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México en Río: ¿Y qué esperaban en un país de obesos, sin programas para el deporte?

17/08/2016 - 9:00 pm

El 56 por ciento de la población mexicana de 18 años y más en área urbana es inactiva físicamente, revela una encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Los consultados lo atribuyen principalmente a la falta de tiempo y al cansancio después del trabajo. Sin embargo, este sedentarismo, de acuerdo con especialistas, también se debe a la calidad de las banquetas, ciclovías y espacios para ejercitarse, así como a la cantidad de horas que las personas pasan frente a las pantallas. El objetivo de la Conade es fomentar “la incorporación masiva” de la población a actividades físicas, recreativas y deportivas. Pero, dice en su Diagnóstico de Programa S269 de Cultura Física y Deporte, uno de los principales problemas para lograr un desarrollo óptimo del deporte en México es la carencia de personal preparado y calificado para el fomento, enseñanza y dirección. Además, es una actividad física y mental sumamente subvaluada.

Ciudad de México, 17 de agosto (SinEmbargo).– La falta de tiempo, el cansancio después del trabajo, la tecnología, la calidad o ausencia de infraestructura y áreas verdes, el diseño urbano y el acceso a la educación son los principales obstáculos entre un mexicano y el ejercicio o el deporte. La inactividad física, mezclada con bebidas azucaradas y “la vitamina T” (tacos, tortas y tamales), dan como resultado que México –un país donde algunos usuarios de redes sociales se burlaron de la gimnasta Alexa Moreno por su peso– sea la segunda nación con más problemas de obesidad y sobrepeso entre los miembros de la OCDE (plata, pues), y tenga la medalla de oro en América Latina.  Por ello millones de ciudadanos están enfermos de diabetes o hipertensión arterial o viven con ese riesgo.

En este escenario, es gigantesco el reto para hacer eficiente detección, selección y desarrollo de talentos deportivos para formar atletas profesionales que participen con éxito en competencias nacionales e internacionales como, por ejemplo, los Juegos Olímpicos Río 2016, donde a cuatro días de que se apague la antorcha, de todos los tricolores sólo uno ha conseguido una presea de bronce.

La última Encuesta de Salud y Nutrición (2012) mostró que al menos 60.6 millones de mexicanos padecen obesidad y sobrepeso, lo que equivale a 52 por ciento de la población del país. Esta condición provoca que 22.4 millones de adultos de 20 años o más padezcan hipertensión arterial y 6.4 millones de adultos mexicanos hayan recibido diagnóstico de diabetes por un médico y reciban tratamiento.

De acuerdo con la médico Luz María Guerra Cordero, de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASL), más del 70 por ciento de los mexicanos sufre sobrepeso y obesidad, y en la región del norte alcanza hasta el 73 por ciento.

Especialistas afirman que la principal causa de obesidad en el país es el tipo y cantidad de alimentación, y en segundo grado de importancia lo es la falta de actividad física.

“En México y a nivel internacional, la obesidad es multifactorial. Si lo pones en una balanza, la alimentación influye en un 70 por ciento y la actividad física en un 30 por ciento, por eso muchas de las acciones están centradas en promover una alimentación saludable y una mejor nutrición. Desde la Coalición Contrapeso se busca la disminución de bebidas azucaradas porque México es el principal consumidor de refrescos a nivel mundial y el 70 por ciento de los azúcares añadidos que consume el mexicano son aquellos que provocan sobrepeso, diabetes, enfermedades del corazón e incluso algunos tipos de cánceres”, aseguró a SinEmbargo el director de Contrapeso, Luis Encarnación.

Alejandro Calvillo, director de Poder al Consumidor, advirtió que si bien la actividad física da un beneficio en salud en todos los sentidos, al evitar enfermedades cardiovasculares o daños al riñón, pensada como un mecanismo para enfrentar la obesidad no funciona.

“El mensaje de que no importa lo que comas, pero si tienes una fuerte actividad física vas a quemar las calorías de más, es un discurso de la industria. No todas las calorías son iguales, vienen más concentradas en los alimentos procesados y bebidas azucaradas. Esas se convierten en grasa, e independientemente de la actividad física, incrementan la presencia de algunos indicadores de riesgo de enfermedades cardiovasculares”, dijo en entrevista.

