Ciudad de México, 22 de septiembre (SinEmbargo).– Un grupo de internautas musulmanes lanzaron en las redes sociales una campaña contra el Estado Islámico (EI) bajo el hashtag #NotInMyName (no en mi nombre), el cual pretende demostrar que el grupo yihadista no representa a los musulmanes del mundo.
A través de la organización Active Change Foundation, con sede en Londres, los jóvenes musulmanes publicaron un video en el que explicaron los objetivos de la campaña que fue lanzada el día de la conmemoración de las víctimas del 11-S.
Una de las jóvenes participantes en el video expresa “Todos tenemos que unirnos para parar este movimiento, para que no dañe al islam y a los musulmanes”.
El Estado Islámico “no es en absoluto islámico“, dice un joven.
Usuarios de Twitter e Instagram aparecen en el video posan con un cartel en el que está escrito el hashtag #NotInMyName, invitando de esta manera a los demás musulmanes a unirse a la campaña, la cual ha tenido una amplia convocatoria en las redes sociales.
En días recientes, el grupo radical islamista ha difundido tres videos en donde aparecen ciudadanos estadounidenses y un británico ejecutados a manos de este grupo islámico.
El primero fue la del fotoperiodista estadounidense James Foley, el segundo fue el periodista también estadounidense Steven Sotloff y la tercera decapitación fue la del ciudadano británico David Haines.
De igual forma se dio a conocer imágenes de una mujer de origen británico, supuestamete yihadista,quien publicó en Twitter una foto en la que, vestida con indumentaria islámica y una bata blanca de médico, se le observa sosteniendo una cabeza decapitada rodeada de niños.
Diversos países se han pronunciado en contra de los actos terroristas que el Estado Islámico realiza. El gobierno de México, por conducto de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), emitió un pronunciamiento en donde repudia las ejecuciones de dos ciudadanos estadounidenses y uno británico, perpetradas por el grupo extremista y expresó su solidaridad y condolencias con los pueblos y gobierno de Estados Unidos y del Reino Unido así como con los familiares de las víctimas de estos atroces crímenes.
