Phoenix, 26 Ene (Notimex).- Robert Kraft, dueño de los Patriotas de Nueva Inglaterra, salió al paso del “deflate-gate”, por lo que rechazó que su equipo haya hecho algo inapropiado y demandó una disculpa de la Liga Nacional de Futbol (NFL).
“Creo incondicionalmente que los Patriotas de Nueva Inglaterra no han hecho nada inapropiado”, dijo en rueda de prensa, después de la llegada de sus jugadores a Phoenix, para la preparación del Súper Tazón 49 contra los Halcones Marinos de Seattle.
La NFL investiga la posibilidad de que al menos 11 de los balones usados por los Patriotas, en su juego eliminatorio contra los Potros de Indianápolis, haya sido inflado a un nivel inferior a las directrices de la liga.
Kraft lamentó que la reputación del entrenador Bill Bilichik, con quien ha trabajado durante los últimos 15 años, haya sido puesta en duda por el escándalo.
“Confío que esta investigación descubrirá los hechos tal como ocurrieron el pasado domingo y la ciencia de cómo reaccionan las pelotas a cambios en la atmosfera”, indicó.
Al respecto lamentó que algunas personas hayan llegado a conclusiones basadas no en una pesquisa oficial, sino en filtraciones a los medios.
“Si la investigación no determina de manera definitiva que nuestra organización alteró la presión del aire de las pelotas, espero que la Liga se disculpe con todo nuestro equipo y en particular con el entrenador Bilichick y con Tom Brady”, insistió.
El entrenador Bill Bilichick se negó a hablar del tema, pese a la insistencia de los periodistas que abarrotaron el hotel donde se alojan los Patriotas.
“Mi atención está centrada totalmente en los Halcones Marinos de Seattle y ahí se va a quedar”, repitió ante las preguntas de la prensa.
La cadena Fox News reportó que los investigadores del incidente están enfocando su atención en personas que visitaron el casillero de los Patriotas.
Cuestionado sobre el reporte, que fue transmitido mientras los Patriotas volaban desde Nueva Inglaterra, reiteró su negativa a hablar del escándalo.
En su lugar elogió el trabajo y el talento de la organización de los Halcones Marinos de Seattle, en particular de su entrenador Pete Carroll.
Tom Brady, quien fue el último de los oradores del equipo, dijo estar motivado para ganar el juego del domingo, luego de las tribulaciones iniciales a raíz del escándalo, por lo que su expectativa es enfocarse en el partido y hacer a un lado las “distracciones”.
