Ciudad de México, 11 de diciembre (SinEmbargo).– El primer año de gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto resultó más sangriento que el último año de su predecesor, Felipe Calderón Hinojosa, al registrar 19 mil 016 ejecuciones contra los 18 mil 161 asesinatos violentos de los últimos 11 meses del michoacano, todos relacionados con la guerra contra el crimen organizado, publicó el semanario Zeta.
El director del Centro de Investigación en Sistemas de Salud del Instituto Nacional de Salud Pública, Rafael Lozano Ascencio, afirmó que la esperanza de vida en México decreció de 2005 a 2010 por los altos niveles de homicidios que se registraron durante ese lapso en el territorio nacional.
Y previamente, el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal A. C. (CCSPJPAC) denunció que el gobierno de Peña Nieto, en materia de seguridad, ha incrementado el riesgo de que el país caiga en una condición de Estado fallido, pues de continuar con la tendencia de los últimos 12 meses, al finalizar el sexenio podría enfrentarse con “serios problemas de gobernabilidad”.
Además, nuevas fosas clandestinas fueron encontradas en el estado de Morelos, poco después del hallazgo de decenas de cuerpos tirados en cementerios del crimen organizado en la frontera entre Michoacán y Jalisco.
Pero la información sobre la guerra que libra México ha salido de las portadas de los diarios mexicanos, de acuerdo con Artículo 19.
El semanario Zeta reveló que en los últimos 11 meses de gobierno de Calderón, las ejecuciones alcanzaron la cifra de 18 mil 161, mientras tanto, datos duros documentados por la revista arrojan la cantidad de 19 mil 016 ejecuciones entre el 1 de diciembre de 2012 y el 31 de octubre de 2013, mismo rubro que el gobierno peñista empezó clasificando como “homicidios dolosos relacionados a delitos federales”, pero que son producto de la guerra que mantiene el gobierno federal contra los cárteles de la droga, que disputan el control de la producción, tráfico y distribución de sustancias ilegales.
ESTADOS MÁS VIOLENTOS
De acuerdo con Zeta, en el gobierno de Felipe Calderón, Chihuahua, Sinaloa y Guerrero fueron los estados que registraron más ejecuciones, en la administración de Enrique Peña Nieto, el estado de Guerrero, gobernado por Ángel Aguirre Rivero (antiguo priista que ganó la gubernatura en la alianza PAN-PRD), se ubica en primer lugar con mil 942 ejecuciones, luego de 11 meses de sangrienta gestión federal.
El segundo lugar es para el Estado de México, con mil 846 ejecuciones, por cierto, entidad natal de Enrique Peña Nieto, que éste gobernó entre 2005 y 2011 y que actualmente administra el también priista Eruviel Ávila.
El tercer lugar lo ocupa el Estado de Chihuahua, con mil 633 ejecuciones, entidad gobernada por el también priista César Duarte Jáquez.
Michoacán y Jalisco se localizan en cuarto y quinto escaño en cuanto a ejecuciones, con un total de mil 416 y mil 406, respectivamente; en ambas entidades federativas se libra una guerra principalmente entre el Cártel de Sinaloa, a través del Cártel de Jalisco Nueva Generación, contra los autonombrados “Caballeros Templarios”.
La ONG CCSPJPAC relata que al final del sexenio del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, había más de un centenar los municipios en donde el poder real los tenían los grupos criminales y no los gobernantes, principalmente en los estados de Tamaulipas, Michoacán, Guerrero, Chihuahua, Durango, Sinaloa, Coahuila y Nuevo León.
Sin embargo, bajo la administración de Enrique Peña la situación se agravó. Mientras que no se ha recuperado el control de un sólo municipio, más demarcaciones han caído en manos de los grupos criminales y los abusos que cometen contra la población se han tornado más graves, sobre todo Michoacán y Guerrero. Por eso precisamente en esos estados han surgido los grupos de autodefensa, un nuevo agente de la violencia.
Respecto a las ciudades, en los primeros 11 meses de Peña Nieto, Acapulco ha sido la ciudad con más homicidios dolosos –835 “averiguaciones previas”–, de acuerdo con información oficial de procuradurías y fiscalías estatales.
Mientras el Distrito Federal se había mantenido alejado de los primeros lugares en cuanto a homicidios dolosos en el sexenio de Calderón, con la actual administración federal se ubica ya en segundo escaño, con 708 “averiguaciones previas” por homicidio doloso.
Declarada por los tres niveles de gobierno como “modelo” de seguridad, Tijuana se encuentra en tercer lugar, con 502 homicidios dolosos en 11 meses del actual Gobierno Federal.
GOBIERNO NO RECONOCE CONFLICTOS ARMADOS
La Academia de Ginebra de Derecho Internacional Humanitario y Derechos Humanos realizó un informe donde indica que los conflictos armados acabaron con la vida de 95 mil personas en todo el mundo. México ocupa el segundo lugar de los países donde más muertes hubo en 2012, superado sólo por Siria.
En México, 9 mil personas perdieron la vida en 2012 en la guerra relacionada con la violencia del narcotráfico, que ha matado entre 60 mil y cien mil muertos en los pasados siete años.
México rechaza el concepto de conflicto armado, pero el “Informe sobre la guerra” indica que sí debe aplicarse por la magnitud de la violencia, la estructura de los carteles y los activos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
FOSAS CLANDESTINAS EN MORELOS
Autoridades de Morelos confirmaron ayer el hallazgo de una tercera fosa clandestina con cinco cuerpos, con lo que suman ya 23 los restos rescatados en los últimos días. La fosa se encontró en el poblado de Huajintlán, municipio de Amacuzac, en los límites con Guerrero, publica la prensa local.
El Gobernador de Morelos, Graco Ramírez Garrido Abreu, informó un día antes sobre el hallazgo de dos fosas clandestinas de las cuales, dijo, será la Procuraduría General de la República (PGR) la que dé más detalles.
Al respecto, Graco Ramírez dijo en conferencia de prensa que “de las fosas que se han hablado, estamos esperando todo el reporte; se trata de osamentas, no son cuerpos de actos recientes”.
El mandatario perredista afirmó que “están haciendo los estudios de ADN, identificando a las víctimas, pero fueron ejercitadas esas acciones violentas antes de que llegáramos al gobierno nosotros, no corresponden a este gobierno”, precisó.
A una pregunta sobre el número oficial de cadáveres hallados, aseveró no tener la cifra de las osamentas, pues “están trabajando, estoy informado y están trabajando para identificar todo y poder informar. La PGR está a cargo de esta investigación, junto con nosotros también”.
“Está la Procuraduría y están ellos encargados de dar finalmente la resolución de cuántos, y por qué y quiénes son para poder avanzar en las investigaciones”, puntualizó.
