Author image

Alejandro Calvillo

22/05/2018 - 12:02 am

A las niñas: más alcohol y a menor edad

En el tercer debate uno de los temas será salud, veremos si alguno de los candidatos se desmarca de los intereses de las grandes corporaciones del tabaco, el alcohol y la comida chatarra para hablar de un compromiso con la salud pública y la prevención. ¿Sabrán acaso que el 77% de las muertes en nuestro […]

El creciente consumo de alcohol entre los menores es una tendencia en nuestro país, el consumo de alcohol entre las niñas ha aumentado como en ningún otro sector de la población. Foto: Cuartoscuro

En el tercer debate uno de los temas será salud, veremos si alguno de los candidatos se desmarca de los intereses de las grandes corporaciones del tabaco, el alcohol y la comida chatarra para hablar de un compromiso con la salud pública y la prevención. ¿Sabrán acaso que el 77% de las muertes en nuestro país están causadas por enfermedades no transmisibles y que la mala alimentación, el tabaco y el alcohol son sus principales causas?. ¿Conocerán las políticas exitosas desarrolladas en otras naciones, en otras ciudades, contra estos males? O, de plano ya están cooptados por las grandes corporaciones y sus asociaciones que han tenido cooptados funcionarios y legisladores México se ha convertido en el paraíso del capitalismo salvaje, en el que el Estado deja el campo libre a los grandes intereses económicos sin importar sus prácticas y los daños que generan al medio ambiente y a la salud. En más de treinta años de neoliberalismo extremo, el Estado ha desaparecido en muy diversos aspectos del qué hacer nacional para entregar la política, las normas y las regulaciones a grandes corporaciones. Pocas realidades muestran las consecuencias de estas prácticas en las que los derechos quedan aplastados por el lucro, como lo es la realidad que enfrentan niños y niñas ante un Estado que podemos llamar omiso, pero tal vez más certeramente, un Estado cómplice.

Un ejemplo son las tendencias en el consumo de alcohol de las niñas y los niños. En la Encuesta Nacional de Adicciones se registró que en 2010 el 4.3% de los niños y niñas de 12 a 17 años declararon haber tenido un consumo excesivo de alcohol el mes previo. Seis años después, en el 2016 estos casos se duplicaron a 8.3%. Considerando que estas cifras tienden a estar sub-representadas, podemos decir que alrededor de uno de cada diez menores de 12 a 17 años declaró tener un consumo excesivo de alcohol el mes previo y que estos eventos se duplicaron en solamente 6 años.

La encuesta reporta que el consumo consuetudinario en niñas pasó de 0.4% en 2010 a 3.9% en 2016, es decir, en seis años aumentó cerca de 10 veces. Las tendencias sirven para activar las alarmas y actuar, pero en materia de salud pública en nuestro país, con los gobiernos actuales, no ha sido así. Frente a las tendencias no se ha hecho nada y lo que ha seguido son las catástrofes.

El mejor ejemplo de las advertencias preventivas sobre catástrofes en salud pública ha sido, sin duda, la epidemia de obesidad y diabetes. Hace treinta años el doctor Adolfo Chávez advertía que el cambio en la dieta provocaría lo que hoy vemos. En 2010 con Felipe Calderón surgió el Acuerdo Nacional por la Salud Alimentaria y en 2013 con Peña Nieto la Estrategia Nacional para Prevenir y Controlar el Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes, los nombres se alargan y nada ocurre, se crea una Gran Simulación de política que se deja en manos de la propia industria a regular. El resultado: se proyecta que uno de cada dos niños mexicanos desarrolle diabetes a lo largo de su vida, de continuar las condiciones actuales. Adolfo Chávez advertía que el consumo de los productos que se anunciaban en la televisión estaban causando ese deterioro. El consumo de esos productos se ha multiplicado, sin regularse su publicidad, sin detenerse su presencia en las escuelas, sin establecerse etiquetados claros y útiles en estos productos.

Existen excelentes ejemplos sobre la prevención y el compromiso de gobiernos, funcionarios y legisladores por la salud pública. Los jóvenes en Islandia presentaban uno de los mayores consumos de alcohol, comparados con los europeos. Islandia respondió con políticas de prevención y regulaciones. Un sicólogo islandés, Gudberg Jonsson, explica que antes no podías circular el viernes por la noche, por la inseguridad que provocaba la gran cantidad de jóvenes emborrachándose en los parques y espacios públicos. Actualmente, Islandia tiene una de las juventudes más sanas. ¿Cómo lo lograron?, campañas contra el consumo de alcohol mostrando los riesgos, control de la publicidad de alcohol para no ligarla a la juventud, impuestos más altos a este producto, prohibición de su venta a menores de 20 años, prohibición de mostrar el alcohol en los supermercados. Las regulaciones fueron acompañadas de un programa intenso de actividades extraesolares con talleres de música, actividades deportivas, baile y danza, arte, etcétera. Y no solamente cayó el consumo de alcohol, también el de tabaco y drogas.

