Ciudad de México, 19 de octubre (SinEmbargo).– La mayoría del Pleno del Consejo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), compuesta mayoritariamente por la corriente conocida como “Los Chuchos”, votó en contra de solicitarle licencia y reconocer culpabilidad política del Gobernador Ángel Aguirre Rivero en los hechos de Iguala, Guerrero, donde murieron 6 estudiantes normalistas y desaparecieron 43.

Carlos Navarrete Ruiz, presidente nacional de la fuerza política, dijo que de los 291 consejeros nacionales que asistieron a la plenaria, 272 votaron a favor de su resolutivo, que no incluye la necesidad de pedir licencia inmediata al Gobernador de Guerrero y tampoco el reconocimiento de su culpabilidad política, como lo propuso la Coalición de Izquierda y fundadores del partido como Pablo Gómez Álvarez.

Durante más de 20 días, en las calles de todo el país se han expresado llamados a que Aguirre renuncie. “Los Chuchos” decidieron ignorarlo.

“La mayoría del Consejo Nacional aprobó mi propuesta por mayoría, cuatro votos en contra y 15 abstenciones, algo de lo que fue adicionado a mi resolutivo señala que los sucesos en Tlatlaya y Estado de México, fueron ejecuciones extra judiciales y los actos del estado de Guerrero en Iguala, fueron desapariciones forzadas, ambas son responsabilidad del Estado Mexicano”, dijo en conferencia de prensa al finalizar la votación y discusión del resolutivo.

Fueron “Los Chuchos” o Nueva Izquierda los que defendieron a Ángel Aguirre, debido a que son ellos los que tienen la mayoría de consejeros nacionales y además fue confirmado por fuentes consultadas por SinEmbargo. Esta corriente rechazó una adición a la propuesta de Carlos Navarrete Ruiz, que exigía reconocer una responsabilidad política a Aguirre Rivero.

El Consejo se reunió a puerta cerrrada, en total hermetismo, sin acceso a la prensa ni invitados. Durante su intervención, Pablo Gómez dijo que si el PRD ya pidió perdón por los hechos, Aguirre debe reconocer su responsabilidad política.

“En términos de la Constitución, el Ejecutivo no tiene responsabilidad política, pero Aguirre sí la tiene”, dijo Gómez, quien fuer vitoreado por los asistentes cuando expuso su propuesta.

A través de la puerta cerrada, se escuchó como consejeros nacionales le pedían que se callara y que abandonara el estrado, porque se le había acabado el tiempo de exposición.

Por su parte Guadalupe Acosta Naranjo dijo que no porque algunos tuiteros o Joaquín López Dóriga lo pidan, Aguirre se tiene que ir.

Jesús Ortega, líder de Nueva Izquierda o “Los Chuchos”, propuso que el asunto de Iguala sea un crimen con responsabilidad exclusiva del Estado mexicano.

A pesar de que el Consejo Nacional se llevó a puerta cerrada, hubo consejeros nacionales adentro que permitieron escuchar lo que sucedía y las discusiones entre los perredistas a través de sus teléfonos celulares.

SinEmbargo cuestionó a Navarrete Ruiz el porqué de realizar la discusión sobre Iguala a puerta cerrada, sin acceso a la prensa y contestó que así lo decidió la Mesa Directiva, pues se trataba de un tema que requería silencio y no bullicio.

“La tradición era que todos los consejos del PRD estuvieran abiertos a la prensa y a militantes que querían escuchar, con frecuencia era un barrullo y un ruido y las conversaciones impedían estar atentos. El reglamento del PRD dice que cuando por la seriedad del tema se tenga que discutir a solas, se pueda hacer. La Mesa Directiva tomó la decisión de ejercer sus facultades reglamentarias, no porque quisiéramos ocultar algo, sino porque el PRD tiene todo el derecho de determinar los criterios de cuándo se abren las sesiones a la prensa y a invitados”, contestó.

Pero en el interior de salón donde se realizó la sesión plenaria había radios encendidos, tocando música a todo volumen, para impedir que los reporteros escucharan a través de las puertas, lo que se discutía adentro.

“¿Dado que el caso Iguala mantiene a todo el país a la expectativa en torno a la actuación del PRD, no merecía transparencia y que los mexicanos se enteraran de todas las posiciones que se discutieron?”, se le preguntó

Navarrete contestó: “El criterio de la mesa fue diferente”.

