Ciudad de México, 25 de noviembre (SinEmbargo).– El Pacto por México, que prometía ser la manzana de la discordia entre las dos fuerzas más importantes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en el Congreso Nacional que se realizó este fin de semana en Oaxtepec, Moreros, resultó ser la concordia y la unión entre bejaranistas y “chuchos”.

No hubo “gritos y sombrerazos” entre ambos bandos, tampoco debates encendidos, ni una defensa encarnizada por salirse del Pacto que prometían desde que inició este año a cada paso, los líderes de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN).

La impresión del Congreso Nacional que se comentaba en los pasillos del Centro Vacacional y de Convenciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), entre los delegados que votaron los resolutivos que se planteron, fue que todo estaba “planchado”.

Mientras los congresistas bebían Coca-Cola, tomaban el sol cerca de la alberca o se tiraban sobre el césped la mañana del viernes y casi todo el día del sábado, sus líderes: Jesús Ortega Martínez, Jesús Zambrano Grijalva, presidente nacional del PRD y miembro de Nueva Izquierda (NI), René Bejarano Martínez y María de los Dolores Padierna Luna, de la corriente IDN, se mantenían encerrados en distintos salones de los hoteles aledaños al Centro Vacacional.

En el hotel El Dorado, sesionaron los “Bejaranos” y en un área cerrada del Centro Vacacional del IMSS, los “Chuchos”.

Ahí se encerraron el viernes durante la mañana, para iniciar con las cuatro mesas de debate: Línea Política, Estatutos, Programa y Principios, hasta las dos de la tarde y votar con 90 por ciento de los delegados a las diez de la noche, su permanencia dentro del Pacto por México.

Ese mismo día, el viernes, la mesa de Línea Política la encabezó la corriente de René Bejarano.

Alejandro Sánchez Camacho, secretario general del partido, presidió esa mesa. Ellos, los de IDN, leyeron el resolutivo que condicionó la permanencia del PRD en el Pacto por México, mientras el Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN) no intentaran modificar los artículos 27 y 28 de la Carta Magna para permitir la participación de capitales privados dentro del negocio energético del país, que hoy pertenece al Estado.

René Bejarano llegó justo a votar a favor de la permanencia dentro de un Pacto que, cuando Jesús Zambrano decidió entrar en diciembre del año pasado, condenó severamente. “Zambrano fue por su cuenta”, “Zambrano no consultó al resto de los líderes”, “Zambrano encendió la mecha”, había dicho.

Pero a pesar de que Nueva Izquierda  (NI) o la “tribu” de los “Chuchos” fue la corriente que siempre se empeñó en mantenerse dentro del Pacto y defendió su participación acaloradamente; el viernes, fueron los “Bejaranos” los que promovieron la votación a favor.

Un resolutivo que, de acuerdo con René Bejarano, no implica que IDN esté de acuerdo en permanecer en el Pacto.

“Nosotros la seguimos exigiendo, y por eso estamos plantendo ese resolutivo. Así dice, tiene que quedar muy claro lo que dice el resolutivo, se retirará”, dijo Bejarano.

Bejarano dijo incluso que estaban seguros que el PAN y el PRI no abanadonarían su propuesta de privatizar a Petróleos Mexicanos (Pemex).

“Precisamente por eso, por eso lo firmamos. IDN no participará en ninguna estancia, creemos que fue un gran error los que se metieron y particiaron y que el PRI y el PAN van a seguir acordando medidas contrarias al interés de la mayoría del país”, dijo.

Entonces, Bejarano explicó que los Congresos son intercambios de puntos de vista, se dialoga y se llega acuerdos.

Dentro del paquete de los acuerdos que pasaron rapidamente en las votaciones de las mesas estuvo la reelección del presidente nacional del partido y el método de elección, donde la propuesta de la encuesta abierta a a la población que propuso el ex Jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard Casaubón, ni siquiera se llevó a la mesa para su discusión.

EBRARD Y SEGUIDORES: RELEGADO POR LAS MAYORÍAS

Durante la Plenaria que se realizó ayer domingo a partir de las 11:00 hasta las 17:00; Jesús Zambrano y Carlos Navarrete, candidato a la presidencia del PRD respaldado por los “Chuchos” se sentaron justo frente a la mesa del Pleno.

