El mítico actor llegó a “dejar de respirar” y fue reanimado dos veces, tuvo que ser trasladado en helicóptero al hospital.
Por M. Méndez
Ciudad de México, 25 de agosto, (ASMéxico/SinEmbargo).- La fama de “tipo duro” de Chuck Norris acaba de recibir una nueva y afortunada justificación. Y es que este viernes se ha conocido que el actor de 77 años logró sobrevivir a dos infartos al corazón consecutivos que sufrió en apenas una hora.
Los hechos, desvelados por el medio Radar Online, sucedieron el pasado 16 de julio, cuando Chuck Norris junto a su familia regresa a su casa en California desde Las Vegas, donde había participado en el Campeonato Mundial de la Federación de las Artes de Lucha Unidas, que él mismo fundó.
Al parecer, el famoso actor empezó a encontrarse mal durante ese trayecto. La expedición de toda la familia se detuvo en Nevada, donde hicieron noche y donde Chuck Norris sufrió el primer infarto.
Se cayó mientras se duchaba
El actor se estaba dando una ducha en ese hotel de Nevada cuando su corazón se paró, por lo que cayó al suelo y tuvo que ser rápidamente atendido por asistencias sanitarias.
De camino al hospital, en la ambulancia, el citado medio afirma que Chuck Norris llegó a “dejar de respirar”, pero los sanitarios lograron reanimarle en un primer momento.
SEGUNDA PARADA, TRAS SER REANIMADO
El problema fue que después de ese primer trance peligroso, el actor recayó y volvió a tener un infarto que le provocó otra parada cardíaca.
Los sanitarios volvieron a trabajar en él y, por segunda vez, consiguieron reanimarle. Su estado era tan grave que decidieron trasladarle en helicóptero a un hospital mayor y con más medios como el de Reno.
Pese a todo, recibió el alta poco después.
Cabría pensar que después de dos infartos con sus respectivas reanimaciones, puede sufrirse algún tipo de daño o al menos necesitar una larga recuperación. Pero no si eres Chuck Norris.
Al parecer, ya que los hechos se han conocido mucho después de que sucedieran, el karateka y actor recibió el alta hospitalaria pocos días después, y prosiguió su recuperación en su casa. Ya puede volver a bromear con sus propios “memes”, como él mismo hace.
