20 guacamayas rojas son liberadas en Chiapas tras 70 años de extinción en Palenque

13/01/2015 - 12:00 am
Los programas de reintroducción en varios países como El Salvador y Costa Rica reportaron un éxito mayor de 70 por ciento después de 2 y 3 años, lo que demuestra que esta herramienta puede ser útil. Foto: Shutterstock.
Los programas de reintroducción en varios países como El Salvador y Costa Rica reportaron un éxito mayor de 70 por ciento después de 2 y 3 años, lo que demuestra que esta herramienta puede ser útil. Foto: Shutterstock.

Ciudad de México, 13 de enero (SinEmbargo).-Después de 70 años de estar extinta en la zona, 20 ejemplares de guacamaya roja fueron liberados a la vida silvestre en la reserva federal protegida del Parque Nacional de Palenque en Chiapas.

Esta acción se logró gracias a la colaboración entre el Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la iniciativa privada, organizaciones no gubernamentales y autoridades federales, estatales y locales.

Junto con la asociación civil Acajungla y los ecoparques Aluxes, Palenque y Xcaret, los protectores de los animales esperan que para el resto del año se puedan liberar 250 aves más.

La guacamaya roja es una especie en peligro de extinción en México por su persecución para el comercio ilegal y por la pérdida de su hábitat primario que son las selvas tropicales húmedas.

En México sólo existen dos poblaciones aisladas: la primera de de aproximadamente 50 ejemplares está en la Selva de los Chimalapas en Chiapas y la otra ,que suma entre 150-250 aves, se localiza en la Selva Lacandona, de acuerdo a la organización Acajungla, el Instituto de Biologíad e la UNAM y al Parque Xcaret.

Palenque es un sitio estratégico para la reintroducción de la especie, pues se ubica entre las áreas donde están las otras dos poblaciones que aún existen en el país por lo que se busca establecer una tercera población de guacamayas para construir un eslabón y repoblar los lugares donde solían vivir.

La guacamaya roja o guacamaya escarlata es uno de los psitácidos -familia que incluye loros, pericos, cotorras y más guacamayas -más grandes de América que se avistaba al sur de Tamaulipas, Veracruz, Oaxaca, Tabasco, Campeche y Chiapas.

Las poblaciones de esta especie, sin embargo, fueron diezmadas desde la década de 1970 por el comercio ilegal, la fragmentación de su hábitat y la competencia por sitios de anidación en los árboles con abejas africanas.

Se estima que cada año hay una captura ilegal de 50 guacamayas, ya que se requieren permisos desde 1979 con un valor de mil 500 y 2 mil 700 dólares en el mercado.

La guacamaya roja se encuentra enlistada en la categoría Peligro de Extinción (P) en la OM-059-SEMARNAT-2010 y en el Apéndice I de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) pues está extinta en el 95 por ciento del área en donde se situaba en México.

El programa de liberación busca que se incluya el menor contacto humano para evitar su adecuación al ser humano y monitorear los movimientos y supervivencia de las guacamayas liberadas.

Palenque podría significar una experiencia piloto del que se puedan desprender proyectos de liberación más amplios y ambiciosos. Entre los objetivos esperados es tener por lo menos cinco parvadas de 8 a 12 individuos cada uno para el primer año de esta reinserción de ejemplares, además de mayores estudios de sitios donde se puedan colocar nidos artificiales de guacamayas.

En el periodo comprendido entre 1970 y 2004, en la Selva Lacandona se perdió el 40% de las selvas medianas inundables, que constituyen el hábitat crítico para la anidación de la guacamaya roja.

El monitoreo de la guacamaya roja se realiza en colaboración con financiamiento de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video