Ciudad de México, 25 jul (dpa) – Las tareas de remodelación del Autódromo Hermanos Rodríguez, sede del Gran Premio de Fórmula 1 a partir de 2015, comenzaron en la capital mexicana con el derribo de las viejas tribunas a golpe de martillo.
Una treintena de trabajadores de la construcción empezaron esta semana a desmentalar los asientos de la tribuna localizada arriba de la zona de pits, la primera en ser demolida en el circuito automovilístico localizado en la zona oriente de Ciudad de México.
El edificio será demolido la próxima semana. La torre de control ya fue desalajoda para su derribo.
El autódromo será remodelado para recibir la licencia Grado 1 de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), con nueva zona de pits, paddock y torre de control, así como el cambio de trazado de la mayoría de las curvas. La empresa pública Corporación Turística de México (CIE) confirmó el miércoles el regreso de la Fórmula 1 a México de 2015 a 2019.
A pesar de las obras de remodelación, la pista sigue abierta para corredores y ciclistas que todas las mañanas usan el circuito para ejercitarse.
México volverá a acoger en 2015 un Gran Premio de Fórmula 1 después de una larga espera de 23 años con una inversión total de 360 millones de dólares.
Según estimaciones oficiales, el regreso de la Fórmula 1 a México generará beneficios económicos por 2.000 millones de dólares y se crearán cerca de 18.000 empleos. La última vez que la clase reina del motor estuvo en México fue en 1992, con una carrera ganada en el circuito Hermanos Rodríguez de Ciudad de México por el británico Nigel Mansell.
La nueva carrera será la tercera época del Gran Premio de México. La primera se realizó de 1963 a 1970 y la segunda, de 1986 a 1992.