El Sistema de Indicadores para monitorear los avances de la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes hecho por el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) expone que a nivel nacional, las mujeres tienen una mayor prevalencia de sobrepeso y obesidad que los hombres (73 por ciento contra 69 por ciento).

En promedio, 15 por ciento de los niños mexicanos sufren obesidad. Sin embargo, Baja California Sur, Campeche y Yucatán son los estados más afectados, con una tasa de 23 por ciento.

“Solo consumir una bebida azucarada al día aumenta el 60 por ciento la probabilidad de que un niño padezca sobrepeso y obesidad. Debido a este alto consumo, se estima que uno de cada dos niños en México tiene diabetes. Es una cifra alarmante debido a la problemática de la enfermedad”, expuso Encarnación del Colectivo Contrapeso.

Por el contrario, añade el informe de IMCO, Chiapas es el menos afectado con una tasa de 9 por ciento de niños obesos, “que en parte se explica por el rezago social que vive la entidad así como las altas tasas de desnutrición infantil”. La entidad sureña también registró las menores prevalencias de obesidad (16 por ciento de la población) y diabetes diagnosticada (4 por ciento de la población).

Ante ello, coincidieron los expertos consultados, es necesario incentivar medidas integrales para impulsar la actividad física entre la mayoría de la población que vayan de la mano de regulaciones para una mejor alimentación.

“El gobierno debe fortalecer mucho más la regulación a la publicidad y al etiquetado [etiquetas de advertencia]; basarse en evidencias científicas, recomendaciones internacionales y de la academia. En cuanto al presupuesto, se ve su falta de compromiso. El sector salud ha recibido recortes desde 2015”, declaró Encarnación. Además “necesitamos que la regulación que prohibe alimentos chatarra en las escuelas se cumpla. Otra medida es el acceso a bebederos de agua”, agregó Calvillo.

LA CONADE NO SÓLO ES UNA “AGENCIA DE VIAJES” 

Alfredo Castillo Cervantes aclaró hace unos días que la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), instancia a su cargo desde enero de este año, es una agencia de viajes que “lo único que hace” es dar el dinero a las federaciones, las cuales se encargan del alto rendimiento de los atletas. De acuerdo con el funcionario, la gente cree que esta comisión tiene que ver con las medallas en los Juegos Olímpicos, pero “no se da cuenta de que tiene que ver con muchas otras cosas”. En efecto, es una institución del gobierno encargada de implantar políticas que fomenten la incorporación masiva de la población a actividades físicas, recreativas y deportivas que fortalezcan su desarrollo social y humano, y que impulsen la integración de una cultura física sólida.

Pero no es la única instancia responsable de promover el derecho constitucional de todos los mexicanos a la cultura física y la práctica del deporte. La Ley de Estímulo y Fomento de Deporte establece que los estados y municipios también deben hacerlo.

Para la promoción de la cultura física y deporte, la Conade ha llevado a cabo tres principales programas: S204 Cultura Física, S205 Deporte y S206 Sistema Mexicano del Deporte de Alto Rendimiento.

SinEmbargo intentó contactar a Cecilia Dozal, subdirectora de Activación Física, para cuestionarle cómo, dónde y cuándo se fomenta la incorporación “masiva” de la población en actividades físicas y cuáles han sido los obstáculos. Pero durante todo el día no se concretó la llamada.

Uno de los objetivos de la Conade –según su página–, además de masificar el deporte entre los ciudadanos, es apoyar a los deportistas incluidos en el Programa Sistema Mexicano del Deporte de Alto Rendimiento, con la finalidad de contribuir a mejorar sus resultados deportivos en las disciplinas del ciclo olímpico y paralímpico.

También existe la estrategia “Muévete en 30” que recomienda realizar cuando menos 30 minutos al día alguna actividad física. La instancia no especifica cómo.

No obstante, “uno de los principales problemas para lograr un desarrollo óptimo del deporte en México es la carencia de personal preparado y calificado para el fomento, enseñanza y dirección del deporte”, acusa el diagnóstico del Programa S269 de Cultura Física y Deporte de la misma Conade.

Además, a pesar de que el deporte, junto con una dieta balanceada, mejora la salud y la condición física, y contribuye a la prevención de conductas antisociales como actos delictivos, “es una actividad física y mental sumamente subvaluada como parte importante en la formación educativa y por ello se le otorgan bajos presupuestos en las escuelas, en todos sus niveles, en especial en los países menos desarrollados”.

