La ciencia del ovoide en la NFL: ¿puede un balón desinflado dar ventaja a un equipo?

25/01/2015 - 12:00 am
Once de 12 balones que se usaron en la final de la AFC no tenían la presión reglamentaria. ¿Cuenta esto como ventaja? Foto: Shutterstock
Once de 12 balones que se usaron en la final de la AFC no tenían la presión reglamentaria. ¿Cuenta esto como ventaja? Foto: Shutterstock

Ciudad de México, 26 de enero (SinEmbargo).– El Súper Tazón, uno de los eventos deportivos más esperados de cada año se acerca a su edición 49. Sin embargo, faltando apenas unos cuantos días para que se defina el campeón de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), la controversia rodea al deporte de las tacleadas. No obstante, en esta ocasión los culpables de este revuelo no son los jugadores (al menos no hasta ahora), sino los balones. Once de ellos.

A estas alturas, es prácticamente imposible que no se sepa de la polémica originada en la final de la Conferencia Americana de la NFL, en donde los Patriots de Nueva Inglaterra se impusieron contra los Colts de Indianapolis y en donde las acusaciones señalan a los “Pats” de valerse de los balones ovoidales para poder llegar al Super Bowl XLIX.

Pero, ¿por que habría de ser considerada como trampa un ovoide desinflado? O, dicho de otra manera, ¿que ventaja proporciona un balón de futbol americano desinflado?

En primer lugar, es en contra de la política de la NFL cuyo reglamento estipula que los jugadores podrán jugar con pelotas (sólo de la marca Wilson) que son proporcionados por el equipo local y que se inflan a entre 12.5 y 13.5 libras (de 5.6 a 6.1 kilogramos) sobre pulgada cuadrada.

Sin embargo, la verdadera razón por la que los balones menos inflados resultan ser objeto de controversia es debido a la ventaja que le dan a los jugadores. Así, una pelota desinflada podría haber ayudado a los jugadores durante el juego bajo la lluvia por el simple hecho de que es más fácil de agarrar, atraparla y lanzarla, una bendición clara en un deporte que gira alrededor del pase del balón, publicó National Public Radio (NPR).

La polémica llegó al encuentro entre Colts y "Pats" debido a los balones desinflados con los que se jugó. Foto: EFE
La polémica llegó al encuentro entre Colts y “Pats” debido a los balones desinflados con los que se jugó. Foto: EFE

Por otro lado, las bolas desinfladas también podrían presentar una desventaja real, de acuerdo con el físico John Eric Goff, quien explica que los balones con baja presión tienen “menos masa”, y con esto quiere decir que “la pelota puede desacelerar más rápido cuando la lanzas”.

Pero, ¿por qué los árbitros no se percataron de que los balones fueron desinflados durante el juego? Esta peculiaridad trajo algunas justificaciones al respecto, por lo que no fueron pocos los que especularon que las bajas temperaturas provocaron una pérdida lenta de la presión –el mismo principio de compresión que puede causar neumáticos pierdan presión durante el invierno- lo que pudo contar como diferencia.

Los escándalos tienden a destapar casos similares. Esta es una tendencia clara, sobre todo en el deporte y, dado que el balón juega un papel fundamental para el desarrollo de este deporte, todo aquel sospechoso de acciones similares (sin importar cuando ocurrieron) será puesto bajo el escrutinio de autoridades deportivas y los mismos aficionados.

Apenas unos días luego de que se diera a conocer el ahora conocido como “DeflateGate”, quien rompió el silencio fue Brad Johnson, ex quarterback de los Bucaneros de Tampa Bay, quien reconoció que a principios de 2003 pagó 7 mil 500 dólares para que un grupo de personas rasparan los balones que se usaron en el Super Bowl XXXVII, para que estos tuvieran mejor agarre.

Finalmente, en el escándalo que actualmente está en curso, ya sea que los ovoides fueran desinflados por las buenas o debido a una cuestión circunstancial, una cosa está clara: de acuerdo con la investigación interna de la NFL, 11 de los 12 balones utilizados en el juego de campeonato del domingo presentaban baja presión.

¿Las razones? Más allá de buscar la victoria, estas siguen siendo una incógnita, y lo seguro es que la liga pondrá más atención al respecto, pero sobre todo, lo cierto es que el Súper Tazón será un hervidero de rumores y especulaciones.

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