En Zócalo del DF, padres exigen les entreguen vivos a sus hijos; piden terminar con torturas

08/10/2014 - 4:21 pm
Foto: Laura Cordero, SinEmbargo.
Quienes protestan llevan fotografías de los normalistas desaparecidos. Foto: Laura Cordero, SinEmbargo.

Ciudad de México, 8 de octubre (SinEmbargo).– El asesinato y desaparición de estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero, ha congregado esta tarde a miles de personas en El Ángel de la Independencia de la Ciudad de México, y en una columna conformada por universitarios, padres de familia de los jóvenes alumnos de Ayotzinapa, activistas y miembros de organizaciones civiles se disponen a marchar por la Avenida Reforma hacia el Zócalo capitalino.

Por medio de pancartas y aparatos de sonido exigen que los normalistas desaparecidos, según el gobierno por el crimen organizado y de acuerdo con familiares por el propio Estado mexicano, aparezcan con vida. La gran demanda es que el Gobernador guerrerense Ángel Aguirre Rivero renuncie.

La principal manta, que es cargada por activistas y por estudiantes y padres de alumnos de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos, dice: “Presentación con vida de los desaparecidos”.

También destaca la presencia de normalistas de diversas partes del país, que desde esta mañana llegaron a la Ciudad de México para participar en esta movilización.

Otras mantas demandan a los ciudadanos que se unan en esta gran protesta que ha tenido réplicas en distintos puntos del país, en varias ciudades del estado mexicano de Guerrero y algunas capitales de países de Europa y América Latina.

La marcha, que conforme pasaron los minutos se fue engrosando, tiene una amplia cobertura de prensa nacional y extranjera. También la acompañan organizaciones civiles de distintas partes del país. “Ya estamos hasta la madre, asesinos”, dice una de las pancartas. Otra afirma: “Yo digo no al Ejército; no al Ejército que mata a sus hijos; no al Ejército que mata y que mata”.

En los primeros minutos, al inicio de la caminata hacia el Zócalo, el contingente llegó casi hasta la calle de Niza lo que, para ser una movilización espontánea y no convocada por partidos o por estructuras tradicionales, evidenció una participación masiva.

A las 16:40 horas, la vanguardia de la marcha se situó a la altura de la Avenida Insurgentes y todavía muchos de los contingentes no terminan de salir del monumento del Ángel de la Independencia, lo que da idea de una manifestación como hace mucho no se vivía en la capital del país.

A las 17:45 horas, cuando quienes encabezan la movilización estaban ya en el Centro Histórico de la Ciudad de México, los últimos contingentes aún no atravesaban la Glorieta de Colón.

A las 18:00 horas, los primeros contingentes comenzaron a agruparse en la explanada del Zócalo capitalino. Durante todo el recorrido los normalistas no dejaron de gritar consignas: “Gobierno maldito, reprimir es un delito”, “Gobierno farsante que matas a estudiantes”, “Gobierno ratero que explotas al obrero”.

A la marcha se han unido grupos civiles de todo tipo: desde madres de la Guardería ABC hasta estudiantes de las principales universidades de la capital del país, electricistas, organizaciones de campesinos y de varias comunidades de estados cercanos que se han sumado a la caminata.

No hay presencia de políticos y ningún partido se ha aparecido. Si acaso se pudo ver, junto a Javier Sicilia, a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien es considerado líder moral del Partido de la Revolución Democrática (PRD), quien, dijo, asistió como un ciudadano más.

La protesta sin tintes partidistas y con objetivos claramente establecidos, la ha convertido en una movilización netamente civil.

EL MITIN EN EL ZÓCALO

La marcha para exigir la presentación de los 43 estudiantes desaparecidos vivos y la renuncia del Gobernador Ángel Aguirre Rivero arribó al Zócalo a las 18:00 horas. Desde un templete, colocado al inicio de la calle de José María Pino Suárez, muy cerca de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, los normalistas de Ayotzinapa pronuncian discursos.

“Lo que queremos son resultados, no queremos palabras, no que se echen la culpa entre los diferentes niveles de gobierno”, dijo Omar García, estudiante de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos.

“No nos vendemos, resistimos y quizás ese es el problema. Nosotros luchamos por una educación, eso no es un pecado sino un virtud. Seguimos en pie y por eso el Estado nos ha visto como enemigos”, dijo otro normalista.

“Los hechos del 26 y 27 [de septiembre] son terroríficos, nuestros ojos y mentes no son capaces de volverlo a revivir. El gobierno ahora se lava las manos diciendo que fue el crimen organizado, pero nosotros vimos a nuestros compañeros que fueron llevados por estatales [policías]. ¡Vivos se los los llevaron, vivos los queremos!”, exigió.

“Vivimos en un estado ingobernable, el estado no ha sido capaz de buscarlos. Somos estudiantes y sólo exigimos educación. Seguimos de pie por la sangre de nuestros compañeros. Somos parte de la sociedad, no somos el enemigo”, planteó otro de los alumnos de Ayotizinapa.

Al tomar el micrófono, uno de los padres de los 43 normalistas desaparecidos dijo: “Nuestros hijos salieron a hacer actividades para solventar sus gastos. No es justo que con actos de delincuencia vuelvan a repetir la historia. Sabemos que Iguala es la cuna de la Independencia, pero no es justo que se vuelva a derramar ahí sangre de jóvenes”.