Los especialistas culpan también a la falta de actividad física de los ciudadanos al diseño urbano, la falta de áreas verdes y a la cantidad de horas que las personas pasan frente a las pantallas. Foto: Cuartoscuro
Los especialistas culpan también a la falta de actividad física de los ciudadanos al diseño urbano, la falta de áreas verdes y a la cantidad de horas que las personas pasan frente a las pantallas. Foto: Cuartoscuro

CAUSAS DE LA INACTIVIDAD FÍSICA

El Módulo de Práctica Deportiva y Ejercicio Físico (MOPRADEF) más reciente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revela que el 56 por ciento de la población mexicana de 18 años y más en área urbana es inactiva físicamente (58.2 por ciento mujeres y 41.8 por ciento hombres), principalmente por falta de tiempo y cansancio después del trabajo.

Para el dirigente de ContraPESO, la inactividad física no sólo se centra en el deporte o el ejercicio. Va desde irse caminando al trabajo o andar en bicicleta, “no necesariamente estar en un gimnasio”.

Luis Encarnación, especialista en obesidad, opina que los mexicanos no se activan físicamente porque en la vida urbana hay mucho estrés por el tráfico, hay inseguridad –antes los niños salían a jugar a la calle–, los espacios habitacionales son cada vez más reducidos, cada vez son menos las áreas verdes para hacer actividad física, y al estar frente a una pantalla (celular, televisión), la gente prefiere estar acostada que salir a caminar, correr, andar en bici o sacar a pasear al perro. También, añadió, influye el estado de los espacios e infraestructura para que la población en general haga deporte: las ciclovías, los parques, las calles…

El fundador de Poder al Consumidor, Alejandro Calvillo, también culpa al diseño urbano, la falta de áreas verdes y a la cantidad de horas que las personas pasan frente a las pantallas.

“El gobierno ha abandonado mucho el interés público. Las políticas que se han implementado son más para el interés privado. Se abandonan los espacios públicos, se abandonan los parques, se invierte más en vialidades que en transporte público, y eso ha deteriorado nuestros espacios urbanos”, afirmó.

El acceso a la educación, y con ello a materias en el tema, también contribuye a que un mexicano no se active. Las cifras del módulo determinan que a mayor nivel de instrucción, mayor porcentaje de actividad físico-deportiva. De la población que no concluyó la educación básica, solo el 34 por ciento es activa físicamente, mientras que el porcentaje es de 54.7 por ciento entre aquellos que estudiaron al menos un grado de educación superior.

Pero el nivel económico, según el módulo, no se relaciona tanto: el 46.5 por ciento de la población económicamente no activa hace ejercicio frente al 42.7 por ciento que es económicamente activa, pero no se ejercita.

Entre la población activa físicamente, el 67.7 por ciento acude a lugares públicos y el 30 por ciento a instalaciones de uso restringido.

De acuerdo con los encuestados, la mayoría de los mexicanos que hacen ejercicio es por salud (60.2 por ciento) y la mayoría de los inactivos lo atribuyen a la falta de tiempo (42.5 por ciento) o al cansancio después del trabajo (20 por ciento). Solo el 1.4 por ciento no se ejercita por falta de dinero y el 1 por ciento, por falta de instalaciones.

Para la Conade, contrario a las respuestas de los encuestados, la falta de infraestructura sí limita las acciones de masificación del deporte. El informe integral de desempeño de los programas federales del deporte 2013-2014, documenta que en 2013 se contaba con mil 200 espacios activos que daban servicio a más de 700 mil habitantes de manera mensual y alrededor de 4 mil 900 centros del deporte escolar y municipal que atendían a 12 millones de niños, jóvenes y adultos. Aún así, dice la instancia, no se alcanzaba a cubrir la demanda.

La tecnología de igual forma es parte. La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición detectó que niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad no realizan actividades físicas debido a que se ha convertido en un atractivo que deja de lado el ejercicio y la actividad recreativa ya que se concentran en los videojuegos, televisión e internet.

Dulce Olvera
Reportera de temas de crisis climática, derechos humanos y economía. Egresada de la FCPyS de la UNAM.
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