RON MUECK Y LOS GIGANTES: 10 FOTOS, 5 VIDEOS

13/12/2011 - 12:00 am

Desde el 21 de septiembre pasado, el antiguo Colegio de San Ildefonso es el hogar de los colosos del artista plástico Ron Mueck. Miles de personas se han acercado hasta ese maravilloso lugar, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, para admirar las no menos impactantes esculturas hiperrealistas del australiano. Se trata de una selección de nueve obras que –aun cuando Mueck no ha producido más de 40 en toda su vida– son algunas de las más representativas de su trabajo y se exhibirán en esa sede hasta el próximo 5 de febrero.

El origen profesional del escultor, quien ahora vive en Inglaterra, fue en el mundo de los efectos especiales para el cine. Trabajó para Jim Henson en películas como Labyrinth o The Dark Crystal. Sin embargo, ya había dado un paso hacia el mundo del arte aprovechando su talento para desarrollar creaciones plásticas con un realismo sorprendente.

Mueck se mudó a Londres para establecer su propia compañía, creando utilería y “animatronics” para la industria de la publicidad. A pesar de que sus trabajos son altamente detallados, eran diseñados para ser fotografiados desde un ángulo muy específico, ocultando así el desorden de la obra vista desde otro ángulo. Mueck con más y más frecuencia deseaba producir esculturas que se vieran perfectas desde cualquier ángulo.

En 1996 cambió hacia el “arte refinado” colaborando con su suegra Paula Rego, para producir pequeñas figuras como parte de una escena que ella estaba mostrando en la Galería Hayward. Rego lo presentó con Charles Saatchi quien inmediatamente se sorprendió con su trabajo y comenzó a coleccionar y solicitar piezas. Esto lo dirigió hacia la creación que le formó un nombre a Mueck, “Dead Dad” (Papá muerto) que es una escalofriante e hiperrealista obra de silicona y otros materiales, del cuerpo muerto de su padre, reducido a dos tercios del tamaño natural. Es la única obra de Mueck que usa su propio pelo para el producto final.

Así que, aprovechando los próximos días de asueto navideño, visitar el Colegio de San Ildefonso (en cuyos muros se pueden apreciar, además, algunas de las obras más impactantes del muralismo mexicano, creadas por José Clemente Orozco, Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, Ramón Alva de la Canal, Fermín Revueltas, Jean Charlot y Fernando Leal) es una de las mejores opciones para disfrutar de un artista contemporáneo de fama mundial.

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