Ciudad de México, 13 de julio (SinEmbargo).- “Todo México busca al Chapo”. El titular del noticiero radial en un lugar remoto de Paraguay, donde hoy el Papa Francisco cierra su gira latinoamericana con una misa multitudinaria, retumbó en el éter con la fuerza de una inusitada realidad paralela.
Insólita y desgraciada, la noticia comenzó a generar no sólo la consabida multitud de memes (si saben que me voy a escapar, ¿para qué me apresan?, por ejemplo, tan hilarante como cierto) en las redes sociales.
Alguien desde Argentina dice, en una recurrente y esperada mirada futbolística sobre la realidad: Milicos 0 Chapo 2. “Milicos” es militares en lunfardo y alguien desde México responde: Son lo mismo, un solo ente que ha causado mucho dolor en este país desangrado.
El Chapo se fugó otra vez. Again. El titular que rompió la rutina dominguera, las discusiones en torno a la “conversión” izquierdista del jefe de la Iglesia Católica (a juzgar por los discursos a favor de los desposeídos, Bergoglio es una especie de “Che” eclesiástico), la final de Wimbledon entre “Nole” Djokovic y Roger Federer…todo ha pasado a segundo plano porque el narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, considerado el narcotraficante más poderoso del mundo, se fugó el sábado a las 20:52 horas del Penal Federal del Altiplano, en el Estado de México.
“Y que se vuelve a fugar El Chapo”: la frase que se repite una y otra vez en el aire del continente, incluso –sin exagerar- del mundo.
“Y que vuelven a creer que les creemos que se fugó”: otra de las frases que se repiten como contrapeso en una realidad donde todos desconfían de todos y todo.
Porque entender este fenómeno es tarea compleja, nunca sobran los libros dedicados a la figura de quien encabezó la lista Forbes como uno de los hombres más ricos del mundo o aquellos destinados a analizar la historia y el desarrollo del tristemente célebre Cártel de Sinaloa, fundado por quien ahora no sólo pasará a la historia como un narcotraficante poderoso, sino como alguien que siempre sabe dónde se guardan las llaves de la prisión.
1.LOS SEÑORES DEL NARCO, por Anabel Hernández
Los señores del narco es una descarnada crónica sobre las alarmantes complicidades de los altos círculos políticos, policiales, militares y empresariales con el crimen organizado.
Anabel Hernández examina rigurosamente el origen de la sangrienta lucha por el poder entre los grupos criminales y cuestiona la guerra del Gobierno Federal contra la delincuencia organizada.
Desde 1970, cuando se controlaba el tráfico de enervantes haciendo que los narcos prácticamente pagaran impuestos al gobierno, hacia los años ‘80, cuando los jefes de la organización criminal del Pacífico, auspiciados por la CIA, incursionaron en el jugoso negocio de la cocaína, hasta el surgimiento de poderosos capos como los hermanos Beltrán Leyva, Ismael El Mayo Zambada o Joaquín Guzmán Loera, quienes lograron penetrar las estructuras del Estado y ponerlas a su servicio.
2.THE LAST NARCO: HUNTING “EL CHAPO”, THE WORLD’S MOST WANTED DRUG LORD (El último narco: cazando a ‘El Chapo’, el capo más buscado del mundo), por Malcolm Beith. El periodista británico construye con muchos datos una biografía verídica de Guzmán Loera, desde su nacimiento en el estado de Sinaloa, en 1957, hasta su consolidación como uno de los más grandes cabecillas del narcotráfico en América.
El escape en Puente Grande en 2001, a dos meses de que Vicente Fox asumiera la Presidencia de México, en nombre del Partido de Acción Nacional (PAN), el papel de las agencias antidrogas estadounidenses frente a una fuga que se tomaron como una afrenta difícil de superar, las ríspidas relaciones entre los Estados Unidos y México y sus visiones encontradas en torno al crimen organizado: un análisis con muchas voces acerca de un tema de hondo interés para el México contemporáneo.