En el ala izquierda de la explanada estaba René Bejarano, Padierna y otros líderes de IDN.

Y atrás, en el ala derecha, en medio de un pequeño grupo de delegadas del Estado de México se sentaron los senadores Mario Delgado, Alejandro Encinas, además de Marcelo Ebrard Casaubón.

Desde ese lugar, se escuchaban los gritos en contra de las resoluciones que la mayoría de los delegados decidieron aprobar rápidamente y de corrido, desde que se discutieron en las mesas del viernes y sábado.

Cuando se llegó al punto de los disensos en el tema de estatutos, fueron las mujeres simpatizantes de Ebrard quienes hacían bulla, gritaban y votaban en contra.

Pero eran unas cuantas, no lo suficiente para ser un contrapeso dentro del Pleno y detener la aplanadora de los “Chuchos”  y los “Bejaranos”.

Una de esas mujeres, Nonina Pedraza Moreno, secretaria de Derechos Humanos del Comité Estatal del PRD en el Estado de México, dijo el jueves en la noche, antes de que diera inicio el Congreso,  que varios de los 200 participantes de esa entidad, fueron cambiados de última hora por la organización del evento.

Se dijeron simpatizantes con la corriente de Marcelo Ebrard y denunciaron que no les permitían registrarse.

“Tenemos cuatro compañeros que aparecen como congresistas en las primeras listas y ahorita aparecen otros congresistas en lugar de ellos. No aparecen por habernos cambiado con el licenciado Marcelo [Ebrard Casaubón], dicen que no trae fuerza, cómo va a traer fuerza si obviamente cuando estamos con él nos borran de las listas. A mi no me pudieron borrar porque soy dirigente del estado, pero a todos los compañeros que hicieron un cambio a favor de Marcelo, los borran. Nos están haciendo chapuza”, dijo la perredista.

Pedraza Moreno indicó que Roberta Ibarra Armendáriz y José Silvestre Lezama, son dos de los participantes que tuvieron problemas para registrarse al Congreso.

“Nos quitan a los congresistas y ponen a otros compañeros y te dicen ‘si te regresas conmigo te lo doy’, entonces así, ¿cómo el Congreso será serio?, es de mentiras, quieren ganar con una mayoría que no existe, que es comprada”, dijo.

Ebrard consideró que entre los logros que tuvo Movimiento Progresista dentro de los cambios de los estatutos, fue la contención de la propuesta de Nueva Izquierda de que se eliminara totalmente la elección libre, secreta y abierta del presidente nacional.

Un logro a medias, reconoció, pues el Congreso ni siquiera permitió la discusión de su propuesta de un método de elección a través de una encuesta a toda la población.

Ayer en la madrugada, el PRD aprobó con 463 votos que la elección a la Presidencia y la Secretaría General del Comité Ejecutivo Nacional se decidirá a través del Consejo con el 60 por ciento de los votos. Es decir el Consejo podrá decidor el método, si es a través de elección abierta o a través del Consejo.

Con esta votación, el PRD cambió el artículo 269 y le otorga todo el poder al Consejo para decidir el método de elección de la dirigencia.

El estatuto modificado dice: “Los consejeros en sus respectivos ámbitos podrán, con el 60 por ciento de votos aprobatorios de los consejeros presentes, determinar el método electivo o sistema mixto por el cual serán electos dichos cargos”.

El Consejo podrá decidir si la elección se da a través de: votación universal, libre y secreta de todos los afiliados o por candidatura única presentada ante el Consejo.

El viernes Ebrard entregó una carta a los más de mil congresistas perredistas reunidos en Oaxtepec y les pidió votar por una elección directa, universal y secreta tanto para la dirigencia del partido, como para elegir al próximo candidato a la Presidencia de la República en 2017.

Pero la mayoría no lo escuchó y ayer prácticamente la elección planteada por Ebrard quedó fuera y se abrió paso la elección que impulsaron las dos corrientes más fuertes dentro del PRD, Nueva Izquierda (NI) e Izquierda Democrática Nacional (IDN).