RECHAZO Y APOYO

La Coalición de Izquierdas integrada por los senadores Alejandro Encinas y Miguel Barbosa Huerta, propuso antes de que iniciara la sesión extraordinaria del Consejo del PRD y después en el pleno, que el Gobernador de Guerrero Ángel Aguirre Rivero pida licencia de inmediato.

“Nos pronunciamos por la separación inmediata del gobernador del estado [de Guerrero] de su responsabilidad, que solicite licencia y que con ello coadyuve no solamente hacer de esta decisión un factor de distensión social, sino que coadyuve a facilitar el desarrollo de las investigaciones y que estas investigaciones vayan a fondo de los niveles de responsabilidad del ámbito, local o federal”, declaró el Senador de la República Alejandro Encinas.

Encinas indicó que lo ocurrido en Iguala con el Alcalde prófugo José Luis Abarca, rompió la capacidad de interlocución del gobierno del estado no sólo con los estudiantes de Ayotzinapa, sino con toda la sociedad. 

Pidió además que se investigue a fondo la presencia y la penetración de José Luis Abarca en la estructura del partido. El Senador Miguel Barbosa exigió resultados inmediatos a las autoridades mexicanas en torno a los hechos de Iguala. 

”La investigación tiene que resolverse en días, no en semanas, el nivel de indignación que hay en la sociedad es enorme, la verdad que  salga,  sea cual sea, por más dolorosa, cruel, terrorífica, que sea lo que se tenga que hacer”, dijo.

En cuanto a la desaparición de poderes que se estará discutieron la semana próxima en el Senado de la República, el también Presidente de la Mesa Directiva, indicó que se revisará con rigor jurídico.

“No es la solución. No, por lo menos en el momento en que las  investigaciones están [desarrollándose] ahorita”, dijo por su parte el ex presidente nacional Jesús Zambrano, uno de los líderes de la corriente conocida como “Los Chuchos”.

“Los Chuchos” dominan, desde hace tiempo, el PRD. Después de la última elección interna se fortalecieron. “Si como resultado de todas las actividades de investigación se llega a la conclusión de que tuvo algún tipo de  responsabilidad, pues que se responda por ello”, agregó.

Esa es la posición, parece, de la izquierda dominante en el PRD.

Navarrete, presidente nacional, ha dicho en anteriores ocasiones que Aguirre debe evaluar su salida pero a la vez le ha brindado apoyo. Aguirre –como el ex Alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez,  principal sospechoso de la desaparición de 43 normalistas– también es de la corriente de “Los Chuchos”, por ahora.

Ayer, en su discurso, Navarrete dijo que “es momento de dar un golpe de timón para que el PRD siga siendo la esperanza de un futuro mejor, para que podamos responder a la confianza de la gente; estamos obligados a recuperar valores éticos de honestidad, congruencia y justicia, y no aceptar desviaciones y hacer como que no pasó nada”.

El perredista reconoció que al PRD “le estalló en las manos la realidad”. “Durante años el PRD adoptó la idea de que lo importante era ganar votos, más legisladores, más gobiernos estatales, municipales. Nos dejamos convencer de que lo importante era avanzar electoralmente y descuidamos la trayectoria de los candidatos y el desempeño de nuestros gobiernos”, dijo.

Navarrete propuso un resolutivo al Consejo Nacional para ser votado hoy que consta de cinco puntos:

1.- Impulsar una iniciativa nacional para construir una política de Estado integral, para dar respuesta a la crisis de inseguridad de México.

2.- Exigir al gobierno federal intensificar la búsqueda de los normalistas, dar a conocer resultados sobre lo ocurrido en Iguala y fincar responsabilidades.

3.- Ordenar al CEN del partido, que inicie una evaluación de todos los gobiernos, urgente de los municipales del PRD, en seguridad pública y cuerpos policiacos.

4.- Crear una Comisión de Ética y Transparencia, con sociedad civil.

5.- Elaborar mecanismos confiables para revisar la actuación de dirigentes partidarios nacionales, estatales y municipales, legisladores y funcionarios públicos. En este momento el Consejo sesionará en privado, sin la presencia de medios de comunicación.