“Esta es una mirada íntima a un cultivador de marihuana en California. Nos conocimos hace un año y medio, y este proyecto se ha realizado al fin. Aunque en California el cultivo de la marihuana es legal y también su uso dentro de lineamientos estrictos, hay situaciones en las que sigue siendo ilegal. No es culturalmente aceptable para cosechar o vender, a pesar de que muchas personas en el área de crecimiento lo hagan y se trate de una gran parte de la economía local. Cada año, este productor, Ben, contrata a jóvenes para ayudar con la cosecha. En la cosecha trabajan alrededor de un mes y luego Ben se queda solo otra vez. La historia que trato de comunicar, que no se trata simplemente de plantar marihuana, se trata también de la experiencia de una persona aislada socialmente y nuestra relación con ella. Ben está obsesionado, es un poco oscuro, y se encuentra en un lugar fuera del camino”.
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“Esta serie no es un documental autorizado sobre la agricultura. Yo soy subjetivo, y estoy mucho más interesado en revelar una realidad psicológica y la emoción o sentimiento que la grabación de la verdad fotográfica”.
–Ben, 2010.
“En mi primera visita a su granja, Ben quería estar en ninguna foto. Sin embargo, en los viajes posteriores que hice por ahí, nuestra relación creció y comenzó a confiar más en mí y no le importó ser objeto de mis imágenes. Estamos muy cerca ahora y él siente muy cómodo siendo fotografiado. He estado fotografiándolo a él, y a sus trabajadores y a la granja durante tres años y medio. Somos cercanos, se abre completamente y se expone a sí mismo, emocionalmente y legalmente. Cuando viajo a la finca para ‘disparar’ estoy solo y, a veces se sienten vulnerables. Los elementos de este proyecto son aproximadamente, la distancia entre nosotros y nuestra cercanía.
“¡Hay historias divertidas para muchos! No sé por dónde empezar… bueno, Ben y sus trabajadores a menudo se burlan de mí porque yo soy de Nueva York y conozco muy poco acerca de la agricultura y la vida rural, que yo llamo a Ben “ratón de país” y que él me llama “ratón de la ciudad”. Cuando estábamos haciendo las fotas en la bañera, estábamos tocando música fuerte y Ben estaba cantando esta vieja canción de Johnny Horton llamada “Hacia el norte de Alaska”.
