ONGs exigen a Gabino Cué frenar la negligencia médica contra mujeres; el titular de Salud sigue intocable

21/02/2014 - 12:02 am
Oaxaca
Mujer da a luz fuera de las instalaciones del hospital de San Felipe Jalapa de Díaz. Foto: Captura de pantalla de video de Youtube

Ciudad de México, 20 de febrero (SinEmbargo).– Oaxaca suma hasta ahora seis casos de negligencia médica relacionados con la mala atención a mujeres embarazadas: cinco de ellas dieron a luz afuera de hospitales públicos, mientras que la última perdió a su bebé aún estando éste en su vientre tras la falta de atención por parte del personal.

De todos ellos, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) sólo ha emitido una recomendación para el gobierno de Oaxaca. De los seis casos registrados, la Defensoría de los Derechos Humanos de los Pueblos de Oaxaca (DDHPO) ha informado que realiza las investigaciones pertinentes de todos ellos.

Los seis han provocado la indignación de ciudadanos oaxaqueños y de al menos 50 organizaciones sociales que, desde 2013 a la fecha, exigen al Gobernador Gabino Cue Monteagudo la renuncia del titular de la Secretaría de Salud, Germán Tenorio Vasconcelos. Aunque los casos no se han aclarado debidamente por esa institución, Tenorio Vasconcelos conserva su puesto.

El obmbudsperson de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, Arturo de Jesús Peimbert Calvo, dio a conocer el 5 de febrero de este año que la Defensoría abrió cuatro expedientes de queja por la inadecuada atención médica en la asistencia de partos que se presentaron en las comunidades de Jalapa de Díaz, San Antonio de la Cal, San Jacinto Amilpas y Huajuapan de León.

El 10 de febrero, la DDHPO informó de la apertura de oficio de otro caso más: el de una mujer que dio a luz en un automóvil, luego de que le fuera negada la atención médica en un centro de salud en el municipio de Salina Cruz.

El caso más reciente de negligencia fue el de Silvia Francisco, quien perdió a su bebé por no haber sido atendida en un centro del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) , en el municipio de Matías Romero, en el Istmo de Tehuantepec, también fue retomado por el organismo estatal.

De acuerdo con la versión de Silvia Francisco y de su esposo Feliciano Domínguez, la pareja llegó al área de urgencias del hospital, donde luego de cinco horas un doctor les recomendó que visitaran a un médico particular, ya que en en ese nosocomio no tenían el equipo par realizarle un ultrasonido. La pareja acudió a otro lugar y el médico que la atendió le dijo que su bebé ya estaba muerto, por lo que volvieron al hospital del IMSS a reclamar por la negligencia de la que habían sido víctimas.

Sin embargo,  el IMSS respondió que no se trataba de una negligencia médica, ya que el  producto había fallecido,  y que todo se trató de “un mal entendido”, según informó Víctor Octavio Pérez, delegado de ese Instituto. El doctor Pérez explicó: “Se le hace el ultrasonido y ahí se ve la muerte fetal le decimos que el bebé ha fallecido. Pide otra opinión y la llevamos al médico de su conveniencia; le dice que el bebé está muerto, pero el problema se origina cuando su doctor le dice que si lo hubieran traído hace 10 minutos estaría vivo, cuando eso es falso, porque al hacerle la intervención se pudo confirmar que el producto estaba macerado; es decir,  tenía entre 24 y 48 horas muerto”, detalló.

En tanto, la Comisión Nacional de Derechos Humanos dio a conocer que desde 2013 ha atraído cuatro de las investigaciones. Sin embargo sólo ha emitido una recomendación al gobierno que encabeza Gabino Cué Monteagudo: el de Irma López Aurelio, indígena mazateca que dio a luz en el patio del Centro de Salud Rural de San Felipe Jalapa de Díaz, en octubre de 2013.

El caso de Irma López fue el primero que alcanzó dimensión nacional y conmocionó a la sociedad por un video que giró en las redes sociales. Ahí se veía a Irma dando a luz un varón en el jardín del nosocomio de esa comunidad, sin recibir ningún tipo de atención médica ni medidas sanitarias.

Ante dicha negligencia, Raúl Plascencia Villanueva, ombudsman de la CNDH, inició una queja de oficio para investigar presuntas violaciones a derechos humanos contra la mujer indígena mazateca y posteriormente emitió una recomendación para que le fueran respetados su derechos humanos.

