Ciudad de México, 12 de enero (SinEmbargo).–Las reservas internacionales en el país se han estancado, a pesar de que en distintos foros funcionarios mexicanos y de organismos internacionales destacan que llegaron a un nivel histórico, coincidieron expertos, quienes también recordaron que durante los sexenios de los priistas Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) y Ernesto Zedillo Ponce de León (1994-2000) los depósitos de moneda extranjera se desplomaron, mientras que en las administraciones panistas de Vicente Fox Quesada (2000-2006) y Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) repuntaron.

De acuerdo con expertos consultados por SinEmbargo, si bien es cierto que durante los dos primeros años de la administración del Presidente Enrique Peña Nieto no se ha registrado una caída de las reservas, sí se observa que no tienen un crecimiento sustancial, pues entre un mes y otro apenas crecen lo suficiente para mantenerse en un rango de 190 mil millones de dólares.

Ayer, el Banco de México (Banxico) informó que las reservas internacionales aumentaron 86 millones de dólares, por lo que su saldo al cierre en la semana que terminó el 9 de enero pasado fue de 193 mil 174 millones de dólares.

LAS RESERVAS PUEDEN BAJAR

Según los analistas, la creciente incertidumbre que existe respecto al aumento de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés) ha provocado que desde junio del año pasado la inyección de capital a las reservas internacionales del Banco de México se haya detenido, manteniéndose en niveles constantes, a pesar de los máximos históricos registrados en las últimas semanas por la institución financiera.

Ante esto, los especialistas consultados respondieron que esta especulación irá en aumento y estará más pronunciada en los meses de marzo y abril del año en curso, en los que probablemente se dará el incremento de las tasas, lo que significará un estancamiento de las reservas e incluso su disminución ante el retiro de capital extranjero.

Las reservas internacionales de México crecieron el año pasado y alcanzaron nuevos máximos, llegando a 193 mil 239 millones de dólares, de acuerdo con cifras dadas a conocer por el banco central, lo que representó 16 mil 717 millones de dólares más con respecto al año pasado, cuando se ubicaron en 175 mil 522 millones.

A esto se suma la línea de crédito flexible de 70 mil millones de dólares que México tiene con el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo que representa para la segunda más grande economía latinoamericana una suerte de blindaje financiero ante la volatilidad global.

No obstante, en su Boletín Semanal sobre Estado de Cuenta, publicado el 30 de diciembre, el Banxico informó que el saldo de la semana fue de 193 mil 045 millones de pesos, lo que representó una pérdida de 172 millones.

Asimismo, el pasado 6 de enero se registró un aumento en la reserva internacional por 43 millones de dólares, con lo que su saldo al cierre de la semana fue de 193 mil 088 millones de dólares.

Sin embargo, de acuerdo con los expertos, dichas reservas se han estancado, ya que actualmente el capital que las conforma se encuentra en “la parte precautoria”.

Jorge Gordillo Arias, director de Análisis Económico de CIBanco, dijo que  “las reservas están niveles históricos, a  niveles que nunca habíamos tenido, pero los actuales son tiempos preocupantes para el país y las acumuló para estos momentos”.

“Los bancos con tasas en cero de los países fuertes empezaron a invadir de liquidez, lo que provoca que en países pequeños se vean más inflados. Banxico acumuló para cuando aumenten las tasas [de la Fed], no vaya a ser la de malas que se provoque una crisis. Para evitar eso, acumula para cuando se dé el aumento de tasas en Estados Unidos, así tendrá los dólares. Para el país es una especie de seguro que puede ofrecer a las inversiones”, dijo.

Asimismo, Luis Vallarino, director de Análisis y Estrategia de Grupo Financiero Interacciones, agregó que “ las reservas han sido usadas, moderadamente, por el banco central desde el anuncio del plan de estabilización anunciado a fines del año pasado, y no se han usado más intensivamente porque el mercado no lo ha requerido y no se han cumplido las condiciones para que el banco central entre al mercado vendiendo dólares.”

