Roma, 25 may (dpa) – La victoria del “sí” en el referéndum irlandés sobre el matrimonio homosexual también repercute en el debate sobre cuestiones político-sociales en el Vaticano. A puerta cerrada se inauguró hoy una reunión del consejo del Sínodo Episcopal para preparar el sínodo familiar del próximo mes de octubre.
Durante el sínodo, obispos llegados de todas las partes del mundo discutirán temas espinosos como el trato a los homosexuales y a las parejas divorciadas en el seno de la Iglesia católica. A los debates a puerta cerrada asistirá esta semana también el papa Francisco, informó Radio Vaticano.
Muchos creyentes, sobre todo en Europa, esperan de Francisco una apertura de la Iglesia en cuestiones familiares. De todas formas, el trato a los homosexuales por parte de la Iglesia católica ya se ha convertido durante el pontificado de Francisco en tema de discusión. “Si alguien busca al Señor y tiene buena voluntad, quién soy yo para juzgarlo”, dijo el papa argentino en julio de 2013.
Para este lunes también estaba programado en la Universidad Pontificia Gregoriana en Roma un encuentro de teólogos con el presidente de la Conferencia Episcopal de Alemania, el cardenal Reinhard Marx. También en esta reunión se abordarán temas como la homosexualidad y el trato a los divorciados en la Iglesia.
El papa había reiterado el domingo de Pentecostés que la Iglesia no excluye a nadie: “La Iglesia nace universal, una y católica, con una identidad más abierta, que abraza el mundo entero, sin excluir a ninguno. ¡A ninguno la madre Iglesia le cierra la puerta en la cara, a ninguno! Ni siquiera al pecador”.