Hasta el 4 de febrero pasado, es decir cuatro meses después de lo ocurrido, se dio a conocer que el gobierno de Oaxaca, a través de los Servicios de Salud, aceptaba la recomendación 1/2014 emitida por la CNDH.

Al respecto, Germán Tenorio Vasconcelos, secretario de Salud en la entidad, giró ese mismo día instrucciones para que, de manera inmediata, las áreas competentes de la institución realizaran la reparación del daño y se siguieran las instrucciones emitidas por la CNDH, también dio a conocer la pronta rehabilitación de 50 salas de labor de parto y 50 unidades médicas en las seis jurisdicciones sanitarias de la entidad.

Sin embargo, el video que se volvió viral en redes sociales y generó múltiples críticas obligaron al Secretario de Salud a retomar los hechos. El funcionario se mantuvo firme y dijo que no se había tratado de una negligencia médica, pues el hospital contaba con personal suficiente y “hubo una serie de situaciones que habían complicado”, según declaró a algunos medios.

El 18 de enero, el Sindicato Independiente de Trabajadores y Profesionales en Salud, (SITYPS) protestaron con pancartas frente a las oficinas centrales de la Secretaría de Salud de Oaxaca para pedir la renuncia del Secretario de Salud. Los manifestantes colocaron en el suelo muñecos de juguete como simulación de los niños nacidos en pésimas condiciones en diversos hospitales del estado. Sin embargo, sus peticiones no fueron escuchadas.

Luego, la mañana del lunes 27 de enero, otra mujer dio a luz fuera de las instalaciones del Hospital General Pilar Sánchez Villavicencio en el municipio de Huajuapan de León.

El bebé de Nancy Salgado López, de 21 años, nació sobre la banqueta y luego de que a su madre le negaran atención en dicho nosocomio. La escena también fue captada en un video y se volvió viral. Tras el hecho, el director del hospital y el médico que había recibido a la paciente fueron cesados, según se leyó en la cuenta de Twitter de la Secretaría de Salud de Oaxaca.

Tras este hecho, la sociedad y activistas de Oaxaca han exigido al Gobernador Gabino Cué la renuncia de su Secretario de Salud. El 28 de enero, cerca de 50 organizaciones sociales del estado y del país pidieron la salida de Tenorio Vasconcelos.

Mediante una carta las organizaciones recordaron que, en octubre de 2013, “la Red Global Avaaz” ya había entregado un documento con 50 mil 500 firmas para pedir la renuncia del secretario por el caso de la mujer que parió en el pasto del centro de salud de Jalapa de Díaz.

“Nada se hizo, la petición fue ignorada”, puntualizan, y con esto consideran que el gobierno de Oaxaca pretende esconder la violencia obstétrica que se sufre a diario en los hospitales y clínicas de salud, y que ha sido evidente con estos casos en los municipios de San Felipe Jalapa de Díaz, San Antonio de la Cal, San Jacinto Amilpas y recientemente en Huajuapan de León.”, según datos del diario La Jornada.

Por su parte, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) dijo que la Secretaría de Salud se hizo acreedora de una multa de 552 mil pesos por los casos de mujeres que dieron a luz afuera de los Centros de Salud de Jalapa de Díaz y San Antonio de la Cal. Al respecto Tenorio Vasconcelos dijo que solicitaría la condonación de la multa con la condición de que se corregirían los detalles a los que se faltó, de acuerdo con información de medios locales.

Trabajadores del sector salud exigen la renuncia del Secretario de Salud frente a las oficinas de la Secretaria. Foto: tomada de twitter de @ImparcialOaxaca
Trabajadores del sector salud exigen la renuncia del Secretario de Salud frente a las oficinas de la Secretaria. Foto: tomada de twitter de @ImparcialOaxaca

VIOLENCIA OBSTÉTRICA

Todos los hechos registrados de 2013 a la fecha, por lo menos en Oaxaca, han sido de violencia obstétrica porque  se ha puesto en peligro la salud de la madres y sus hijos que no fueron atendidos con las medidas clínicas adecuadas, afirmó Karina Falcón, directora del Colectivo de Investigación y Educación para una maternidad Empoderada y Respetada (CIEMER).

“La violencia obstétrica se da por muchos factores y por ende también hay muchas maneras en que el personal médico puede estar cayendo en violencia obstétrica, un tipo de esta violencia es la omisión; es decir, cuando no se atienden los partos de manera oportuna y adecuada”, expuso.

