Al menos 5 mujeres acusaron este día al candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, de haberlas tocado y besado sin su consentimiento. Los primeros dos casos fueron dados a conocer por el diario The New York Times, a los que el equipo del magnate calificó de “ficción”y como una difamación coordinada y completamente falsa.

Ciudad de México, 12 de octubre (SinEmbargo/EFE).– Una lluvia de denuncias ha caído este día sobre Trump, y en esta ocasión no es por el tema de sus impuestos o sus comentarios xenófobos sino por sobre el tema que han minado su carrera a la Presidencia de Estados Unidos: los escándalos sexuales. Hoy al menos 5 mujeres han acusado al magnate de haberlas atacado sexualmente sin su consentimiento.

Las mujeres hablaron para la prensa norteamericana – The New York Times, People, Palm Beach Post – y en sus redes sociales y denunciaron desde tocamientos, besos forzados y propuestas indecorosas.

Escándalos que se suman al video destapado por el diario The Washington Post, que volcó el apoyo de varios miembros prominentes del Partido Republicano y que ha hecho que donadores a su campaña exijan la devolución del dinero, por los comentarios sexistas y machistas que hace en la grabación.

NYT REVELA DOS TESTIMONIOS

Dos mujeres denunciaron hoy a The New York Times que el candidato presidencial republicano de Estados Unidos, Donald Trump, se sobrepasó con ellas en el pasado, una en un avión hace tres décadas y la última en 2005, en un ascensor.

Jessica Leeds, que ahora tiene 74 años, explicó al diario neoyorquino que hace tres décadas el empresario, sentado en primera clase junto a ella en un vuelo a Nueva York, le tocó los pechos e intento meter su mano debajo de la falda apenas unos minutos después del despegue y sin que se hubieran conocido antes.

“Era como un pulpo”, explicó la mujer, que salió corriendo para sentarse en las últimas filas el resto del vuelo.

“Fue una agresión”, apuntó Leeds al diario, que explicó que la mujer no denunció los hechos al personal del avión porque “en esa época las mujeres de negocios a menudo tenían que soportar esos comportamientos de sus compañeros varones”.

El segundo testimonio es el de la joven Rachel Crooks y habría pasado en el ascensor de la Trump Tower de Manhattan en 2005.

Crooks explicó al diario que se presentó al magnate al coincidir en el ascensor y dado que su empresa hacía negocios con él y que la respuesta de Trump fue besarla en la boca.

“Me besó directamente en la boca”, cuenta al diario la mujer, que explicó que no fue un accidente sino una violación, según relata el periódico.

“Fue muy inapropiado (…). Estaba tan molesta de que él pensara que yo era tan insignificante como para poder hacerme eso”, contó Crooks.

Tras ese episodio, la joven volvió a su mesa y llamó a su hermana, Brianne Webb, en Ohio, para contarle lo que acababa de suceder.

Este segundo episodio habría transcurrido en 2005, el mismo año en el que se grabó el vídeo que ha causado un terremoto en la campaña del candidato republicano a la Casa Blanca al aparecer vertiendo vulgaridades sobre las mujeres.

Según el diario The New York Times, Trump fue informado el martes sobre esta información pero rechazó su veracidad.

También negó que hubiera asaltado sexualmente jamás a una mujer en el segundo debate presidencial contra la demócrata Hillary Clinton en Saint Louis, Misuri.

Justamente este jueves, medio centenar de víctimas de agresiones sexuales se concentraron hoy frente a la Trump Tower de la Quinta Avenida en Manhattan para mostrar su rechazo al candidato republicano por su actitud hacia las mujeres.

Trump no se encontraba en la Torre Trump pues está haciendo un acto de campaña en Florida.

En ese evento, el magnate se refirió a la falta de apoyo tras el debate de Paul Ryan, presidente de la Cámara de Representantes.

El candidato también arremetió contra el partido Republicano, la Justicia estadounidense, la “prensa deshonesta” y su rival demócrata.

UNA ASISTENTE LO DENUNCIA

Mientras que, una mujer de Florida denunció hoy a un diario local que el candidato por el Partido Republicano la “toqueteó” en 2003 al término de un concierto en el hotel Mar-a-Lago, ubicado en Palm Beach y propiedad del magnate inmobiliario.

Según denunció hoy Mindy McGillivray al periódico Palm Beach Post, el hecho ocurrió tras un recital ofrecido por Ray Charles en ese hotel del sur de Florida, a la que había ido, como en otras seis ocasiones, en calidad de asistenta del fotógrafo de la propiedad, Ken Davidoff.

Según relata la mujer de 36 años, en un momento dado estaba de pie detrás del escenario junto al fotógrafo observando al intérprete y a su derecha estaba Donald Trump junto con su en ese entonces prometida, Melania, cuando de pronto sintió que la agarraban y un “empujón”.

“De repente sentí un toqueteo, un pequeño empujón. Creí que era la bolsa de la cámara de Ken, fue mi primer instinto. Me doy la vuelta y ahí está Donald. El como que quita la mirada rápidamente. Yo rápidamente me doy la vuelta hacia Ray Charles, y me quedo aturdida”, relató la mujer, quien le contó de inmediato el hecho al fotógrafo.

“Fue bastante cerca del centro de mi trasero. Me sobresalté, salté”, agregó.

ESCRITORA DE PEOPLE TAMBIÉN LO ACUSA

Natasha Stoynoff, escritora de la revista People, dio a conocer en el sitio web publicó en el portal del medio un relato en el que acusó a Trump de besarlas por la fuerza.

La escritora dijo que en diciembre de 2005 se reunió con el magnate y Melania para hacer un trabajo sobre su aniversario.

“Cuando tomamos un descanso y Melania, que estaba embarazada, fue un momento a un piso superior, Trump dijo que quería enseñarme la mansión. Había una ‘tremenda’ habitación en particular, dijo, que tenía que ver.

Entramos solos al cuarto y Trump cerró la puerta tras él, volteé y en segundos me empujó a la pared y metió su lengua a mi garganta”, detalló Stoynoff.

“Se necesita mucho para empujarme. Pero Trump es mucho más grande […] me  tomó por sorpresa, y me hizo perder el equilibrio. Me quedé de piedra”.

Y aseguró que el mayordomo irrumpió en la habitación y entonces el magnate la soltó.

Posteriormente, dijo, antes de que Melania volviera incluirse en la plática Trump dijo: “Usted sabe que vamos a tener una aventura, ¿verdad?”.

Natasha señaló que se sintió culpable, por lo que no hizo denuncia alguna.

REINA DE BELLEZA TAMBIÉN LO SEÑALA

Cassandra Searles, quien fue señorita Washington 2013, recuerda que cuando competía en el certamen de belleza, numerosas veces fue víctima de acoso por parte del empresario, quien, según relata Searles, continuamente le tocaba el trasero y la invitaba a su habitación en el hotel.

Hace una horas, la modelo subió a su cuenta de Facebook una foto de la edición 2013 del concurso en donde aparecen las participantes rodeando al magnate. La imagen está acompañada de un mensaje en el que Searles califica a Trump como un “misógino” que trataba a las mujeres “como ganado”.

“¿Ustedes recuerdan cuando teníamos que hacer nuestras presentaciones en el escenario, pero este tipo nos trataba como ganado y nos hizo hacerlo de nuevo porque no lo miramos a los ojos? ¿También recuerda cuando él procedió a tenernos en fila para que pudiera obtener una mirada más personal? Yo, literalmente, tengo pesadillas sobre esto”.