“No vamos a descansar, como padres, como estudiantes, como sociedad civil, hasta que nos devuelvan a los 43 estudiantes normalistas. No queremos más torturas, no queremos que nuestros hijos sean amenazados por estudiar en normales”, expuso.

Otro padre de un estudiante desaparecido manifestó: “Nosotros, como padres de familia, tenemos el dolor, la desesperación de que nuestros hijos estén desaparecidos.

“No le hemos hecho nada a nadie del gobierno, lo único que hacen nuestros hijos es pedir apoyo económico. No es delito y muchas personas lo hacen en este país. Al parecer, el gobierno lo ve mal. Esta actividad es para el Estado una agresión”, planteó.

Un tercer jefe de familia guerrerense tomó el micrófono. Mi hijo, dijo, está desaparecido, “vengo de Tixtla, ahí nació Vicente Guerrero, el primer Presidente de la República, y de ahí surgieron varias personas que quisieron darle libertad al pueblo mexicano. Hoy pido a las autoridades que nos regresen a nuestros hijos, que nos los entreguen vivos”.

También exigió: “Le pedimos a Peña Nieto y a sus trabajadores de los estados para que nos entreguen a nuestros hijos, nada más”.

NORMALISTAS NO CONFÍAN EN AGUIRRE

Esta tarde, la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, de donde salieron los estudiantes hoy desaparecidos, emitió un comunicado dirigido a los padres, organizaciones civiles, medios de comunicación y el Congreso Nacional Indígena en el que establece que no confía en las investigaciones realizadas por el gobierno de Ángel Aguirre; no confían tampoco en el trabajo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), y reinvindica la necesidad el Equipo Argentino de Antropología Forense sea el que realice de manera independiente las investigaciones.

También exige: 1. Presentación con vida de los 43 desaparecidos; 2. Castigo a los responsables intelectuales y materiales de los tres jóvenes muertos en Iguala; 3. Juicio político y destitución al Alcalde de Iguala, José Luis Abarca; 4. Seguimiento al juicio político y castigo para Ángel Aguirre Rivero, y castigo para el Secretario de Seguridad Pública de Iguala, Felipe López Velázquez.

“Ante esta barbarie, el gobierno del estado encabezado por el asesino Ángel Heladio Aguirre Rivero, prefiere cuidar su imagen en los medios de comunicación antes que informar a las madres y padres de familia con puntualidad sobre las investigaciones que se realizan para determinar el paradero de nuestros 43 compañeros”, dice el comunicado.

“El Procurador Iñaki Blanco, como buen cirquero, se presenta ante los medios como el portador de resultados de esta investigación que ahora ha salido de sus manos. Inútilmente buscan cubrir su responsabilidad por la violencia que hoy desangra a nuestro territorio guerrerense, sin darse cuenta que esta violencia fue provocada por el mismo”, agrega.

“No confiamos en el trabajo que realiza la CNDH, ya que en 2011 hicieron una investigación del asesinato de Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús. ¿De qué sirvió su investigación? ¿Cuál fue el seguimiento que dieron a la recomendación que hicieron? Gastaron mucho dinero en recabar testimonios, en documentar el caso, en pagar peritos y en sus abogados que preguntan y preguntan cosas para que al final la ejecución extrajudicial siga en la impunidad”, cuestionan.

CHILPANCINGO: MILES EXIGEN JUSTICIA

Foto: Antonio Cruz
Foto: Antonio Cruz

Los padres y familiares de los normalistas desaparecidos exigen al gobierno federal y estatal que los estudiantes  aparezcan vivos y rechazan que los cadáveres encontrados en las fosas de Iguala sean los de los muchachos.

“Sabemos que encontraron dos cuerpos femeninos, y entre los normalistas no iban mujeres”, dijo Manuel Martínez, vocero de los padres de los jóvenes.

Martínez dijo que no confían en las autoridades estatales.

En la capital guerrerense, la manifestación de más de 50 mil personas concluyó su recorrido por toda la ciudad y los participantes se concentraron en el centro de la ciudad.

“Todo está demostrando que estás coludido, ahí está el Presidente de Iguala que cuando mató a Cardona, lo protegiste. Estamos aquí para decirte que si te queda dignidad, renuncies”, dice un hombre con un altavoz, al referirse a Aguirre Rivero.

Los padres de familia de los 43 normalistas desaparecidos en Guerrero, llenaron el Zócalo de Chilpancingo y exigieron juicio político y la renuncia del Gobernador de la entidad.

“La salida de Aguirre Rivero no tiene marcha atrás y de eso nos vamos a encargar los padres de familia”, dijo uno de los papás en el mitin que congregó a miles de personas, entre maestros, estudiantes y organizaciones civiles.

Otro padre de familia pidió justicia y juicio político y cárcel para Aguirre y el ex Alcalde de Iguala, José Luis Abarca.

“El Gobernador es un perro, maldito, desgraciado, asesino que no tiene ética, acaso nunca fue a la escuela. Que dejen de mentir, él que es de la Costa Chica, traiciona a su pueblo”, dijo al micrófono el padre de familia.

Los manifestantes izaron una bandera que dice Costa Chica, porque Aguirre es oriundo de esa región y como símbolo del repudio de su pueblo.

Por su parte, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) anunció un plantón indefinido en el Zócalo de Chilpancingo.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video