Roma, 21 Oct (Notimex).- La prefectura de Roma exigió hoy al alcalde, Ignazio Marino, a anular la inscripción en el Registro Civil de los matrimonios contraidos en el extranjero de 16 parejas homosexuales.
El prefecto (o responsable de los servicios de seguridad), Giuseppe Pecoraro, llamó a Marino, del centroizquierdista Partido Democrático (PD), a respetar la ley en virtud de que en Italia no son reconocidas aún oficialmente las uniones entre personas del mismo sexo.
El sábado pasado el alcalde de Roma encabezó una solemne ceremonia en el Campidoglio, sede del ayuntamiento, en la que inscribió en el Registro Civil los matrimonios contraidos en el extranjero de 16 parejas de gays y lesbianas.
Pero el ministro del Interior, Angelino Alfano, del conservador partido Nueva Centro Derecha (NCD), que apoya al gobierno del primer ministro Matteo Renzi (del PD), declaró que el registro hecho por el ayuntamiento de Roma carece de validez oficial.
La firma de Marino, aseguró Alfano, tiene la misma validez que la de un autógrafo.
En cumplimiento de la normativa vigente, la prefectura “invitó” formalmente este martes al alcalde a cancelar el registro de las uniones homosexuales, aunque aparentemente Marino no tiene ninguna intención de hacerlo.
Según la alcaldía, en el pedido subyace “una potencial discriminación”, pues las uniones en cuestión fueron contraidas legalmente en países donde son reconocidas y sin poder ser canceladas con base únicamente en el sexo de los contrayentes.
Por su parte, el abogado de una de las parejas -que se casó en Nueva York antes de registrarse en Roma- anunció una impugnación a la solicitud de la prefectura.
“Técnicamente no se puede proceder con la cancelación porque es una actividad que corresponde a un juez y no a una autoridad administrativa”, declaró el abogado Antonio Rotelli.
El caso ha abierto una polémica en momentos en que el propio primer ministro ha anunciado su intención de aprobar lo más pronto posible una ley “a la alemana” que autorice uniones entre personas del mismo sexo y permita la adopción de los hijos naturales de al menos uno de los miembros de la pareja.
