La lluvia, imparable, despide la Feria Internacional del Libro en el Zócalo

21/10/2014 - 12:03 am
El Centro Histórico pasado por agua durante el fin de semana. Foto: Especial
El Centro Histórico pasado por agua durante el fin de semana. Foto: Especial

Ciudad de México, 21 de octubre (SinEmbargo).- Fue uno de esos fines de semana pasados por agua, inexplicablemente, en el Distrito Federal.

“¡Ya no es temporada de lluvias!”, se escuchó decir a una señora que miraba orondamente al Cielo, como reprendiendo a Diosito, quien de todos modos no se sintió regañado y mandó un diluvio que puso a prueba paraguas y capas de plástico, aunque no hubo calzado que aguantara la implacable hostilidad de los improvisados charcos en las aceras capitalinas.

Por ahí va Paco Ignacio Taibo, con su infaltable cigarro en la boca, corriendo para que la lluvia no haga un trapo su pantalón de mezclilla y de paso tratando –sin lograrlo- de pasar inadvertido entre la gente que tanto lo quiere y lo busca en la Feria Internacional del Libro en el Zócalo, que concluyó este domingo.

3 mil libros para los normalistas de Atzoyinapa. Foto: FIL Zócalo
3 mil libros para los normalistas de Atzoyinapa. Foto: FIL Zócalo

El autor de la biografía del Che junto a un centenar de libros que tanto honran la pervivencia de la novela negra como la historia de México con sus bandidos, canallas y héroes, fue un protagonista de referencia en el encuentro literario inaugurado el viernes 9 de octubre y que premió, entre otros, al mexicano Álvaro Enrigue, ganador del Iberoamericano de Novela Elena Poniatowsa por su aclamada Muerte súbita.

Fueron 10 días de un incesante trajinar por la también llamada Plancha del Zócalo, donde en un ejercicio de sana y fructífera convivencia compartieron aire y espacio las poderosas editoriales comerciales con las modestas firmas independientes, que encuentran en esta Feria un trato de preferencia.

Taibo II, su esposa, la promotora de la lectura Paloma Saiz y la hija de ambos, la fotógrafa Marina Taibo, fueron las cabezas de un equipo que gestionó el Foro José Revueltas, hacia el que confluyeron autores, periodistas y público –mucho público todos los días- a debatir, presentar libros, conversar, reír y emocionarse en nombre de la Brigada para Leer en Libertad.

Paco Ignacio Taibo, incansable el domingo de Feria. Foto: FIL ZÓCALO
Paco Ignacio Taibo, incansable el domingo de Feria. Foto: FIL ZÓCALO

El Café Literario Octavio Paz, el Foro José Emilio Pacheco, la Camioneta La Chula (con el poeta Antonio Calera Grobet y su Mantarraya Ediciones como comandantes) fueron otros de los escenarios donde escritores muy reconocidos como Élmer Mendoza y Rafael Pérez Gay animaron presentaciones de sus respectivos libros y participaron en encendidos debates sobre el futuro de la literatura mexicana o el estado actual de nuestro país.

También hubo sitio para las nuevas generaciones de poetas. De Gerardo Grande con su “Canto de mi árbol en el incendio” hasta la tijuanense Sidharta Ochoa con su inclasificable pero potente texto titulado Historia de las feminazis en América.

La novela histórica y la novela negra: el italiano Valerio Manfredi, el argentino Juan Sasturain.

Los migrantes y la voz de quienes no los olvidan: Padre Alejandro Solalinde, Sanjuana Martínez, Diego Enrique Osorno.

Álvaro Enrique recibe el Premio Elena Poniatowska. Foto: FIL Zócalo
Álvaro Enrique recibe el Premio Elena Poniatowska. Foto: FIL Zócalo

LA LUCHA Y ELENA PONIATOWSKA

El escritor Fabrizio Mejía fue el encargado del  homenaje a su colega y amiga Elena Poniatowska, Premio Cervantes 2014, entre otros muy merecidos galardones cosechados a lo largo de una carrera periodística y literaria que dio frutos como La noche de Tlatelolco, Tínisima y el reciente Leonora, dedicado a la pintora Leonora Carrington.

“Más que hablar de mi trayectoria, me gustaría que habláramos de nuestro dolor por los 43 muchachos Ayotzinapa o del otro horror de la matanza en Tlatlaya o de todas estas infamias a las que estamos sometidos todos los días, ante las cuales quizá deberíamos formar ya comités de lucha”, dijo Poniatowska.

Elena Poniatowska en la FIL, convocada por la Brigada para Leer en Libertad. Foto: FIL Zócalo
Elena Poniatowska en la FIL, convocada por la Brigada para Leer en Libertad. Foto: FIL Zócalo

Al término de la charla, los integrantes de esa Brigada, la cual es encabezada por el escritor Paco Ignacio Taibo II y su esposa Paloma Sáiz, hicieron entrega de una lona en la que decenas de lectores escribieron mensajes a Poniatowska.

Se cerraba así un ciclo de jornadas intensas donde el amor al libro y a las letras se desplegó con anchura y alegría mediante 750 actividades artísticas y culturales, desarrolladas en los 7 mil 920 metros cuadrados del Zócalo de la Ciudad de México, que albergó a 292 expositores y la oferta de más de 450 sellos editoriales.

México lee. Foto: FIL ZÓCALO
México lee. Foto: FIL ZÓCALO

En el marco de la Feria se recordó a escritores fallecidos este año: José Emilio Pacheco, García Márquez, Juan Gelman, Emmanuel Carballo; a los escritores centenarios Paz, Huerta y Revueltas, Nicanor Parra, Adolfo Bioy Casares, Julio Cortázar y Marguerite Duras.

Con las letras brasileñas como invitadas de honor, también hubo espacio para recordar a los 43 estudiantes desaparecidos en Guerrero, con una entrega simbólica de libros donados a lo largo de los 10 días que duró la Feria Internacional del Libro.

“Nosotros esperamos que nuestros 43 hijos lean cada uno de estos libros”, fueron los deseos de José Félix Rosas, representante de los padres de familia de los estudiantes desaparecidos de la Normal Rural de Ayotzinapa,  en un acto donde el Secretario de Cultura capitalino, Eduardo Vázquez Martín, informó que fueron 3 mil los libros para los normalistas.

Los ciudadanos asistentes a la Feria donaron 1,076 libros, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) 1,800 y la Brigada para Leer en Libertad más de 500.

“Necesitamos escuelas dignas, que se desarrollen en libertad, necesitamos a los estudiantes como están en este país: conscientes, activos, trabajando por su ciudad y por su país. Y necesitamos a una  sociedad que cuide a los jóvenes, no sólo porque son el futuro —como se dice retóricamente— sino porque son quienes hoy están poniendo el punto en la i o el dedo en la llaga; están diciendo: no hay paz en este país mientras no haya justicia”, fueron las palabras del escritor Álvaro Enrigue recordadas este domingo en el cierre de la FIL Zócalo.

Y nunca dejó de llover.

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
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