ARRANCA: De acuerdo con su perfil publicado por el instituto de Estudios para la Transición Democrática, Mauricio López nació en el Distrito Federal el 9 de enero de 1971. Estudió Economía en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y ha sido profesor adjunto de Introducción a la Economía en la UNAM e impartió la cátedra de Congreso y Sociedad Civil en la Universidad Anáhuac.

Laboró en diversas áreas de la administración pública del gobierno federal: Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Educación Pública; y Procuraduría General de la República, donde desempeñó diversos cargos, desde jefe de departamento hasta director de área.

Fue Diputado local en la III Legislatura de la Asamblea Legislativa de Ciudad de México entre 2003-2006, en donde fungió como Coordinador de la Fracción Parlamentaria del PRI.

Mauricio López fue presidente de la Fundación Colosio A.C. filial Distrito Federal.

En 2014 fue electo como dirigente del PRI en el Distrito Federal.

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GALOPE: López Valázquez tiene a su favor el haber logrado una victoria que él calificó como “histórica” en el DF en las elecciones del 7 de junio de este año.

Según fuentes consultadas, ese sería el principal acierto para impulsarlo en una candidatura. El PRI-DF conservó la Delegación Cuajimalpa, recuperó Milpa Alta y ganó por primera vez la Magdalena Contreras.

El dirigente priista le dio a su partido una victoria que desde el año 2000, cuando se eligieron por primera vez jefes delegacionales, no se había logrado.

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LA COLA: Mauricio López llegó a la dirigencia del PRI-DF para sustituir a Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, luego del escándalo que se destapó alrededor de una red de prostitución al interior del partido en la Ciudad de México. López Velázquez fue antes coordinador de asesores del Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. Voces en el PRI Nacional, de todos los niveles, coincidieron en que el entonces presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, César Camacho Quiroz, había negociado con el ex dirigente Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre para cesar la persecución desde el partido por la acusación de organizar y dirigir una red de servicios sexuales con empleadas de esa fuerza política para uso propio. El acuerdo fue elegir a un hombre afín al Presidente Enrique Peña Nieto para la dirigencia nacional; pero a uno cercano a Gutiérrez de la Torre en la Secretaría General.

El nuevo hombre en la silla principal del PRI -DF debería provenir del Gobierno federal. Aquí, dos Secretarios de Estado disputaron la posición: por un lado, Luis Videgaray Caso, de Hacienda, y por el otro, Miguel Ángel Osorio Chong, de Gobernación. El candidato de Videgaray era Aurelio Nuño Mayer y el de Osorio, López Velázquez.

Para la renovación de la Presidencia sólo se postularon tres candidatos en tanto que para la Secretaría General lo hicieron dos, según la Comisión de Procesos Internos del partido. Mauricio López, Óscar Sierra Martínez y Francisco de Jesús Alavés contendieron para el máximo cargo, en tanto que la Secretaría General la disputaron, Tonatiuh González Case y Verónica Martínez Sentíe.

Y, conforme a lo planeado, fue Tonatiuh González –uno de los hombres más cercanos a Gutiérrez de la Torre– quien se erigió como secretario general.

Recientemente López Velázquez recibió un golpe bajo del ahora Diputado de la ALDF Adrián Rubalcava, quien fue su amigo, aliado y compañero de batallas.

Juntos fueron a la elección pasada; infinidad de fotografías donde aparecen juntos se difundieron por distintos medios: abrazados, levantándose las manos en señales de triunfo, en conferencias donde López daba la cara por un político vinculado con la violencia, e incluso con un grupo criminal conocido como “Los Claudios”.

En las grabaciones realizadas por la Unidad Científica de la Policía Federal, su jefe de asesores Alejandro Zapata encargó “putearlo” y ponerlo públicamente en ridículo: “Con un pito en la cara”.

Y el operador de estos ataques fue, presuntamente, el mismo: Juan Carlos Zaragoza Ríos, quien fue despedido de Televisa y quien tenía montado un aparato de hostigamiento para periodistas, medios y políticos que supuestamente responde a la orden (y al dinero) del ex Delegado de Cuajimalpa.

Eso revelan las grabaciones realizados por orden de un juez federal.