3.EL CARTEL INCÓMODO: EL FIN DE LOS BELTRÁN LEYA Y LA HEGEMONÍA DEL CHAPO GUZMÁN, POR JOSÉ REVELES.
Cuerpos decapitados, “pozoleados”, descuartizados; narcomantas, cartulinas y videos con mensajes de violencia o denuncias contra el gobierno por atacar sólo a unos traficantes y encubrir y consentir a otros; ataques armados a centros de adicción, a discotecas, a fiestas particulares de jóvenes; amenazante paramilitarismo.
El escenario de nuestra violenta cotidianeidad desde que el Gobierno Federal le declaró la “guerra” al narcotráfico, pero sin emplear inteligencia policia o militar, sin desmantelar redes financieras, lavado de dinero y empresas fantasmas. Siguen intactas las estructuras políticas que brindan protección a la criminalidad. .
El libro contiene los informes del Cisen que Alfredo Jiménez Mota, periodista de El imparcial de Hermosillo, utilizó en sus publicaciones antes de ser desaparecido en 2005.
4.MARCA DE SANGRE: LOS AÑOS DE LA DELINCUENCIA ORGANIZADA, POR HÉCTOR DE MAULEÓN
¿Cuántos hilos corren debajo de la historia del crimen organizado en México? ¿Podemos reconocer los más intrincados y sólidos? No es otro el propósito de Marca de sangre, crónicas que borran la frontera entre el periodismo y la literatura, que terminan por demostrar que nuestra realidad puede superar cualquier increíble ficción.
Héctor de Mauleón ha trazado la vida de los principales jefes, sicarios y operadores del narco mexicano de 1985 a nuestros días. En la galería surgen también funcionarios de gobierno, militares, policías que sirven a dos amos.
Con ustedes: los Beltrán Leyva, los Arellano Félix, Joaquín El Chapo Guzmán, Juan García Ábrego, Osiel Cárdenas Guillén, Amado Carrillo, Édgar Valdez, La Barbie, los Zetas y una cohorte de individuos que ha empleado sistemáticamente la violencia y el terror hasta poner en jaque la seguridad del país.
5.EL IMPERIO DEL CHAPO, DE RAFAEL RODRÍGUEZ CASTAÑEDA
Reúne las investigaciones periodísticas sobre El Chapo que han sido publicadas en el semanario Proceso en las últimas dos décadas.
Así en conjunto, configuran la trama de un hombre protagonista de algunos de los episodios más importantes de nuestra historia reciente.
Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, es más que un personaje arquetípico del narcotraficante mexicano. Ha sido nombrado como uno de los hombres más ricos del mundo por la revista Forbes; está al nivel de los líderes de Al Qaeda u otras organizaciones terroristas en la nomenclatura de la justicia estadounidense; su mito incluye por igual grandes despliegues de generosidad y actos de crueldad inenarrables; su poder rebasa fronteras y espectros políticos; como en las grandes épicas, Guzmán Loera goza de un epíteto entre quienes le han visto de frente: “El señor del gran poder”.
6.EL CÁRTEL DE SINALOA’, DE DIEGO ENRIQUE OSORNO
Explica y detalla el mundo del narco: desde los pioneros del negocio como Pedro Avilés, los sicarios desalmados que matan gobernadores como el Gitano, policías corruptos al estilo Guillermo González Calderoni, hasta hechos sorprendentes como la expulsión masiva de chinos durante la segunda década del siglo XX, las primeras rutas trasnacionales de la cocaína o la fuga de Joaquín el Chapo Guzmán.