Falcón explicó que uno de los principales problemas por los que ocurre la negligencia médica se da por que a las mujeres se les ve como enfermas, por lo que se les medica y se les trata como un paciente más, cuestión que afecta de manera significativa en la omisión de atención en los casos y es así como los médicos las mandan a sus casa. Además, los protocolos que se manejan en el parto son obsoletos o incluso que carecen de una explicación científica.

Al respecto, la especialista comentó que los casos en que no se atiende a las mujeres cuando están a punto de dar a luz, también son de violencia obstétrica, ya que las mujeres tienen derecho de ser atendidas de forma adecuada desde su embarazo hasta días después de haber parido.

De acuerdo con el Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Prestación de Servicios de Atención médica se establece primero que en adición al Artículo 4 Constitucional, en cuyo párrafo tercero se plantea: “Toda persona tiene derecho a la protección a la salud. La Ley definirá las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud y establecerá la concurrencia de la federación y las entidades federativas en materia de salubridad general, conforme a lo que dispone la Fracción XVI del Artículo 73 de la Constitución”.

El 28 de mayo del 2009, el ex Presidente Felipe Calderón Hinojosa lanzó una estrategia nacional para disminuir la mortalidad materna. En ella quedó establecida la atención universal gratuita a las mujeres embarazadas en las instituciones federales de salud.

La Atención Universal del parto, según dijo el ex mandatario, “quiere decir que todas las mujeres, aún las que no cuenten con seguridad social, recibirán la atención que necesitan durante el embarazo, el alumbramiento y el periodo de recuperación después del parto”.

Sin embargo Oaxaca, se ha limitado a omitir el acuerdo establecido entre la Secretaría de Salud, el IMSS y el ISSSTE.

Además, también existe la “Norma Oficial Mexicana NOM-007-SSA2-1993 Atención de la mujer durante el embarazo, parto y puerperio y del recién nacido. Criterios y procedimientos para la prestación del servicio, NOM que protege los derechos de las mujeres en caso de omisión u otra violación a sus derechos”.

Karina Falcón agregó que la violencia obstétrica puede ejercerse por omisión, o desde la práctica médica por vejaciones y humillaciones que sufren las mujeres, desde el ser tratadas como enfermas hasta ser ofendidas durante la labor de parto con frases como: “Hace nueve meses no gritabas, bien que lo estabas disfrutando”, “¡Abre las piernas!” o la episiotomía innecesaria, que es un corte entre la vagina y el ano durante el parto, e incluso gastos que son innecesarios, explicó la directora el CIEMER.

Desde octubre a la fecha se han registrado seis casos de negligencias médicas durante los alumbramientos de mujeres que fueron ignoradas por los servicios de salud del gobierno de Gabino Cué, a quien se le exige la renuncia del responsable del sector salud del estado.

En el último caso registrado, el del hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social en el Istmo de Tehuantepec, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) dio a conocer que ya atrajo la investigación,

Cerca de las diez de la mañana del jueves 13 de febrero, Silvia Francisco se presentó en el área de urgencias de la clínica del IMSS del municipio Matías Romero, porque presentaba molestias en el vientre, esperaba a una niña.

Esa mañana una enfermera joven, cuyo gafete decía “en trámite”, le pidió que esperara. Sin embargo, esa espera se prolongó… Momentos más tarde, Silvia y su esposo llamaron a la puerta de donde supuestamente un médico le atendería, pero una enfermera salió para decirles que “había casos más delicados”. La puerta volvió a cerrarse.

Luego de cinco horas de espera, un doctor de esa instancia médica dijo a la familia que acudieran a un médico particular para que éste realizara un ultrasonido, ya que el hospital no contaba con el equipo para poder hacerlo.

A las tres la tarde los esposos se dirigieron a una clínica privada. Silvia se realizó el ultrasonido, su hijo llevaba 15 minutos muerto.

“Muy molestos y llorando, regresamos al IMSS con los resultados. Ingresaron a Silvia al área de hospitalización para intervenirla, pero ya era demasiado tarde: mi primera hija había muerto por culpa de la mala atención de las enfermeras y los doctores”, contó Domínguez.

Por su parte, el IMSS dijo que el bebé ya estaba muerto cuando la madre se presentó en el hospital, por lo que descartó que se tratara de una negligencia médica.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos informó que se realizarán las investigaciones pertinentes. Hasta el momento sólo ha emitido una recomendación al gobierno de Gabino Cué, quien tras protestas por los seis casos de negligencia médica aún no anuncia el cese del Secretario de Salud de ese estado.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video