Ciudad de México, 10 de julio (SinEmbargo).– El registro del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) como partido político, marcará una nueva etapa de la izquierda mexicana, con un “rostro renovado”, que le quitará “el monopolio” al Partido de la Revolución Democrática (PRD) y dividirá el voto, coincidieron especialistas.

Desde que Andrés Manuel López Obrador rompió con el Sol Azteca y anunció que iría por el registro de Morena, pasó ya año y medio para que el anhelo del tabasqueño se concretara.

“Morena se esperaba desde hace un tiempo, tuvo un camino difícil que recorrer, consiguió los requisitos y la izquierda que antes se concentraba en un sólo partido, viene con un nuevo rostro más amplia y plural, pero también viene con un voto más polarizado y repartido entre la izquierda, que podría beneficiar a la derecha y al centro”, dijo Luis Miguel Pérez Juárez, profesor Investigador de la Escuela de Graduados en Administración Pública y Política Pública del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).

Pérez Juárez explicó que esa afectación se verá en las elecciones de 2015, debido a que se podrán realizar pocas alianzas y los partidos irán solos; sin embargo, en 2018, aunque López Obrador ha dicho que no se aliará al PRD, es probable que las condiciones electorales lo lleven a cambiar de decisión.

“En 2015 será difícil que se puedan sumar los votos, y la suma del PT [Partido del Trabajo], PRD y Morena nos dirá la fuerza real de la izquierda. Para 2018 podrían realizarse alianzas, aunque hay razones que hacen pensar que irían divididas, en 2018 se verán obligados a unirse para poder ganar una elección”, detalló.

En la víspera del registro, Martí Batres Guadarrama, presidente del Consejo Ejecutivo Nacional del Morena, dijo que el nuevo partido político será una verdadera oposición al Partido Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y según los expertos, al menos en las elecciones de 2015, al PRD.

A partir del primero de agosto de este año, podrán contar con recursos públicos del Instituto Nacional Electoral (INE) para arrancar con las campañas políticas de sus candidatos a los distintos puestos de elección del próximo año.

Después de un tiempo fuera de la escena pública a raíz del infarto que sufrió en diciembre del año pasado, López Obrador está muy activo desde hace un mes en las redes sociales y en giras al interior de la República Mexicana, donde destapa candidatos.

“SALUDABLE” LA LLEGADA DE MORENA

El arribo de Morena al escenario político nacional como partido, es saludable, debido a que el PRD tenía el “monopolio” de la izquierda, opinó Héctor Quintanar, especialista de la Facultad Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

“Es muy saludable que Morena obtenga su registro, ha nadado contra corriente. Es saludable que haya una opción diferente al perredismo, que había querido asumir el monopolio de las izquierdas”, dijo.

Quintanar indicó que Morena funcionaba como un partido político sin registro desde 2006, cuando se tendieron redes ciudadanas para luchar en contra del desafuero de Obrador.

“Había funcionado sin recursos. Ahora se viene a formalizar a un movimiento que se gestó desde hace 10 años, que tiene pluralidad desde las bases sociales, tiene una dinámica propia y su carácter de ciudadano puede reivindicar a la política nacional, aunque tiene sus contraluces, nunca falta en cualquier partido, que tenga en su seno a militantes oportunistas que llevan las prácticas de otros partidos, gente que se formó en el perredismo”, dijo.

Para obtener su registro Morena superó en más del doble los 220 mil afiliados que le solicitó la autoridad electoral.

Realizó más de 30 asambleas estatales con un mínimo de 3, 000 militantes cada una y se conformaron 2 mil 500 comités municipales.

En un inicio los presidentes estatales Guanajuato, Querétaro y Jalisco, denunciaron persecución por parte de las autoridades municipales y estatales, cuando afiliaban en lugares públicos.

Mientras que en municipios como Piedras Negras, Coahuila, Tamaulipas y otras regiones del norte, debieron lidiar con la inseguridad y el crimen organizado que los limitaba a viajar sólo durante el día y a realizar las afiliaciones casa por casa con mayor cuidado.

Los dirigentes de Morena esperaban el registro desde finales de mayo y principios de abril, sin embargo para los expertos el tiempo que se tardó en registrarse está dentro de lo normal.

“Lo lograron con mínimos recursos en menos de un año. Eso habla de que hay una fuerte cantidad de ciudadanos que lo apoyan. Para las leyes mexicanas fue rápido, para finales de 2013 ya tenían los afilados que ocupaban”, dijo.

En febrero de este año Morena abrió 50 por ciento de sus candidaturas a ciudadanos, aunque no estén estén afiliados al partido.

“Nos referimos a gente de la sociedad civil, que están en movimientos sociales, artistas, empresarios medios, del mundo de la cultura, activistas. Personalidades que no se quieren afilar a Morena, pero que coinciden con la plataforma y en esta lucha. Con esto les estamos diciendo que Morena es un instrumento de la sociedad, por eso vamos abrir la mitad de todas nuestras candidaturas”, mencionó Batres durante el anuncio.

Batres también anunció que no haría alianzas con otros partidos políticos en 2015, pero sí con movimientos sociales.

Para este año Morena tiene como meta afiliar a medio millón de militantes más y sumarlos a los más de 600 mil que ya presentó ante el Instituto Nacional Electoral.

Héctor Quintanar añadió que lo que más ayudó a Morena, fueron los bastiones de López Obrador, el Distrito Federal y Tabasco, de donde salió la mayor cantidad de afiliados.