El Vaticano debe avalar la reparación de daño a víctimas de pederastia, exigen académicos

18/06/2015 - 12:01 am
El Vaticano anunció una medida para castigar a los sacerdotes responsables de pederastia. Foto: Cuartoscuro
El Vaticano anunció una medida para castigar a los sacerdotes responsables de pederastia. Foto: Cuartoscuro

Ciudad de México, 18 de junio (SinEmbargo).– La medida que hace unos días anunció El Vaticano para castigar a los sacerdotes responsables de pederastia no contempla la reparación de daño, a pesar de que el clero reconoce que hay un delito que debe ser sancionado, por lo que la medida queda incompleta señalaron expertos consultados por SinEmbargo.

“Lo bueno es que la institución católica reconoce que hay una actividad delictiva y que requiere ser sancionada, esto es positivo porque antes no se había hecho, reconocen que existe la pederastia, el abuso sexual, porque no sólo se da el abuso contra infantes, también contra mujeres”, aseguró Carlos Garma Navarro, profesor del Departamento de Antropología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Campus Iztapalapa.

El pasado 10 de junio, el Papa Francisco aprobó el procedimiento para juzgar a los obispos que cometieran delitos de abuso de poder, como las responsabilidades en los casos de pederastia.

De acuerdo con la medida anunciada, los casos serán competencia de una nueva sección de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

Las propuestas fueron autorizadas por el Pontífice después de ser presentadas por el presidente de la Comisión para la Tutela de los Menores, el cardenal Sean O’Malley, y examinadas y aprobadas en estos días por el “C9”, el grupo de cardenales que está ayudando al Papa en la reforma de la Curia.

Para Josué Tinoco Amador, profesor de Psicología Social e investigador del Departamento de Sociología de la UAM, Campus Iztapalapa, el anuncio que hizo El Vaticano es una medida polémica al interior de la institución por los años que lleva la Iglesia con una lógica de pensamiento de que son una autoridad moral por encima de todo.

“Es difícil decirles que pueden ser juzgados, eso es un rompimiento muy fuerte en la estructura de la religión católica que si no se trabaja bien lo pueden ver como un proceso de ataque y de sacrificio que está haciendo el Papa de su ministerio”, puntualizó.

El procedimiento para juzgar al clero católico se integra por cinco propuestas que marcan un procedimiento jurídico que hasta ahora no existía.

La primera es que en este tipo de delito será competencia de tres congregaciones, la de los Obispos, la de la Evangelización de los Pueblos y la de las Iglesias Orientales, que podrán recibir y examinar las denuncias que cualquiera presente contra los obispos por abuso de poder.

Será la Congregación para la Doctrina de la Fe la que se ocupará directamente de este delito en los obispos y se creará una nueva sección judicial en su interior dotada de personal fijo que trabajará ante el Tribunal Apostólico para estos casos.

Además, el Papa nombrará a un secretario para ayudar al Prefecto (Fiscal) respecto a estas nuevo procedimiento, el cual será el responsable de esta nueva sección judicial.

Aunque la Iglesia Católica parece tomar medidas para acabar con los casos de pederastia en todo el mundo, las acciones no son suficientes porque olvida un elemento importante, la parte más afectada en el abuso sexual cometido por los sacerdotes: las víctimas, coincidieron los expertos.

“La justicia implica también una reparación del daño a las víctimas, formar otra institución de la propia Iglesia para que castigue a los miembros del clero es positivo, pero esto no implica que la institución vaya a reparar a las víctimas, esa parte no está contemplada en el anuncio que hizo el Vaticano”, expuso el también especialista en el estudio de las religiones y las minorías religiosas en México, Carlos Garma.

El especialista dijo que la acción que realiza la Iglesia no resulta completa porque la institución considera que se debe de sancionar a los victimarios, pero no se repara el daño a las víctimas.

Los expertos coincidieron que para que realmente haya un avance en la sanción hacia los curas pederastas, el Papa tiene que reconocer también a las víctimas.

Desde que Francisco fue elegido como Papa, activistas y víctimas de pederastia en todo el mundo, le han enviado periódicamente cartas abiertas donde denuncian la relación que existe entre la Iglesia católica y las autoridades de los estados para que los casos de pederastia queden impunes.

En el caso de México, los afectados han acusado directamente al Cardenal Norberto Rivera Carrera, de encubrir a los curas pederastas como por ejemplo, en el caso de Marcial Maciel Degollado, ex sacerdote y fundador de la congregación los Legionarios de Cristo.

El pasado 17 de febrero, el ex cura Alberto Athié Gallo, dijo que el Papa no había hecho nada en México para castigar los casos de abuso sexual por parte de los sacerdotes ni de sus encubridores como Norberto Rivera.

Expresó que incluso el ex sacerdote Eduardo Córdova Bautista, acusado de pederastia en San Luis Potosí, estaba fuera de México, hecho que la Iglesia Católica negaba. En este caso culpó de omisión a Rivera.

También aseguró que el Cardenal usaba sus influencias y por eso la clase política y empresarial del país le tenían miedo.

En este sentido, los especialistas en religión creen que con el anuncio del Vaticano, Norberto no va a tratar de ir en contra de las disposiciones del Papa. “En el futuro no va a cometer los errores que ha venido haciendo, lamentablemente lo que ha sucedido [encubrimiento de pederastas] es difícil que se pueda cambiar porque en muchos casos estamos ante situaciones que ya han prescrito en la ley”, explicó el académico Garma Navarro .

