El robo ocurrió a fuera de una clínica del IMSS en Guanajuato; los policías no se percataron del momento en el que se llevó a cabo el delito.
León, Guanajuato, 16 de febrero (ZonaFranca/SinEmbargo).- Lo que parecería un día normal, se volvió un suplicio y perder su medio de transporte para un paciente.
El día de ayer, jueves, “Javier” como pidió que se le nombrara, acudió a la clínica número 53 del IMSS a recibir atención médica cerca de las 08:00 de la mañana, lo hizo a bordo de una bicicleta, en la cual se transporta a diario.
Dejó aparcada la bicicleta color rojo en la zona designada por el propio IMSS cerca del pórtico de la unidad médica; para tratar de evitar un robo, le colocó una cadena diseñada para tal función y entró a recibir consulta médica.
Cerca del medio día, Javier salió de la clínica y al estar en el pórtico notó que su bicicleta ya no estaba, de inmediato solicitó ayuda de los guardias privados de seguridad que le ofrecen vigilancia al IMSS, pero estos no supieron nada.
A “Javier” le fue proporcionado un video de seguridad de escasos segundos, en el cual se observa que los ladrones operan en dúos, el primero ve la bicicleta y da aviso al segundo individuo quien portando una cizalla (pinza corta pernos) de gran tamaño, corta la cadena de la bicicleta, se retira del lugar y otro individuo llega por la bicicleta, todo en cuestión de segundos.
Para “Javier” será difícil encontrar su bicicleta y el IMSS no se hace responsable por robos ocurridos dentro de sus instalaciones, así le informó un vigilante privado, pero por desgracia él no ha sido el único afectado de esa manera.
En unidades médicas como la T47, la T56 y la T51 la historia se repite, algunas personas llegan a recibir atención médica a bordo de bicicletas y luego son robadas por personas ajenas a la institución.
