En 1988, Salinas de Gortari compitió contra Cuauhtémoc Cárdenas en las elecciones presidenciales de México y, al menos en datos oficiales, ganó. Pero la caída del sistema a medianoche, y el anunció de su victoria sin cifras corroboradas, colocaron la sombra del fraude sobre los comicios.
Ahora, 29 años después, Manuel Bartlett Díaz, Secretario de Gobernación en ese momento y señalado por las irregularidades de la elección, afirma que Salinas de Gortari no ganó, pero se manipularon las cifras para entregarle la Presidencia de México.
Ciudad de México, 8 de julio (SinEmbargo).- El senador Manuel Bartlett Díaz afirmó que Carlos Salinas de Gortari perdió la elección de 1988, y se manipularon las cifras para entregarle la victoria.
En entrevista con el diario Reforma, el ex Secretario de Gobernación señaló que el fraude se orquestó luego de un acuerdo entre el Partido Acción Nacional (PAN), y la complicidad de los líderes del Frente Democrático Nacional.
La trampa inició con la manipulación de cifras y, después, se consolidó con la destrucción de las boletas electorales, las cuales eran la prueba del fraude, de acuerdo al Bartlett Díaz.
“Entonces, ¿quién ganó?, si se quemaron los paquetes, si se entregó Salinas al PAN -estaba muy preocupado, obviamente-, y si no revisaron los paquetes y no salió nada con este acuerdo y esa complicidad del PAN a la hora de hacer el dictamen: ‘Vámonos, tapen todo’. ¿Qué es eso? Es Salinas. No ganó la elección, la perdió”, dijo a Reforma el hombre que presidió la Comisión Federal Electoral.
En la contienda de 1988, Carlos Salinas de Gortari compitió contra Cuauhtémoc Cárdenas, hijo del general Lázaro Cárdenas del Río, Manuel J. Clouthier (del PAN), y Rosario Ibarra de Piedra (del Partido del Trabajo).
El puesto de Manuel Bartlett, en ese momento, lo puso en el centro del escándalo. Como Secretario de Gobernación, habría tenido participación directa en lo que se llamó la “caída del sistema”.
Ahora, 29 años después, el señalado habló sobre la organización de la elección que le entregó la Presidencia a Carlos Salinas.
Primero, recordó, hubo un registro de votos delante de los ciudadanos. Luego, detalló Bartlett, él comenzó a recibir cifras a través de llamadas telefónicas, pero las líneas se saturaron, justo cuando se desplomó el sistema.
Jorge de la Vega, el entonces dirigente del PRI, afirmó que Salinas de Gortari había ganado, y la sospecha nació:
“¿Por qué Salinas, antes de la calificación, corre aterrado a ponerse de acuerdo con el PAN? ¿Por qué se pone de acuerdo con ellos y les entrega, al final de cuentas, el País”, cuestionó Bartlett.
