Ciudad de México, 13 de marzo (SinEmbargo/Informador).– La deuda que tiene el Gobierno de Jalisco por el préstamo de 320 millones de pesos (MDP) que fue solicitado para edificar la Villa Panamericana para los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011, durante la administración del panista Emilio González Márquez, no se ha saldado y, por el contrario, ya generó intereses por 60 millones de pesos y sigue creciendo.
La Inmobiliaria y Promotora de Vivienda de Interés Público del Estado (Iprovipe), dependencia que solicitó el préstamo, así lo consigna en su reporte oficial en línea sobre deuda pública.
Desde el 5 de noviembre de 2010 se arrastra el adeudo. El rezago genera un promedio de 20 millones de pesos de intereses cada año. Octavio González Padilla, titular de la Iprovipe, señaló que no han podido pagar porque la Villa Panamericana, integrada por 650 departamentos de dos y tres recámaras en cuatro edificios, sigue sin comercializarse.
Hasta el momento no hay una fecha para liquidar el monto, a pesar de que ha habido acercamientos para buscar soluciones con la Secretaría de Administración, Planeación y Finanzas. Reconoce que “no se tienen recursos que nos permitan hacer pagos de ese préstamo”.
Una de las posibles opciones para abonar a la deuda es vender algunos de los activos de la Iprovipe.
La única certeza es que la Villa Panamericana no será habitacional. González Padilla explica que, en conjunto con Corey Íntegra, que edificó el complejo, y el Ayuntamiento de Zapopan, se decidirá cuál será el fin de los departamentos.
González Padilla argumenta que heredó finanzas complicadas de la administración pasada; sin embargo, hasta ahora no ha tenido acercamientos con el Tribunal de lo Administrativo del Estado (TAE) para destrabar el litigio que tiene suspendida cualquier acción para utilizar la Villa.
En el proyecto de la Villa, originalmente la empresa Corey Íntegra ponía el terreno y otras responsabilidades como los planes arquitectónicos y la administración de las ventas. Al Gobierno del Estado le correspondía prestar dinero para la construcción.
Pero entonces brotaron complicaciones para el proyecto. Primero fue una suspensión ordenada por un juez estatal en mayo de 2011, seis meses antes de que se inaugurara la justa deportiva internacional; luego, ante otro juez federal, las obras se reanudaron y finalmente los atletas se hospedaron en esa zona. Pero todo este proceso requirió dinero, y el Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco tuvo que comprar 340 millones de pesos en departamentos; y aun después, cuando ese dinero se terminó, la Iprovipe aportó otra cantidad.
