Gerardo López, de 39 años publicó una foto en Facebook con los tatuajes que se hizo en el pasado para criticar el duro enfoque que defiende el Presidente estadounidense para luchar contra las maras.
Ciudad de México, 10 de agosto, (SinEmbargo/RT).- Un ex miembro de MS-13, conocida también como la Mara Salvatrucha, en Los Ángeles ha criticado la “guerra” del Presidente Donald Trump contra esta pandilla, que priva a los jóvenes de la oportunidad de rehabilitarse, informa Univision.
Gerardo López, de 39 años, reaccionó a la promesa de Trump de erradicar a los “animales” que integran a la MS-13, compartiendo en su cuenta de Facebook una foto con el torso desnudo en la que muestra los tatuajes que se hizo cuando era adolescente.
“Tengo un tatuaje de la MS-13. ¿Esto me hace un animal también?”, preguntó en su publicación López, quien fue miembro de Normandie Locos, una ‘clica’ de la Mara Salvatrucha, durante ocho años.
“La verdad es que tengas un tatuaje de la MS-13 o no, de todos los modos te verá como a un animal si no le gusta tu etnia, porque es un racista”, añadió.
López, diplomado en Justicia Criminal, dijo a Univision que publicó la foto de su torso para reclamar que si una persona tiene tatuajes de su pasado no debería ser tratado como un animal, porque “una persona sí puede cambiar”.
López contó que ingresó en la pandilla a los catorce años de edad, en un barrio pobre de Los Ángeles donde los jóvenes tenían pocas oportunidades, y pasó por varias prisiones juveniles.
Ahora es director ejecutivo de la organización Homies Unidos en Denver (Colorado, EU), que ayuda a los jóvenes a rechazar la violencia.
El activista explicó que el error de la lucha del Gobierno de Trump contra las pandillas consiste en encarcelar a los delincuentes jóvenes sin ofrecerles oportunidades de rehabilitación.
Aseguró que las autoridades no quieren aceptar que esas personas cambien para bien y recordó que tras mudarse a Denver en 2002 para empezar una nueva vida fue arrestado al cabo de siete años y acusado de ser uno de los líderes de la MS-13 y de estar implicado en el tráfico de drogas. López pasó dos años entre rejas hasta que fueron desestimados todos los cargos que pesaban contra él.
