
En España, donde dicen los autores de memes que se debería a comenzar a comer más tortillas griegas –que es como la española pero con más huevos-, también hay un político joven lleno de carisma que ha transformado radicalmente la historia política contemporánea: Pablo Iglesias.
Pero ni la coleta, la barba, las camisas blancas sempiternas del líder de Podemos alcanzan para equiparar el brillo de Yanis Varoufakis, el hombre que hizo temblar de miedo a Europa y que este lunes pagó cara la osadía de enfrentarse a la troika (FMI, Banco Central Europeo y el Eurogrupo) en la renegociación de la deuda griega, al tener que renunciar para calmar las aguas turbulentas donde no hacen pie del todo los grandes líderes del mundo.
Para decirlo en buen romance: el griego es como cuatro veces el español, quien ha mostrado por otro lado su desencanto al conocer la renuncia de Yanis al Ministerio de Economía y Finanzas de Grecia.
“Ha sido un gesto de audacia y de valor que sitúa muy bien la dimensión moral de Yanis, que ha dado una lección enorme. Ahora ya no hay excusa para quienes decían que el problema era Varoufakis; se han quedado sin excusas. Es un gesto que lo honra”, dijo Iglesias en declaraciones al programa Hoy por Hoy, de la Cadena SER.
Claro que la salida de Varoufakis –reemplazado el mismo lunes por Euclides Tsakalotos- no hace más que aumentar sus bonos políticos y cualquier analista atento podría pensar que no se trata de un adiós sino un hasta pronto de un claramente “presidenciable” político heleno.
LA CULTURA, EL ENTRETENIMIENTO: YANIS VAROUFAKIS
Hablar de Yanis Varoufakis en un contexto de Cultura y Entretenimiento, como lo hacemos en esta sección, se corresponde con su gran influencia en la cultura contemporánea, un elemento que no parece ser menor para las nuevas generaciones del mundo tanto desarrollado como en desarrollo.
Así lo ha destacado, por ejemplo, el famoso comediante catalán Andreu Buenafuente, cuando el monólogo inicial del programa En el Aire, que transmite de lunes a jueves Antena 3, el 29 de abril pasado, estuvo dedicado al político griego.
“Varoufakis ha caído en desgrecia”, decía Andreu refiriéndose al día en que Tsipras sacó a Yanis de la mesa de negociaciones con Europa, a raíz de su carácter camorrero.
“Le ha salido otra grieta al Partenón del manotazo que dio en la mesa” Varoufakis al enterarse de la noticia, agregó Buenafuente.
“Es que sí, imagínate que viene hacia ti Yanis Varoufakis, por lo pronto, no le presentas a tu novia”, bromeó el catalán, refiriéndose al ex Ministro, epítome como ninguno de lo cool, tan cool, que hasta su segunda esposa, la escultora Danae Stratu, fue musa de Jarvis Cocker, líder de Pulp, para el tema “Common people”.
La prensa griega lo llama “el hombre con la mirada de James Bond”, un aire que él cultivaba llegando a su oficina gubernamental, montado a su motocicleta negra, con una mochila al hombro y vestido con una camisa por fuera del pantalón y, sobre todo, sin corbata, una prenda que no parece tener en su guardarropa.
Yanis Varoufakis es profesor de Teoría Económica en la Universidad de Atenas y en la Universidad de Texas en Austin. Fue asesor del Gobierno de George Papandreu, entre 2004 al 2006, para luego pasar a militar en la organización de izquierda Siryza, que llevó a Alexis Tsipras al poder.
Llamó terroristas a los líderes europeos que aplican la única receta de la recesión para obligar a los países a pagar deudas antiguas y confiscar con ello el futuro de varias generaciones por venir.
“El referéndum del 5 de julio pasará a la historia como un momento único en el que una pequeña nación europea se levantó contra la esclavitud de la deuda”, dijo el lunes al presentar su dimisión.
Nació en Atenas en 1961, tiene un blog en inglés (http://yanisvaroufakis.eu/), un libro titulado El minotauro global y goza del cariño y la admiración de casi toda la juventud griega y, por extensión, también de la europea.
Muchos de los jóvenes del Viejo Continente han visto en Yanis Varoufakis al único hombre capaz de garantizarle una especie de futuro, algo que se acerque lo más posible a aquella utopía del trabajo digno o la del estudio para todos, como la joven llamada Triada Samaras, que en la última nota que firmó como Ministro de economía, con el título “Nuestro NO es un gran SÍ a una Europa democrática y racional”, le escribió el siguiente mensaje:
“Yanis, tú mueves montañas, en todo el sentido de la palabra, gracias”.
