México, 22 Nov (Notimex).- Emocionada hasta las lágrimas, Olivia Revueltas asistió este sábado a la inauguración de la exposición “José Revueltas: Palabra de tierra y agua” en el Archivo General de la Nación (AGN), edificio donde el escritor fue encarcelado cuando el inmueble albergaba la Penitenciaría de la ciudad.
La hija del escritor y activista político celebró la apertura de la exposición que forma parte de las actividades conmemorativas del centenario del nacimiento de su padre, que escribió una de sus obras más celebradas, “El apando”, en prisión; estuvo en la Correccional, en la Cárcel de Lecumberri y en las Islas Marías.
“Estoy profundamente agradecida por este homenaje tan merecido a mi padre. Ver estos muros que resguardaron su libertad, transformados en el centro de la memoria de nuestra patria, me emociona, tanto como haber estado apenas en las Islas Marías y ver que la falta a los Derechos Humanos en la época que mi padre estuvo ahí, hoy es cosa del pasado”.
Explicó que en el trayecto hacia el islote, pensó, y más que eso, experimentó la angustia que debió haber sentido su padre.
“Imaginaba la experiencia de mi padre, entonces un jovencito de 18 años que de julio a noviembre de 1932 estuvo confinado. Lo que debió haber pensado, lo que se preguntaba entonces, cuánto tiempo iría a estar en ese sitio”.
La hija de Revueltas enjugó las lágrimas para reiterar que al ver que se ha devuelto la dignidad al preso en las Islas Marías, no puede menos que pensar que eso merece todo su agradecimiento.
A su vez, Ricardo Cayuela, titular de la Dirección General de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), destacó que el Estado Mexicano, sus instituciones políticas y culturales “le rinden hoy un homenaje a quien fuera su máximo disidente”.
Destacó que Revueltas luchó contra un Estado Mexicano “no democrático, donde había muchas carencias para las libertades humanas y hoy, en una democracia plena, donde todas las opiniones se respetan, es muy emocionante que Revueltas se reintegre a la familia cultural y política de nuestro país”.
Resaltó que su obra y legado están vivos, ajenos a las instituciones y a cualquier homenaje “porque viven en la lectura de los jóvenes que lo siguen todos los días, en sus novelas y en los guiones de sus películas, debido al impacto brutal de una literatura hecha por uno de los grandes narradores de México en toda su historia”.
La muestra se logró gracias al trabajo coordinado del Conaculta a través del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y su Coordinación Nacional de Literatura (CNL), del Sistema Nacional de Fototecas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y de la Dirección General de Publicaciones del INBA.
Incluye imágenes y documentos de la vida pública y privada del autor, de su obra, encarcelamientos, y participación en la Época de Oro del cine mexicano.
Son aproximadamente 100 fotografías en las que se pueden ver diversas etapas en la vida de José Revueltas. Algunas imágenes son de la familia Revueltas Sánchez en su natal Durango aproximadamente en 1920. Se ve a sus hermanos Silvestre tocando el violín, a la actriz Rosaura Revueltas en plena actuación y a Fermín, el artista pintor de la familia.
También cuenta con imágenes del matrimonio del autor de “Dios en la tierra” con Olivia Peralta y de su hija Andrea, así como de su estancia en las Islas Marías y en el Palacio de Lecumberri, con fotografías que detallan la huelga de hambre que sostuvo en 1970.
Algunos de sus amigos también aparecen en estas fotografías, como Pablo Neruda, con quien se le ve en 1943, junto a Andrés Henestrosa y Efraín Huerta, además de las imágenes del sepelio del escritor en el Panteón Francés, en 1976, entre otros aspectos.
Hay carteles de películas en las que el escritor participó como guionista, entre las que se encuentran “La diosa arrodillada”, “En la palma de tu mano” y “El apando”.
La exposición “José Revueltas: Palabra de tierra y agua”, permanecerá abierta hasta el 12 de abril de 2015.