EL GRITO DE LAS MINORÍAS 

A los delegados del PRD que no estaban de acuerdo con las propuestas de las dos corrientes de IDN y NI, solo les restó gritar, porque en la mesa de las votaciones, fueron casi invisibles.

El sábado por la noche, la mesa de votación sobre los cambios en estatutos del Sol Azteca,se interrumpió para recibir al Gobernador de Tabasco, Arturo Nuñez, acompañado de Jesús Zambrano Grijalva, dirigente nacional del partido.

Zambrano cruzó la explanada que lo separaba del presidium de la mesa entre un coro de abucheos en contra de él, del Presidente Enrique Peña Nieto y del Pacto por México.
“¡No al Pacto! ¡No al Pacto!”, gritaban unas mujeres mientras golpeaban las mesas.

“¡Ahí viene la rata de Zambrano! ¡Fuera Zambrano!”, gritaban otros.

Mientras que “¡Fuera Peña!” se mezclaba con las porras de algunos perredistas de Nueva Izquierda (NI) que contestaron a los abucheos con un “¡Presidente! ¡Presidente!”.

Pero los gritos no perturbaron a Zambrano. El dirigente se mantuvo con una sonrisa estática, mientras acompañaba a Núñez al estrado.

Núñez empezó hablar todavía en medio de abucheos y llamó a la unidad del partido, a fortalecer a la izquierda para no permitir el avance de la derecha.

Cuando el tabasqueño concluyó su mensaje, Zambrano abandonó la mesa, igual que como entró, sonriendo.

Antes de partir, se le preguntó sobre qué opinaba del llamado que realizó por la mañana el ex Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard Casaubón, de abandonar el Pacto por México.

“El asunto del Pacto por México fue votado por una amplísima mayoría en la tarde noche de ayer. Mantenerse el PRD en el Pacto lo decidirá la plenaria mañana en la madrugada (hoy)”, dijo.

Ese mismo día, entrada la noche, sobre las mesas de los delegados que discutieron los cambios a los estatutos del partido, donde se incluyó la reeleción de los dirigentes, había un comunicado.

El documento firmado por una de las corrientes pequeñas del Sol Azteca, Democracia Deliberada, se perdía entre una bola de papeles que uno de los congresistas tenía enfrente.

No le importó que se llevarán el papel con la propuesta de Democracia Deliberda, que decía “vigésimo primer comunicado”.

“Qué bien nos cae Cuauhtémoc, pero qué daño nos puede hacer. No él, sino el hecho de que su candidatura sea una mala respuesta al problemas muy hondos”.

En el documento la corriente Democracia Deliberada indica que se invitó a dialogar a los tres candidatos a la dirigencia del PRD: Macelo Ebrad, Carlos Sotelo y Carlos Navarrete, y que ninguno de ellos mostró un verdadero proyecto para cambiar al partido.

“Las respuestas de nuestros invitados fueron pesimistas, poco claras, sombrías. El diagnóstico común: las corrientes tienen al partido atado de manos, este es un partido donde se negocian cuotas, pero donde no se deliberan ideas o posiciones, el partido no es transparente, los dineros y los gastos jamás se justifican o casi nunca se reportan. Los órganos no son autónomos, los puestos no van a los mejores”, dice.

La corriente interna del PRD acusó a quienes preteden la reelección de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, de buscar disfrazar la realidad que vive el partido.

“El traerlo de vuela tampoco es la solución, es una mascarada, y las mascaradas ocultan los problemas mientas empeoran. Incluso si frente a la mediocridad de los demás candidatos, el ingeniero es la mejor opción, esta opción no es sufiuciente. Es una solución para mantener la unidad de aquí al 2015, pero, ¿y después?”.

Diego Hernández Arrazola, miembro de la corriente, dijo que su expresión está conformada por 35 miembros y 80 simpatizantes.

Al Congreso Nacional acudieron además de Diego, Mario Arriaga Cuadriello, Saúl Vázquez Torres y Ana González, quienes acusaron al partido de padecer un “severo déficit democrático”.

“En muchas de las votaciones en las mesas de discusión, las y los congresistas no tenían conocimiento de lo votado, esperaban la indicación de su representante en la mesa para que se les instruyera en el voto”, plantearon.

