León, Gto., 15 Mar. (Notimex).- La criminología juega un papel fundamental en la seguridad pública, por lo que resulta trascendental contar con profesionistas altamente capacitados en el tema, consideró Luis Rodríguez, presidente de la Sociedad Mexicana de Criminología.
Durante el Sexto Congreso de Criminología y Criminalística, celebrado en esta ciudad, el abogado indicó que la capitalización de esos conocimientos puede hacer la diferencia en el resultado óptimo de una investigación.
Por ello, sostuvo, este simposio busca fomentar la planeación científica enfocada a fortalecer el campo de la criminología y disciplinas auxiliares.
Rocío Naveja Oliva, rectora de la Universidad Humani Mundial, dijo que el interés por estudiar la criminología ha crecido durante los últimos años, lo cual se ve reflejado en los casi 32 mil alumnos de esta carrera que hay en todo el país.
Indicó que la criminología en México ha ganado prestigio al contar con una plantilla de criminólogos competentes, que buscan una oportunidad laboral.
Con este congreso, organizado en conjunto con la Sociedad Mexicana de Criminología, la Sociedad Mexicana de Victimología y el Consejo Nacional de Instituciones de Enseñanza Criminológica, se busca acercar a los participantes a una realidad bajo la premisa de que solo conociendo y estudiando los casos exitosos en el campo laboral se puede avanzar.
Este viernes se contó con la conferencia magistral “Feminicidios en Guanajuato”, impartida por el abogado penalista Paulino Lorea Hernández.
El jurista consideró que la tipificación del delito de feminicidio en el estado de Guanajuato, es muy limitada y que es necesario homologar al Código Penal federal.
En el Código Penal vigente en la entidad se establece que para considerarse feminicidio se requiere que la mujer víctima de homicidio, hubiese sido incomunicada, violentada sexualmente, vejada, mutilada o haya sufrido violencia intrafamiliar.
No obstante, dijo, omite tipificar casos que llevan inmersos razones de género que se prevén en otras legislaciones, como por ejemplo, que existan antecedentes de violencia no solo en el ámbito familiar, sino laboral o escolar del sujeto activo contra la víctima, las amenazas previas o que el cuerpo de la víctima sea exhibido en lugar público.
