Mérida, 20 Oct (Notimex).- Los conquistadores españoles lograron sobrevivir a los ataques de piratas gracias a la mano de obra maya que fue la que construyó ciudadelas, atalayas, trincheras e incluso amuralló ciudades completas como el caso de Campeche.
El académico de la Universidad de Missouri John F. Chuchiak IV refirió lo anterior en la ponencia “La importancia de los artesanos mayas y su mano de obra en la construcción de fortificaciones defensivas y la arquitectura colonial militar”.
Indicó que sin el trabajo de los indios mayas, muchas veces realizado sin paga, los españoles no habrían tenido el éxito militar que presumieron contra el ataque de los piratas.
“Los indios mayas eran obligados a trabajar por órdenes del gobernador en turno por dos reales a la semana, dinero que muchas veces no le pagaban pues sus patrones españoles les cobraban la comida que se supone debían proporcionarles de forma gratuita”, anotó.
Los trabajadores eran llevados a las obras por los denominados “tanderos” que eran los encargados de literalmente recolectar a los indígenas y distribuirlos en las obras donde los conquistadores solicitaban la mano de obra, mencionó.
Expuso que ese trabajo mal pagado o a veces ni siquiera pagado sirvió para consolidar grandes sistemas de vigilancia costera que también estaba bajo encargo y responsabilidad de los propios mayas que debían de vigilar y dar aviso de avistamientos de naves enemigas.
“Ellos construían las trincheras y además debían ser los primeros en ocuparlas y si era necesario, los primeros en encabezar las líneas de defensa”, añadió.
Sin embargo, quizá las pruebas más contundentes del gran aporte y poco reconocimiento de los conquistadores a la aportación de la etnia maya a la defensa contra los enemigos externos está en La Ciudadela y el Fuerte de San Benito en Mérida y las murallas y baluartes del puerto de Campeche, apuntó.
En esas obras fueron obligados a trabajar miles de indígenas en condiciones incluso ilegales para la época, expuso en su intervención en la Primera Mesa Redonda del Mayab “Arquitectura y Sociedad entre los Mayas”, en el Gran Museo del Mundo Maya de esta ciudad.
Según estudios de varios investigadores, la obra de La Ciudadela y el Fuerte de San Benito se hizo en sólo tres años (1669-1671), lapso en el que fallecieron unos siete mil 300 mayas por las “extenuantes jornadas, la mala alimentación y las pésimas condiciones de trabajo”.
En el caso de Campeche, amurallar la ciudad llevó más de 38 años y en este tiempo se gastó una cantidad que fue considerada inverosímil, pues fue superior a 380 mil pesos, refirió.
“De ese total, sólo tres mil pesos fueron para pagar el salario de los miles de trabajadores mayas que levantaron esa fortaleza militar y que a pesar de ese esfuerzo, los conquistadores nunca les dieron el crédito y menos pagaron lo justo por ese trabajo”, apuntó.
