Bar Refaeli vuelve a estar en el ojo del huracán (y no le gustan las gordas)

17/09/2014 - 12:02 am
La hermosa modelo israelí y las gafas de la discordia. Foto: Facebook
La hermosa modelo israelí y las gafas de la discordia. Foto: Facebook

Ciudad de México, 17 de septiembre (SinEmbargo).- La modelo israelí Bar Rafaeli ha vuelto a estar en el ojo del huracán, merced a un muy desagradable y a todas luces políticamente incorrecto anuncio publicitario.

Se trata, recordarán de la otra novia del actor de Hollywood Leonardo DiCaprio y que exasperara al ejército de su país cuando fuera elegida en 2013 como imagen para promover el turismo en Israel, sin haber cumplido el servicio militar obligatorio.

Digamos que como patriota hizo más por cobrar el cheque de la campaña publicitaria que por ponerse el uniforme nacional y regalar algo de tiempo a la defensa de su territorio, un hecho por cual las Fuerzas Armadas enviaron una carta de protesta oficial a la Cancillería en la que subrayaron que utilizar a Rafaeli para promover a Israel, supone “enviar el mensaje equivocado”.

Es cierto que los militares israelíes y una de las máximas estrellas internacionales –exceptuando a la famosísima Natalie Portman, por supuesto- nunca tuvieron una relación armoniosa.

Tampoco la rubia espectacular que en 2010 visitara nuestro país para estar unas horas, cobrar una buena suma y sonreír frente a la prensa como imagen de las tiendas Liverpool, se entiende con los judíos ortodoxos.

Vale la recordar en este punto la polémica que generó en la navidad del 2012 con un anuncio de ropa interior en el que aparecía casi desnuda y un gorro de Santa Claus en la cabeza, lo que enfureció a los religiosos, que consideraron una herejía el hecho de que la modelo no portara algún símbolo de Janucá, en lugar de emplear símbolos cristianos internacionalmente conocidos.

EL ANUNCIO DE LA DESGRACIA

Sin embargo, todos esos episodios quedaron pequeños frente al escándalo que generó el anuncio de gafas donde vuelve a lucir esplendorosa y atacar a las mujeres que no tienen su silueta espectacular.

El anuncio, que se ha colgado en Youtube, muestra a un hombre apreciando las dotes de baile de Bar Refaeli alrededor de una barra de metro mientras expone toda su sensualidad, pero cuando el sujeto se pone las gafas descubre que la bella rubia de ojos azules es en realidad una mujer entrada en carnes.

En el anuncio Bar Refaeli aparece bailando en tubo, pero cuando el muchacho se pone las gafas, resulta que no era ella, sino una "gordita". Foto: Facebook
En el anuncio Bar Refaeli aparece bailando en tubo, pero cuando el muchacho se pone las gafas, resulta que no era ella, sino una “gordita”. Foto: Facebook

Las quejas no tardaron en llegar al Canal 2 de la televisión israelí, y mientras unos espectadores consideraban que el anuncio describía a la mujer como un “objeto sexual”, otros aludían al desprecio que mostraba hacia mujeres de siluetas más anchas.

Muchas mujeres israelíes se sintieron insultadas y por supuesto la decepción y el enojo trascendió las fronteras del país al darse la noticia en todo el mundo.

Sin embargo, nobleza obliga admitir que lo que Bar Refaeli, el modelo que la acompaña, la marca que la contrató, expresan no es sino un pensamiento generalizado en el mundo de la moda.

La ropa, los perfumes, las joyas, todo eso que mueve la sociedad de consumo contemporánea, están pensados para gente como la hermosa rubia israelí. Y ese es el discurso subliminal de la publicidad: si compras lo que Bar Refaeli te vende, es probable que comiences a verte como Bar Refaeli.

No deja de ser, eso sí, una tremenda torpeza discriminar a las mujeres con sobrepeso mientras se intenta vender un objeto para el que no se requiere tallas como son un par de lentes. Mientras tanto, las críticas no cesan.

“Es decepcionante e insultante que una mujer como Rafaeli, que puede influir en las actitudes del público, haga la deliberada elección de perpetuar las dañinas percepciones sobre las mujeres”, dijo Galia Wolloch, directora de la asociación sindical de mujeres Naamat.

En una de las cartas al defensor del espectador del Canal 2, un espectador exige retirar el anuncio porque describe a la mujer como “objeto sexual”, mientras que otro alude a la supuesta decepción del varón cuando Rafaeli se transforma en una mujer más peso.

“No todas tenemos la talla de Rafaeli, y no por eso somos peores”, dijo una espectadora.

En otras quejas y debates por radio, algunos comentaristas explicaron que el anuncio sugiere que una mujer entrada en kilos no puede ser bella.

El anuncio lo hizo la modelo para una firma local de gafas, Carolina Lemke, en la que tiene un número indeterminado de acciones y que en el pasado estuvo rodeada de polémica por desinformación al consumidor.

La modelo visitó recientemente la Gran Muralla China. Foto: Facebook
La modelo visitó recientemente la Gran Muralla China. Foto: Facebook

De nombre alemán, por su diseñadora, la demanda exigía una millonaria compensación porque la firma era en realidad israelí y las gafas estaban fabricadas en China.

El principal accionista debió explicar que la diseñadora, su propia mujer, era en realidad alemana y de ahí el nombre de la firma.

Mide 1,74, tiene profundos ojos azules y  supermodelos como la australiana Ellen Macpherson y la estadounidense Cindy Crafword son su inspiración. Ahora ha creado una nueva polémica.

Con información de efe

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
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