Democracia Deliberada planteó que las corrientes no debaten en público y que monopolizan el reparto de posiciones en manos de sus líderes.

“No hay campañas, no se discuten ideas, no se vota por candidatos fuera de las simulaciones que, como danzas macabras, hacen las veces de un rito democrático muerto. El sistema de corrientes es un espejo aumentado del sistema nacional de partidos: un consenso de pocos para repartir prerrogativas e imponer barreras de entrada”.

El joven perredista Diego Hernández dijo que confía que las nuevas expresiones, aunque sean pequeñas, podrán cambiar al PRD.

Entre los logros que consiguieron los jóvenes fue que se aprobaran recursos para la Organización Nacional de Jóvenes de Izquierda.

Las mujeres del PRD, también obtuvieron la creación de la Organización Nacional de Mujeres, aunque para ello, tuvieron que tomar la tribuna del Pleno del Congreso durante unos minutos.

MARCELO IMPUGNARÁ; ZAMBRANO DICE QUE VOTÓ LA MAYORÍA

Ayer, antes de concluir la Plenaria del PRD, Marcelo Ebrard Casaubón anunció que impugnará ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) los cambios que realizó el Congreso Nacional del PRD este fin de semana.

Ebrard dijo que el Congreso, que cambió varios artículos del estatuto del partido, entre ellos la reelección de los ex Presidentes Nacionales y el método de elección, no fue democrático y no se discutió conforme a los reglas.

En la mesa de Estatutos quedaron cuatro artículos con disenso, sin embargo, los cambios se aprobaron en lo general y solo se discutió uno de los disensos y se descartaron los otros tres.

“El gran disenso del partido es el tema del Pacto ¿Qué hace el PRD sentado en una mesa ante la iniciativa de Reforma Energética? Una cosa que es contradictoria. Parece que el PRD defiende más al Pacto que el mismo PRI”, dijo Ebrard.

Los perredistas aprobaron en los general y particular un dictamen para permanecer dentro del Pacto por México y retirarse si Acción Nacional (PAN) y el Revolucionario Institucional (PRI) insisten en modificar los artículos 27 y 28 de la Carta Magna, para dar entrada al capital privado en el sector energético del país.

“Pero no se permite que se discuta. Las y los congresistas llevan horas esperando para exponer sus puntos de vista, esta forma de actuar es en la que no estamos de acuerdo. Además el Pacto tiene otro problema, parece que apoyamos al gobierno y a su partido cuando la economía es un desastre. Se debió deliberar que el PRD no esté, que no participe”, dijo.

Marcelo también dijo que buscará a Cuauhtémoc Cárdenas para hablar sobre el futuro del partido.

“Voy a buscar al ingeniero Cárdenas y a discutir, que si queremos mantener la unidad del partido, necesitamos atender y resolver los elementos de crítica. El mismo le dijo aquí lo que hace falta, y no sólo no le hicieron caso, sino que quedó peor”, dijo.

Ebrad no dijo si tocaría el tema de las elecciones con Cárdenas, pues con la derogación del artículo 107 que prohibía la reelección, Cuauhtémoc podría postularse a la dirigencia Nacional, si así lo decide.

“Ahorita lo que nos importa es, cuál será el futuro de este partido, que no ha completado las firmas que se plantearon hace meses[ para pedir consulta pública sobre Reforma Energética]”, indicó.

Después de la que Ebrard anunció que impugnaría el Congreso, Jesús Zambrano habló y presumió que el evento fue legal y que confiaba plenamente en que el Instituto Federal Electoral (IFE) lo avalaría.

Zambrano presumió su mayoría; dijo que fue 80 por ciento de los congresistas los que decidieron las reformas a los estatutos y la permanencia dentro del Pacto por México.

“En la mesa de Línea Política la votación a favor de que el PRD se quede en el Pacto, fue arrolladora, más de 90 por ciento”.

Tanto Zambrano como Bejarano dijeron por sepado, que Ebrard debía acatar los resultados del Congreso.

Fue lo que la mayoría de los delegados decidió. Congresistas que iban y venían por los pasillos, esperando, esperando, horas y horas a que el debate iniciara.

El debate inició, pero nada encendió los ánimos.