Ciudad de México, 24 de mayo (SinEmbargo).-El Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados quiere que la Reforma Financiera enviada por el Presidente Enrique Peña Nieto, mediante el Pacto por México, sea discutida y aprobada antes del 31 de agosto, es decir, antes de que empiece el nuevo periodo de sesiones ordinarias.

El problema, es que al interior de la comisión dictaminadora, la de Hacienda, creen poco probable que puedan procesar las más de dos mil cuartillas que conforman las 13 iniciativas, que reforman 34 leyes que pretenden regular la actividad bancaria y fomentarán el crédito.

Esto, sin contar, que el proceso de dictaminación podría “contaminarse” o por lo menos empantanarse con los conflictos políticos que deriven del proceso electoral, rumbo a los comicios que se celebrarán el 7 de julio.

Pero el PRI no pierde la esperanza de que el proceso pueda concluirse antes de septiembre, a fin de convocar a un periodo extraordinario, donde se aprobaría esta reforma. La urgencia para el partido en el gobierno radicaría en evitar que se empalme con las discusiones de las reformas Hacendaria y Energética.

“Se puede celebrar tantos periodos extraordinarios como sean necesarios para avanzar en las reformas que México necesita para recuperar la senda del crecimiento con empleo, y con el empleo los ingresos en las familias y con los ingresos en las familias en combinación con todo lo demás, abatir la inseguridad y la desigualdad”, aseveró el líder de los diputados priistas, Manlio Fabio Beltrones.

Sin falso optimismo, el presidente de la Comisión de Hacienda, el panista José Isabel Trejo, se pronunció por no dictaminar al vapor una reforma tan importante, tras la reunión del órgano legislativo con el subsecretario de Hacienda; Fernando Aportela.

Incluso, el Diputado panista consideró necesario realizar foros y consultas con especialistas del ramo.

“Yo creo que podemos hacer un buen trabajo; sin embargo, hay que convocar, es indispensable el método que establecimos, especialistas, académicos, usuarios, funcionarios, los propios diputados para que la reforma sí tenga el mejor retoque posible, que realmente fortalezca el sistema financiero mexicano”, recalcó José Isabel Trejo.

El legislador anunció que la Comisión de Hacienda no dictaminará todo el paquete de una sola vez. Por el contrario, informó harán un “barrido” para “decantar” las iniciativas que presenten menor dificultad y posteriormente sacar las propuestas con mayores complicaciones, tras consultar los temas con usuarios de la banca, banqueros, funcionarios de Hacienda y académicos.

“No estamos obligados a dictaminarlas las 13 de un solo golpe, podemos dictaminar dos o tres conforme vayamos encontrando acuerdos, porque finalmente no queremos tampoco ir reciclando discusiones y queremos que la discusión sea lo más clara posible”, afirmó el presidente de la Comisión de Hacienda.

Pero el PRI tiene prisa. Su líder en San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones urgió a construir los consensos necesarios en la Comisión de Hacienda, a fin de sacar adelante un dictamen, que se pondría sobre la mesa de discusión del periodo extraordinario.

“En cuanto tengamos dictámenes –sin importar si hay elecciones antes o después–, yo invitaría a que construyéramos el periodo extraordinario que México necesita para seguir haciendo las reformas que México necesita y que son inevitables para volver a crecer económicamente”, afirmó el priista.

En su prisa, Beltrones incluso minimizó el hecho de que la reforma financiera constará de 13 dictámenes y no de uno, como tradicionalmente sucede con las iniciativas de reforma que pueden analizarse dentro del extraordinario.

“Nosotros invitaremos a las comisiones a que asistan todos aquellos funcionarios que sean necesarios, para que expliquen las dos mil cuartillas y, si pueden ser tres mil, que expliquen las tres mil cuartillas. Confío en que quiénes estén llevando a cabo este análisis, no sean de lento aprendizaje y que salgan pronto de sus dudas”, revirtió a Trejo, el líder priista.

REFORMAN FINANCIERA 

La Reforma atiende los compromisos 62 y 63 del Pacto por México, que pretenden mejorar la eficacia del sistema financiero y consta de 13 apartados:

Fortalecimiento a la Condusef, Corresponsales de Ahorro y Crédito Popular, Uniones de Crédito, Banca de desarrollo, Otorgamiento y ejecución de garantías, Concursos mercantiles, Almacenes y SOFOMES, Liquidación bancaria, Fondos de inversión, Mercado de valores, Sanciones e inversión extranjera, Agrupaciones financieras y Crédito garantizado.

Según el Gobierno Federal, las 13 iniciativas pueden resumirse en cuatro apartados principales.

Una Banca de Desarrollo que propicie el crecimiento del sector financiero y maximice los beneficios de los préstamos que realice y fomente el crédito privado.

Fomentar la competencia entre las instituciones para abaratar las tasas de interés. Fortalecer a la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de las Instituciones Financieras (Condusef) para que sus determinaciones sean obligatorias para las instituciones crediticias.

Con la Reforma se pretende que sea mucho más fácil cambiar de banco, establecer que los usuarios cumplidos puedan acceder a más alternativas de financiamiento, prohíbe a las instituciones las ventas atadas o condicionadas y contempla la posibilidad de crear un buró crediticio universal, que incluya a los bancos con peor desempeño.

Generar incentivos adicionales para que la banca preste más. Se simplifican los regímenes para el otorgamiento y la ejecución de garantías crediticias y crea un Buró de Entidades Financieras, para que los usuarios puedan conocer información relevante de ellas.

Fortalecer al sistema bancario para que el sector crezca de forma sostenida. Para ello, se propone evaluar periódicamente a bancos para que presten más y facilitar el proceso de quiebra bancaria, protegiendo los recursos de los ahorradores.

CRÍTICAS A LA REFORMA FINANCIERA 

Recientemente, senadores del Partido de la Revolución Democrática señalaron tres fallas fundamentales de la Reforma Financiera: Falta de competencia entre bancos, la concentración de préstamos en bonos gubernamentales y que se olvida de los usuarios.

“Han querido vender con bombo y platillo que esto va a detonar masivamente el crédito y que va a disminuir las tasas de interés. Podría ocurrir, pero me parece que comprarlo en esa lógica, sería hacer que la gente, que los usuarios del sistema financiero, cayeran en una enorme mentira”, aseguró el Senador Armando Ríos Piter, el pasado 14 de mayo en las instalaciones del Senado de la República.

Los legisladores de izquierda plantearon 10 propuestas que incluirán en su propia propuesta de reforma financiera al margen de la iniciativa del pacto por México que según sus propias palabras, buscan revertir la tendencia actual en que los bancos concentran sus ganancias en las tarifas y las comisiones que cobran.

Su decálogo contempla, entre otros puntos, garantizar la competencia bancaria, beneficiar directamente a los usuarios de instituciones bancarias, moderar la salida de capitales a las matrices bancarias en el extranjero y fomentar el préstamo a partir de la banca de desarrollo.

A estas y otras críticas que giran en torno a la presunta criminalización y endurecimiento de sanciones a los usuarios morosos dentro de la Reforma Financiera, el líder de los diputados priistas, Manlio Fabio Beltrones, respondió que la iniciativa puede discutirse y mejorarse.

“He leído muchas de estas preocupaciones que podemos compartir con quienes las emiten. No obstante debemos partir de una lógica específica: para que exista más crédito y más barato, debe haber mejores garantías, pero esto es de extrema lógica. Nadie podría prestar más y más barato, si no tiene suficientes garantías que va a recuperar el dinero que está prestando”, expuso el líder parlamentario.