Y ante la posibilidad cada vez más creciente de que la Fed aumente sus tipos de interés hay posibilidad de que se afecten los recursos de las reservas internacionales del Banco de México, pues los inversionistas se retiran a un mercado más seguro,y se espera que este incremento se dé a mediados de 2015.

“El momento que se espera es ese aumento en las tasas. La proyección es que esto ocurra en marzo o abril de este año”, dijo Jorge Gordillo, y agregó que “probablemente las reservas bajen aunque todavía seguirán a un nivel importante para conservar la estabilidad macroeconómica del país. Lo que no se quiere es que el tipo siga en aumento, y en este caso las reservas permiten que la presión venga pero no pase a un exceso”.

Debido a esto, el mercado se ha manejado por la especulación, provocando mucha liquidez por parte de los bancos metiendo inversiones sin riesgo y moviéndolo sin fundamentos, coincidieron los analistas.

“Se ha cuestionado al Banxico por qué acumula tantas reservas, pero se tiene que saber que esto cuesta. Banxico sabe que la economía puede verse presionada por el aumento de las tasas de interés. Esto, en otros momentos, ha creado desequilibrio en economías pequeñas o débiles; se vio en los ochenta y noventa, donde América Latina cayó en crisis”, recordó el analista de CIBanco.

“Pero son otros tiempos, ahora las reservas están en buenos niveles para que afrontemos mejor la tormenta, porque habrá tormenta. Todo lo que ocurre es reflejo o son señales de que ya está pasando”, agregó.

RESERVAS ESTANCADAS

De acuerdo con la evolución del capital de las reservas internacionales del banco central, desde el 2009 las reservas fueron en aumento. Sin embargo, a partir del segundo semestre de 2014, las reservas se han mantenido en los mismos niveles a pesar de los aumentos que el Banco de México ha anunciado.

Ante esto, Luis Vallarino afirmó para SinEmbargo que es cierto que no se han movido significativamente desde entonces, aunque se encuentran en máximos históricos.

“El banco central no considera necesario acumular más reservas pues, al final del día, también implica un costo financiero que no necesariamente aumenta el efecto de tener reservas amplias en la mente de los inversionistas, quienes son en última instancia los que mueven al tipo de cambio”, explicó.

Por su parte, Jorge Gordillo dijo que a pesar de que las reservas aumentaron a lo largo del año, especialmente en septiembre, el saldo permanece estancado.

“La razón de esto es que a partir de septiembre la Reserva Federal de Estados Unidos ha hecho énfasis en que ya dejó de inyectar capital y dejó de aumentar estímulos monetarios”, agregó.

“Esto ha provocado que no entre tanto flujo de dinero al país. Los inversionistas más precavidos en la puesta de inversiones sobre México están cautos sobre lo que pueda pasar en el proceso de aumento. Ante el complicado panorama económico, de incertidumbre y por el tema de la violencia, mucho dinero se salió del país, además de que a final del año pasado se tuvo un tipo de cambio presionado”, añadió.

RETIRO DE INVERSIONES

Entre los días 5 y 17 de diciembre pasados, los inversionistas extrajeron de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) bonos de deuda del gobierno federal que sumaron la cantidad de 50 mil 866 millones de pesos, principalmente por la volatilidad registrada en los últimos meses, reportó el Banco de México (Banxico).

Durante esos 12 días, la volatilidad provocó que el principal indicador de la BMV, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), sufriera un desplome de 2 mil 225.9 puntos, lo cual representó una baja de 5.14 por ciento.

En este sentido, de acuerdo con cifras proporcionadas por Banxico, durante este lapso la inversión extranjera en bonos gubernamentales cayó de 2 billones 167 mil 910.42 millones a 2 billones 117 mil 44.47 millones, debido a la poca incertidumbre que existe en los mercados financieros.