En México no tenemos campañas contra el consumo de alcohol que muestren que el 6.5% de las muertes prematuras están causadas por su consumo, su vínculo con accidentes viales, con embarazos no deseados, con violencia y descomposición familiar. El reporte de las Unidades de Especialidades Médicas y Centros de Atención Primaria en Adicciones señalan que la mayor demanda de servicios es de adolescentes entre 12 y 17 años, representan el 48.2% de los casos atendidos, de personas que recibieron algún tipo de tratamiento.

Como en el caso de la epidemia de obesidad y diabetes, la política se le deja a los regulados. Si para elaborar la política contra la obesidad y la diabetes se le dejó el diseño de las regulaciones a la propia industria de la comida chatarra y las bebidas azucaradas; en el caso de la política de prevención frente al consumo de alcohol, la autoridad se somete a los designios de esta industria. Si antes las vinaterías en los barrios eran escasas, ahora con los supermercados y, en especial, con los Oxxos, el alcohol la disponibilidad del alcohol se multiplica. Y no se diga, la disponibilidad y, sobretodo, exposición de venta de tabaco que ocupa las paredes detrás de las cajas de estas tiendas de conveniencia.

Francis Zaballa explica que las campañas de prevención al consumo de alcohol se le dejan a la propia industria que tiene la entrada a escuelas. Estas empresas, en vez de realizar campañas contra el consumo de alcohol entre los menores les hablan del consumo responsable, una manera de promover el consumo y su marca. El alcohol en México rodea a los jóvenes, es anunciado en el deporte, las marcas de cerveza en los uniformes de los deportistas, en los estadios se sirve junto con refrescos y en muchas ocasiones sin existir la oferta de agua embotellada, los estadios están llenos de su publicidad, los conciertos de música tienen como principales patrocinadores a estas empresas, etcétera. Alta disponibilidad física y en precio, falta de regulación de la publicidad enfocada en los jóvenes, ausencia de campañas de advertencia.

El creciente consumo de alcohol entre los menores es una tendencia en nuestro país, el consumo de alcohol entre las niñas ha aumentado como en ningún otro sector de la población. Muchos factores tóxicos afectan la vida diaria de los niños y jóvenes de nuestro país, empezando con la comida chatarra y los hábitos de alimentación que ha provocado ya que el 14% de los adultos sufra diabetes; siguiendo con el tabaquismo que provoca que uno de cada dos fumadores muera por una enfermedad relacionada con el fumar, y el consumo creciente entre los niños y, especialmente, entre las niñas, de alcohol que provoca un deterioro de la salud, las relaciones sociales y el ambiente familiar.

Las políticas de salud pública dirigidas a la prevención de estos males están ya diseñadas, implementadas y evaluadas en varias naciones. Se sabe bien lo que hay que hacer y que en México no se ha hecho o se ha hecho de manera mínima o tergiversada. ¿Alguno de los candidatos estará dispuesto a enfrentar estos condicionantes de la enfermedad que comprometen el futuro de la salud de la población y los recursos financieros de la nación? En especial, ¿quién estará dispuesto a enfrentar a los poderes de estas grandes corporaciones que hasta el momento han contado con el respaldo de todo el gremio empresarial dominante?

Alejandro Calvillo
Sociólogo con estudios en filosofía (Universidad de Barcelona) y en medio ambiente y desarrollo sustentable (El Colegio de México). Director de El Poder del Consumidor. Formó parte del grupo fundador de Greenpeace México donde laboró en total 12 años, cinco como director ejecutivo, trabajando temas de contaminación atmosférica y cambio climático. Es miembro de la Comisión de Obesidad de la revista The Lancet. Forma parte del consejo editorial de World Obesity organo de la World Publich Health Nutrition Association. Reconocido por la organización internacional Ashoka como emprendedor social. Ha sido invitado a colaborar con la Organización Panamericana de la Salud dentro del grupo de expertos para la regulación de la publicidad de alimentos y bebidas dirigida a la infancia. Ha participado como ponente en conferencias organizadas por los ministerios de salud de Puerto Rico, El Salvador, Ecuador, Chile, así como por el Congreso de Perú. el foro Internacional EAT, la Obesity Society, entre otros.

Los contenidos, expresiones u opiniones vertidos en este espacio son responsabilidad única de los autores, por lo que SinEmbargo.mx no se hace responsable de los mismos.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video