“Desde 1992 con Carlos Salinas de Gortari hubo una estrecha relación entre México y la Iglesia católica, no sólo religiosa, también política, pienso que con el anuncio del Papa Francisco esta dinámica lo que hace es recuperar más el aspecto religioso y menos lo político, por eso veo poco posible que en el futuro Rivera encubra los casos de pederastas en el país”, expuso Tinoco Amador.

En la imagen un grupo de jóvenes se manifestaron afuera de la catedral metropolitana en contra de los casos de pederastia y el encubrimiento por parte del Cardenal Norberto Rivera. Foto: Cuartoscuro
Un grupo de jóvenes se manifestaron afuera de la catedral metropolitana en contra de los casos de pederastia y el encubrimiento por parte del Cardenal Norberto Rivera. Foto: Cuartoscuro

MEDIDA POSITIVA, PERO TARDÍA

Durante la comparecencia ante el Comité Especial de las Naciones Unidas para la Protección de los Niños, en 2014, el Vaticano reconoció más de cuatro mil casos denunciados de abuso sexual cometidos por sacerdotes, pero solamente 400 padres habían sido suspendidos. No obstante, se calcula que hay muchos más casos en todo el mundo que no se han dado a conocer.

De acuerdo con el libro, La Voluntad de no saber, cuyos autores son José Barba, Alberto Athié y Fernando M. González, los escándalos de pederastia clerical fueron escalando en todo el mundo y explotaron mediáticamente en 2010.

En Irlanda, Alemania, Bélgica, Australia, Brasil, Estados Unidos, y por supuesto México, se multiplicaron los testimonios de casos que han cimbrado la autoridad moral del Vaticano.

Para los especialistas, el Vaticano tardó muchos años en reconocer públicamente los casos de abuso sexual que cometían miembros del clero hacia los menores, opinan que el problema de la pederastia se pudo haber evitado antes de que creciera a niveles exorbitantes.

“Esta medida es positiva, pero tardía, allá por los 60’s cuando empezaba toda la polémica se realizó el Concilio Vaticano II, el cual pretendía acercarse a las necesidades sociales, ahí era el momento en que surgiera una dinámica como ésta, pero se atravesaron diversas cuestiones y no se logró avanzar en el tema”, detalló el especialista Josué Tinoco.

En papados anteriores, añade Tinoco, se había actuado en confabulación con los sacerdotes victimarios.

El procedimiento para juzgar los casos de pederastia dentro de la Iglesia católica es tomada con ciertas reservas por los expertos en religión.

“Yo creo que habrá que esperar, hay que vigilar que lo anunciado por el Papa se cumpla porque sino va a quedar sólo en lo dicho”, indicó Tinoco Amador.

“Hay que cuidar que la medida anunciada por el Vaticano no implique que los casos de pederastas no lleguen a la justicia civil, que no se quiera dar una situación de un fuero especial en las instituciones. Se trata de que estos delitos también puedan llegar ante la justicia civil, de lo contrario, crearemos instituciones que tienen su propios sistemas legales”, añadió el profesor de la UAM, Carlos Garma Navarro.

Eduardo Córdova Bautista. Foto del sacerdote proporcionada por una de las víctimas.
Eduardo Córdova Bautista. Foto del sacerdote proporcionada por una de las víctimas.

CASO CÓRDOVA BAUTISTA

El caso más reciente y sonado en México de pederastia clerical es el del sacerdote Eduardo Córdova Bautista, quien enfrenta una denuncia por los delitos de abuso sexual, violación, corrupción de menores y privación ilegal de la libertad en contra de 19 menores de edad.

Córdova Bautista, fue párroco del Templo de Nuestra Señora de la Anunciación y representante legal de la Arquidiócesis potosina.

El 10 de abril del año 2014 fue denunciado de manera pública como responsable de abuso sexual contra un grupo de personas que se dijo podría ser de más de 100 víctimas.

La primera acusación la dio a conocer Alberto Athié, en representación de un grupo de víctimas, Posteriormente, el 10 de abril de 2014, el arzobispo Carlos Romero Cabrero reconoció la existencia de un proceso canónico en contra de Eduardo Córdova 10 años atrás en la diócesis potosina, el cual habría derivado en una sentencia contra el entonces párroco y representante legal de la iglesia en San Luis Potosí.

Al día de hoy existen investigaciones abiertas en la Procuraduría General de Justicia del Estado de San Luis Potosí y en la Procuraduría General de la República (PGR),  incluso, hay una petición para que Eduardo Córdova sea buscado por la International Criminal Police Organization (Interpol, por sus siglas en inglés) en los 190 países miembros.

Sin embargo, nada de ello ha derivado en la localización y detención del implicado, contra quien El Vaticano hizo pública el 4 de junio del año pasado la sanción “ex oficio”, que le retiró el ministerio como sacerdote a Eduardo Córdova.

La condición de prófugo ha derivado incluso en denuncias penales en contra de la jerarquía católica por presunto encubrimiento, pues a decir de representes de las víctimas, como Luis Nava Calvillo entrevistado por el diario local Pulso, “no se entiende de otra forma que Eduardo Córdova se haya mantenido durante décadas abusando de menores de edad y luego tuviera la oportunidad de huir”.

Aunque existen diversas denuncias penales en contra de Córdova, el implicado sigue libre sin que hasta hoy se conozca su paradero.

Guadalupe Fuentes López
Periodista con más de una década en medios digitales. Edita y escribe sobre temas de economía, corrupción, política, derechos humanos
en Sinembargo al Aire

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