Aquí todos cuentan su versión sobre el lucrativo tráfico de drogas en Sinaloa, que es la historia misma del narcotráfico en México. Este libro da voz al hijo de un narcotraficante que relata cómo es vivir con ese estigma, también aparece un abogado de la mafia que abre puertas de tribunales y prisiones de máxima seguridad, soldados oaxaqueños que erradican cultivos de marihuana en la sierra de Badiraguato, un comandante guerrillero del ERPI en Guerrero, o un político y empresario millonario de San Pedro Garza García, Nuevo León.
Se da a conocer así mismo la versión directa de capos como Miguel Ángel Félix Gallardo, cuyos escritos de puño y letra acusan a las autoridades de ser las autenticas responsables de crear y organizar la distribución de los llamados carteles. (Reseña del escritor Élmer Mendoza)
7.JOAQUÍN EL CHAPO GUZMÁN. BIOGRAFÍA DE UN FUGITIVO MILLONARIO, POR JAMES BUSH.
El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos llama al capo mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán “el narcotraficante más poderoso del mundo”.
Su cabeza cuando se fugó la primera vez de la cárcel en 2011, fue valuada en 7 millones de dólares, tal era la recompensa ofrecida para quien diera algún dato sobre su paradero.
Esta es la biografía, según la mirada estadounidense, del “fugitivo millonario”, ahora más fugitivo que nunca.
8.EL CHAPO GUZMÁN, DIEZ AÑOS PRÓFUGO DE LA JUSTICIA, POR EDUARDO BARRAZA
Joaquín Guzmán Loera, mejor conocido como El Chapo, se fugó del penal de máxima seguridad de Puente Grande, estado de Jalisco, en 2001. En 1993 había sido arrestado en México bajo los cargos de homicidio y tráfico de estupefacientes. Su confinamiento duró sólo unos años de los más de veinte a los que había sido sentenciado. Su enorme influencia y poder económico le abrieron las rejas de la prisión hacia la clandestinidad.
Diez años después los gobiernos de México y Estados Unidos continuaron tras su pista y ofrecieron millonarias sumas por su captura.
“La historia vuelve a repetirse”, como dice el tango.
9.PLATA O PLOMO EL CHAPO EN EL ESPEJO, POR FELIPE VICTORIA ZEPEDA
Felipe Victoria Zepeda (periodista, abogado, extestigo protegido, autor de innumerables libros) narra en clave de ficción la traición de Beltrán Leyva al Chapo: las muertes accidentales de Camilo Mouriño y José Luis Santiago Vasconcelos, la traición de ´La Barbie´ a Beltrán Leyva, para quedarse como segundo de a bordo en el fabuloso negocio de las drogas.
El libro habla también de las presuntas relaciones del gran Capo con importantes funcionarios de las sucesivas épocas de Miguel de la Madrid, Salinas de Gortari y Fox, y de sus coqueteos con los hijitos de una Primera Dama.
10.LA BATALLA POR MÉXICO. DE ENRIQUE CAMARENA AL CHAPO GUZMÁN, POR JORGE FERNÁNDEZ MENÉNDEZ.
En este libro, Jorge Fernández Menéndez establece que la guerra contra el narcotráfico en realidad implica dos batallas: por un lado, la batalla contra los grandes cárteles y las principales rutas, y, por otro, la batalla contra el narcomenudeo, la extorsión y el secuestro. Dos batallas que se fueron incubando a lo largo de años de descuido y desatención.
Además, ambas ocurren en un proceso de guerra interna entre los grupos rivales, lo cual vuelve más grave el clima de violencia. De esas dos batallas, la que más golpea a la gente es la que se libra contra el narcoconsumo, en las calles y las escuelas. En el otro frente se han dado algunos golpes importantes, pero requiere tiempo y, además, la participación de Estados Unidos, país que sigue siendo el principal mercado para el tráfico de drogas.
Se requieren instituciones fuertes y una estrategia efectiva para hacer frente a este grave problema, pero a final de cuentas, dice el autor, son los ciudadanos quienes deben recuperar la visión y tomar las decisiones que los lleven a construir una sociedad distinta.
